Los 12 pueblos más bonitos del País Vasco que no te puedes perder en tu próximo viaje al Norte de España

Si hay un punto en el mapa de España que merece dedicarle una visita exhaustiva, ese es el País Vasco, que tiene buena parte de los pueblos más bonitos del país . La obra de la naturaleza se complementa a la perfección con la acción humana, y juntas han creado los paisajes más bonitos que puedes ver. Estos son los 12 pueblos más bonitos de Euskadi que tienes que no puedes dejar de visitar en tu próxima excursión al Norte.

En la frontera con Francia se ubica uno de los parajes más destacados del País Vasco. Se trata de Hondarribia, un pueblo que combina la esencia del puerto con la elegancia aristocrática, y es que en el S.XIX era una de las paradas obligatorias de la alta burguesía. Sus calles recogen encanto e historia, y destaca por sus particulares casas pintadas y antiguos hogares de pescadores.

Si lo que quieres es ver un milagro de la naturaleza, no te puedes perder las marismas de Mundaka. Este pueblo costero se forma en las desembocadura de la ría que es la responsable de la creación de estos tesoros. Mundaka aúna naturaleza, modernidad y tradición en sus calles. Desde su iglesia gótica hasta su puerto deportivo, este pueblo no dejará a ningún visitante indiferente.

A orillas del río Oria se ubica Tolosa, un pueblo que recoge en sus enclaves siglos de tradición y cultura vasca. De esta localidad no solo sobresalen los múltiples atractivos turísticos y la belleza de sus calles, también destaca por su gastronomía. Las alubias de Tolosa o su arraigada tradición repostera son excusas de peso para justificar la visita a este pueblo.

No es de extrañar que el mismo Ernest Hemingway quisiera pasar por Bermeo en sus visitas a España. Y es que este pueblo reúne todo el atractivo de una localidad costera con un reducto medieval que con manifestaciones de enorme valor patrimonial y artístico. Además, cuenta con el Convento de San Francisco, una joya gótica que puede presumir de ser la más antigua de la provincia.

Elciego es parada obligatoria para los amantes del vino, y es que en este pueblo se ubican las bodegas del Marqués de Riscal. Pero más allá de este gran atractivo, Elciego cuenta con muchas otras cosas que lo convierten en uno de los pueblos más bonitos del País Vasco, como su curioso casco urbano o la iglesia de San Andrés.

En la misma línea que el destino anterior, Laguardia también destaca, principalmente, por sus bodegas, pero cuenta con un pasado medieval que todavía puede atestiguarse si se pasea por sus calles. Este pueblo conoce su atractivo y sabe sacarse potencial, por eso podrás degustar sus mejores vinos mientras paseas por las joyas históricas que salpican sus calles.

Lekeitio es el destino perfecto si quieres disfrutar de un destino vacacional que sobresalga por su belleza. Este pueblo costero cuenta con uno de los puertos más bonitos de España y un casco antiguo que te trasladará a un escenario digno de cuento. Todo esto se encuentra refugiado entre verdes colinas e islas que ponen el punto definitivo al enclave.

Si de algo sabe el País Vasco es de conseguir aunar en sus pueblos la esencia pesquera con el pasado histórico que los conforman, y eso es justo lo que ocurre, también en Getaria. Esta localidad ubicada a los pies del monte San Antón tiene tradición y tendencia, y es que lo mismo puedes visitar sus construcciones medievales que aprender más de moda en el museo dedicado a Cristóbal Balenciaga.

Para disfrutar de actividades al aire libre y conocer de primera mano el encanto de la naturaleza del bosque, nada como pasar unos días en el Valle de Ayala. Allí podrás dedicar tiempo a actividades como el senderismo, que te permitirá conocer de primera mano sus parajes naturales, y disfrutar al mismo tiempo de uno de los conjuntos medievales más bonitos del país.

Una puerta de piedra da la bienvenida a una de las localidades señoriales más especiales del País Vasco. Conserva la arquitectura tradicional de la zona que recuerda a años pasados pese al paso del tiempo, y sus calles están plagadas de edificios que merecen que te detengas en cada uno de ellos y contemples su majestuosidad.

Si buscas un paraje donde puedas disfrutar en cualquier momento del año, Ondarroa es tu lugar. No solo es otro de los maravillosos pueblos pesqueros del País Vasco, también es una joya a nivel patrimonial. Su casco histórico combina con lo pintoresco de sus casas, pintadas de colores singulares que crean un paisaje precioso en cualquier estación.

La que fue la primera Villa de Vizcaya sigue conservando ese encanto histórico pero sin ser ajeno al paso del tiempo. El visitante que tenga el lujo de pasear por sus calles se encontrará con la esencia de la tradición en pleno S.XXI recogida en museos y monumentos que recuerdan la grandeza de la que esta localidad goza desde entonces.