Los autorretratos naturales de Cecilia Paredes, la exposición de la temporada en Pamplona

Cecilia Paredes asegura que Remedios Varo y Leonora Carrington son sus "madres", en lo que al arte se refiere. Y hay mucho de las grandes damas surrealistas en la obra de esta artista peruana: una dimensión onírica, una asociación libre de ideas, una concesión a lo irracional... Pero en Paredes también resuenan la mitología y la estética de su tierra natal, Perú, su amor por la selva, que adquirió en su exilio en Costa Rica, y su conciencia íntimamente femenina. Sus obsesiones (la pérdida, la transformación, la naturaleza) se convierten en bellísimas obras de arte.

Paredes ya había visitado nuestro país. En 2015, su exposición Oyendo con los ojos (Tabacalera, Madrid) fue muy aplaudida, y en febrero expuso en ARCO, donde Perú era país invitado, de la mano de la galería Blanca Berlín. El Museo Universidad de Navarra (MUN), en colaboración con esta galería, acaba de inaugurar en Pamplona la exposición El no retorno (hasta el 1 de septiembre). La muestra gira en torno a otro de los temas esenciales de la artista: la migración. En fotoperformances, esculturas, instalaciones y arte sonoro, Paredes expresa los sentimientos de perdida, viaje y metamorfosis que acompañan a los migrantes, y se convierte, a través de textiles o pintura corporal, en modelo y lienzo de sus propias obras.

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