¿Por qué mordemos al besar?

Existen muchos tipos de besos. Los besos con la boca cerrada, los que das con la boca abierta desmesuradamente, los que se juegan con la lengua, los que suenan, y como no, los que incluyen mordida. Pero ¿por qué mordemos?

No hay un solo significado. Para algunos se trata de considerar algo muy sexy por el hecho de que morder los labios da sensación de intimidad y de que la otra persona quiere pasar al siguiente nivel. También puede ser como una especie de juego. Muchas parejas se besan y al mismo tiempo se muerden en forma suave jugando.

"Si bien no solemos pensar en ellos de esta manera, los labios humanos son la zona erógena más expuesta del cuerpo", afirma Sheril Kirshenbaum, autora de La ciencia del beso. Más allá del significado de cada uno de los besos y en particular de aquellos que incluyen mordidas, todos despiertan en quien los recibe una gran sensación de placer.

De acuerdo con la psicóloga Leslie Beth Wish, nuestros labios están llenos de terminaciones nerviosas sensibles que le envían al cerebro información sobre el deseo y el placer. Además, al besar se presentan cambios físicos notorios, tales como la dilatación de los vasos sanguíneos, la aceleración del pulso y la coloración de las mejillas. La psicóloga afirma, por otro lado, que al besar y morder los labios de la pareja se despiertan los químicos del amor en el cerebro, como la oxitocina, una hormona que se encarga de generar placer.

La forma en la que besamos también puede decir mucho sobre nuestra personalidad. Por ejemplo, si al besar nos muerde suavemente podemos saber que es una persona tierna y que va a disfrutar de cada momento mientras está contigo.

En cambio, morder de manera brusca puede significar falta de experiencia y que la persona se siente muy ansiosa por llegar al siguiente paso.