La gratificación inmediata funciona y gastar un poco de tiempo y dinero en cosas que pueden parecer frívolas como una nueva paleta de sombra de ojos (a pesar de que ya tienes diez en el cajón) o una cajita de bombones belgas puede alegrarnos el día. No estamos hablando de consumismo ni de compras compulsivas, nos referimos a los beneficios psicológicos que le aporta a nuestra mente el darse un capricho de vez en cuando y de cómo conseguir con hábitos sencillos la felicidad día a día . Porque esforzarse en la vida para conseguir lo que deseamos está muy bien, pero en ocasiones basta con darse un mimito con forma de una tarde libre o un pañuelo nuevo para recogerse el pelo para que nuestro ánimo cambie por completo. Y lo mejor de todo es que la ciencia lo aprueba... y si la ciencia te lo consiente, ¿quién eres tú para negártelo?
Un estudio alemán ha investigado el poder e influencia de estos pequeños placeres en nuestro bienestar y su conclusión es que, efectivamente, es mejor ceder un poco y disfrutar de la paz mental que nos aporta esta forma de autocuidado que mantener un férreo control sobre nuestra vida.
En esta investigación se tenían en cuenta dos variables, por un lado el autocontrol, que es la fuerza que nos ayuda a conseguir los objetivos a largo plazo; y por otro los objetivos hedónicos, que pueden hacer que nos despistemos en el camino hacia la consecución de esas metas. Por ejemplo, el autocontrol es el que te hace levantarte una hora antes por las mañanas para que te dé tiempo a ir al gimnasio, mientras que el objetivo hedónico te recuerda que porque te quedes en la cama media hora más no pasa nada y que ya irás mañana a hacer dominadas.
Hasta ahora se pensaba que el hedonismo le pone la zancadilla al autocontrol… y que esto no era bueno. De hecho, a lo largo de décadas de investigaciones se ha asociado a la capacidad para mantenernos firmes en la consecución de nuestros objetivos con el bienestar. Pero el estudio alemán ha dado un paso más y ha comprobado (para su sorpresa) que lo de los resultados positivos está muy bien, pero que darle chance a nuestros objetivos hedónicos es igualmente importante para que nos sintamos bien.
Los investigadores alemanes comprobaron a través de un grupo de voluntarios que aquellas personas que tenían una mayor capacidad hedónica para conseguir el placer a corto plazo estaban más satisfechos con su vida. También pudieron comprobar que el autocontrol también es capaz de ponerle la zancadilla a nuestra capacidad para disfrutar del momento mandando pensamientos intrusivos algo que se da, por ejemplo, cuando estás tomándote un café con una amiga pero bno puedes dejar de pensar en todo el trabajo que te espera después.
Como en todo, en el equilibrio está la clave. Y este equipo de psicólogos advierte que si bien es cierto que poseer un buen autocontrol se asocia positivamente con la felicidad, dejarnos disfrutar de los pequeños placeres de la vida y pasar de esos grandes objetivos de vez en cuando sin que la culpa nos arruine el momento es igualmente importante. En definitiva, intenta que lo que haces para el largo plazo no te amargue el corto plazo y viceversa. Y si mañana no te apetece ir al gimnasio y prefieres pasear para comprarte esos zapatos que fichaste hace un mes, pues hazlo.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
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