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Continúa la tensa espera del momento, dicen que inminente, en que el príncipe Enrique y la actriz Meghan Markle formalicen su compromiso oficialmente. Y mientras esperamos, se suceden pasos definitivos, como el encuentro entre la famosa enamorada y la Reina Isabel II, signo inequívoco de que el noviazgo va viento en popa y a toda vela hacia una boda real.
La presentación de cualquier aspirante a formar parte de la Familia Real británica no es algo demasiado fácil de lograr: hay que recordar que al príncipe Guillermo, heredero al trono, le costó cinco años conseguir que su por entonces novia Kate Middleton fuera recibida por la reina Isabel. El encuentro con Markle sucedió el 3 de septiembre, justo después del viaje por África en el que el Príncipe podría haberse declarado.
Fue en Birkhall, en Escocia, donde la pareja de enamorados acudió junto al príncipe Carlos y Camilla en un viaje express de dos días. La Reina estaba en su castillo en Balmoral, a unos pocos kilómetros, y los cuatro se acercaron a visitar a “la abuela”. Fuentes informales han asegurado a la revista estadounidense “US” que Markle e Isabel II se cayeron muy bien. “No hay duda de que este será el primero de muchos encuentros”, dicen.
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