Delicadas y crueles (Netflix): la serie de ballet que mezcla Cisne negro con Gossip Girl y que vas a ver de una sentada

Estos días de Navidad y vacaciones caseras piden a gritos sofá, manta y buenas ficciones para ver. Si ya has probado con estas 24 miniseries perfectas para un maratón y te encanta cualquier cosa que implique ballet (por aquí nos apuntamos tanto al clasicazo Las zapatillas rojas como a ese culebrón fuerte que fue Flesh&Bone) no te puedes perder Delicadas y crueles, uno de los últimos estrenos de Netflix .

Delicadas y crueles se ha colado en el top 10 de lo más visto de la plataforma nada más estrenarse. Una decena de capítulos que comienzan con una bailarina, Cassie, que cae desde la azotea de la prestigiosa escuela de ballet Archer en la que toma clases.

Para reemplazarla, el centro ofrece una beca a Neveah, una chica negra de un conflictivo barrio de California con mucho talento y ganas de aprovechar la oportunidad. Pronto, además de la animadversión de algunos compañeros, la competitividad de la escuela y las relaciones entre los alumnos, Neveah empezará a preguntarse si la chica a la que está sustituyendo se cayó... o la tiraron.

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Delicadas y crueles es todo lo predecible que te estás imaginando, sí, pero también así de adictiva. Uno de sus grandes pros es, sin embargo, lo que nos gusta llamar el efecto Euphoria , que no es más que incorporar a los productos audiovisuales adolescentes los conflictos y las expectativas de la generación Z .

Comenzando por la protagonista, Neveah, interpretada por Kylie Jefferson, una bailarina de ballet profesional que debuta en la interpretación con esta serie. Neveah acaba con la imagen de la prima donna blanca y frágil, y subraya lo importante que es la representación en ámbitos históricamente tan poco diversos como esta disciplina. Un camino que también transita en la vida real, por cierto, Kayoko Everhart, primera bailarina de la Compañía Nacional de Danza y ex pareja de Martiño Rivas , de raíces asiáticas y afroamericanas.

Además, personajes queer, hombres con trastorno de alimentación, un bailarín que practica el Islam... Un universo de personajes que ofrecen un reflejo más real del mundo en que vivimos aunque la trama de este (no íbamos a decirlo pero sí) placer culpable no les aporte mucha tridimensionalidad.

Si disfrutas de la danza y no te puedes resistir a series como Gossip Girl , Pretty Little Liars, Élite y compañía... Decididamente, Delicadas y crueles es la mejor peor serie que necesitas esta Navidad.