Chico trabajando desde su casa /
Ahorras horas de trayecto de casa al trabajo (si es que vives en una ciudad grande), no comes en tuppers, no tienes que madrugar tanto... Parece que hay muchos beneficios si trabajas desde casa, pero aunque pueda parecer un sueño para muchos, tiene también desventajas, pero para todo siempre hay consejos y soluciones.
Estás en tu habitación o salón y todo puede distraerte: suena el lavavajillas y tienes en mente vaciarlo, puedes poner tu música de fondo, te levantas mil veces a ver si el frigorífico tiene alguna novedad desde la última vez que lo abriste (hace 20 minutos)... Existen algunos consejos para concentrarnos en nuestro trabajo que nos pueden servir, pero tampoco existen los milagros: irás al frigorífico 10 veces sí o sí.
Lo primero será hacernos con una agenda (o varias). Está bien tener una grande donde puedas anotar todo lo que tienes que hacer durante la semana/mes, pero tener una de bolsillo también te ayudará para cuando no te encuentres en casa. El primer día de la semana planea lo que vas a hacer a lo largo de esta y organízalo día por día.
Ten a mano una lista de cosas por hacer, dividida en: las cosas que tienes que hacer hoy, las que no corren tanta prisa como para hacerlas hoy, pero que no te puedes olvidar de hacer y las cosas personales que se te irán ocurriendo a lo largo del día y pueden robarte mucho tiempo ya que estás en casa y muchas puedes solucionarlas en el momento, pero haz el esfuerzo por dejarlo escrito y llevarlas a cabo una vez haya terminado tu jornada.
Las alarmas serán tus compañeras durante el día para que no pierdas la noción del tiempo y una tarea no consuma más de lo que tenías en mente. Programa descansos y sobretodo la hora de la comida.
Hacer "mini" recados diarios antes de empezar o al medio día te ayudarán a romper con la monotonía de la jornada. También estaría bien tener el espacio de trabajo bien definido: si sueles pasar el día en el salón trata de trabajar desde la habitación y viceversa para cambiar de ambiente una vez termines tu trabajo y si es posible, hazte con dos ordenadores para separar lo personal de lo profesional y mantenenlos bien diferenciados para no contaminar ambos aspectos de tu vida.
Está prohibido trabajar en pijama, cámbiate de ropa antes de empezar a trabajar (te permitimos las zapatillas de andar por casa). Lo más importante será seguir en contacto con tus compañeros de trabajo (trabajen desde casa o no) así que apúntate u organiza afterworks para no excluirte de la vida real.