Planes de otoño para amantes del vino: viajes a la vendimia
Las mejores escapadas enoturísticas para disfrutar de una experiencia mágica: la vendimia.
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Se dice que ya en Egipto los faraones brindaban con vino y que el proceso de la vendimia era un ritual largo y ceremonioso, y no fueron menos importantes las fiestas dionisíacas de la época griega o las Vinalias (y las grandes bacanales) en honor a Júpiter y Venus del Antiguo Imperio Romano. Miles de años después, la tradición de la vendimia sigue viva, al menos como fiesta, y es la excusa perfecta para que los amantes del buen vino brindemos y viajemos durante el otoño.
Dicen que una bodega se juega todas sus cartas en cada nueva cosecha, y por eso, en Abadía Retuerta LeDomaine (Sardón de Duero, Valladolid), donde son pioneros es esto de abrir al turismo los viñedos, empieza la cuenta atrás para la próxima vendimia, que tendrá lugar durante la primera quincena de octubre, y en la que este año pueden participar los visitantes para convertirse en vendimiandores y conocer el proceso de elaboración del vino, desde la selección y recogida a mano, al pisado tradicional, el prensado de los primeros mostos y, por supuesto, una cata comentada. Además, los clientes del hotel podrán hacer excursiones a caballo entre los viñedos o disfrutar allí mismo de un picnic de lujo o un aperitivo campero, por no hablar de sus experiencias enogastronómicas con maridaje o sus talleres para niños.
El vino en La Rioja no es una bebida, es cultura compartida y, por eso, todo amante de estos caldos debería visitar esta región durante el otoño. Además de visitar sus más de 80 bodegas (mis favoritas, las de Muga, en Haro, aunque las más espectaculares son las de Marqués de Riscal, en Elciego, en La Rioja alavesa, diseñadas por Frank Ghery), puedes 'colarte' en sus viñedos para conocer de primera mano cómo se trabaja en este campo tan fértil e incluso experimentar el pisado de la uva o los trabajos de un viticultor, hacer un curso de cata, probar los beneficios de la vinoterapia en uno de los exclusivos 'spa' de la zona y, por supuesto, visitar sus Museos del Vino, como el de Vivanco o el de Ontañón.
Octubre es el mes de la vendimia y el momento perfecto para hacer la Ruta del Vino de Rueda, en la provincia de Valladolid, en la que tradición e innovación se unen con un sinfín de propuestas enoturísticas originales y creativas en las que, además, podrás degustar sus deliciosos caldos blancos DO: desde onocer la vendimia manual en la Bodega Campo Eliseo, en La Seca, con sus galerías subterráneas del siglo XVII; a recorrer el Jardín de Variedades de las bodegas Emina Rueda - Matarromera, en Medina del Campo, donde conocer y catar sus diferentes uvas; acudir a la XXV Feria de Productos de la Tierra, los días 6 y 7 de octubre; y, por supuesto, sumarse a la Fiesta de la Vendimia de Rueda, del 12 al 14 de octubre, declarada de Interés Turístico Regional. (+INFO, aquí)
La comarca de la Ribera del Duero se sitúa en la cuenca del río Duero, al sur de Burgos, y es una de las regiones vinícolas más importantes de nuestro país. Por ello, no es de extrañar que sean varias las fiestas que celebran la vendimia durante los meses de septiembre y octubre. Conciertos, teatro, el pisado de la uva, degustación del primer mosto y, por supuesto, catas de los mejores vinos de la D.O. Ribera del Duero en los 'wine bars' de las bodegas son solo algunos de los planes que podrás disfrutar en el corazón de la Vieja Castilla. Además, del 5 al 7 de octubre se celebra la XXVIII Fiesta de la Vendimia de Peñafiel.
Huéspedes y amantes de la enología podrán acudir a la Hacienda Zorita Wine Hotel & Spa (en Valverdón, Salamanca) el día 12 de octubre para, vestidos con delantal, sombrero, tenazas y guantes, participar en la recogida de las uvas tempranillo y syrah que rodean el antiguo convento dominico sobre el que se levanta y además vivir el tradicional acto de la pisa de la uva en un lagar centenario. Para reponer fuerzas, se servirá una parrillada a base de productos de la Organic Farm del hotel.
El valle del Duero, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es el hogar de la región vinícola con la Denominación de Origen más antigua del mundo. La vendimia de sus vides suele tener lugar durante los meses de septiembre y octubre y para el visitante es una gozada no solo admirar los coloridos paisajes del valle, sino también ser parte del proceso en alguna de las quintas de la zona de Vila Nova de Gaia y sus alrededores. Aunque no hay una fiesta de la vendimia como tal, bodegas como la Quinta do Popa o la Quinta das Carvalhas ofrecen la opción de cosechar la uva, seleccionarla y pisarla junto a profesionales para acabar con una degustación de vino mientras se comen productos de la tierra como la feijoada transmontana.
Aunque Francia cuenta con regiones vinícolas tan importantes como Burdeos, Borgoña o Champaña, una de las fiestas de la vendimia más conocidas es la que tiene lugar cada año en la colina de Montmartre. Sí, en pleno centro de París, junto al Sacré-Couer, hay más de 1.600 vides protagonistas de un evento que cada vez atrae a más curiosos: el Festival de la Vendimia en Montmartre. Del 10 al 14 de octubre se celebrará la 85º edición de esta fiesta, que combina eventos relacionados con la cultura del vino (como visitas a los viñedos, conciertos, degustaciones, un gran desfile y fuegos artificiales) con otros que forman parte del Festival de la Paz.
La idílica región de la Toscana cuenta con 29 Denominaciones de Origen, por lo que también es un lugar ideal para recorrer durante el otoño y descubrir a fondo el proceso de la vendimia a través de sus campos y sus pueblos: de Chianti a Impruneta, pasando por Villa Medicea di Lilliano, a poco kilómetros de Florencia.