Polémica

¿Es Carrie Johnson la Lady MacBeth de Downing Street o un blanco fácil para las críticas sexistas?

Mientras a Boris Johnson se le acumulan los escándalos y las crisis políticas, su mujer, Carrie Johnson, también ocupa el epicentro de la polémica. Si algunos le acusan de manejar los hilos del poder en Downing Street, otros ven en esas críticas la sombra de la misoginia.

Por si la polémica en torno a un Boris Johnson cercado por los escándalos no fuera bastante o si su posición como primer ministro del Reino Unido no fuera lo suficientemente delicada, ahora el foco está puesto en su mujer (y primera dama del Reino Unido) Carrie Johnson . Sobre todo desde la publicación, la semana pasada, de una nueva biografía no autorizada : 'First Lady: Intrigue at the Court of Carrie and Boris Johnson' . Escrita por el político conservador y multimillonario Lord Ashcroft , el libro pinta un retrato poco favorecedor (pero muy influyente) de Johnson, al más puro estilo Lady Macbeth .

Ashcroft, que acusa a la primera dama de impedir que su marido gobierne "con la eficacia que merecen los votantes", cita fuentes próximas a Downing Street para retratar a una mujer increíblemente influyente capaz de promocionar a sus amigos y defenestrar a sus detractores y de dar órdenes al equipo de primer ministro, pero también a algunos ministros a través del móvil. Pero la biografía Ashcroft también dibuja a un primer ministro demasiado  preocupado por no hacer enfadar a su mujer y que siempre toma las grandes decisiones políticas después de haberlas discutido con ella en casa.

Johnson ha salido al paso de las acusaciones para denunciar lo que a su juicio son "mentiras regurjitadas" "llenas de rencor y muy dañinas". Ashcroft , por su parte, se ha defendido de las críticas sobre una actitud presuntamente misógina argumentando que Johnson ya tenía una carrera política (y muy prometedora, por cierto) antes de mudarse al 10 de Downing Street. Su posición se suma a la de Dominic Cummings, antiguo gurú mediático de Johnson, que salió por la puerta de atrás del gobierno en noviembre de 2020 y que, desde entonces, no ha dejado de señalar a la primera dama como responsable de todos los males que afectan al primer ministro .

La historia de Carrie Johnson es de sobra conocida: educada en colegiosy universidades de élite, criada en una familia de editores y políticos (su padre fundó 'The independent' y su madre trabajó allí) entró en la órbita del partido conservador nada más terminar la carrera y en 2017 ya era una de las directoras de comunicación más influyentes del Reino Unido . En 2018, su affaire con Boris Johnsson ( 24 años más mayor que ella ) saltó a las portadas de los medios británicos desencadenando primero el divorcio de él (después de 25 años de matrimonio con la abogada Marina Wheeler),y después su mudanza al 10 de Downing Street, su boda la primavera pasada y la llegada de los dos hijos pequeños de la pareja: Wilfred Lawrie Nicholas y Romy Iris Charlotte.

La primera dama más poderosa de la historia reciente

Pero, ¿tienen razón quienes acusan a Ashcroft de misógino por su retrato de Symonds o es realmente la primera dama una i nfluyente figura política sin cargo oficial en Downing Street? Todos los medios británicos (conservadores y progresistas) coinciden: el poder de la first lady es manifiesto .

Según The Guardian, Johnson, que ostenta un puesto ejecutivo en la fundación medioambiental Aspinall, es la "primera dama más poderosa de la historia reciente", capaz de hacer cambiar de opinión al primer ministro y con línea directa con muchos de los ministros de su gabinete . El conservador The Times tampoco ha evitado la polémica. "¿Qué pensar de Carrie Symonds? Dependiendo de a quién se le pregunte es el diablo en un vestido elegante, una joven inocente que desea salvar el planeta o cualquier cosa intermedia. La han llamado la Lady Macbeth de Downing Street y Carrie Antoinette. Aunque es improbable que un hombre reciba tales apodos, parece que hemos llegado a un punto en el que cualquier cuestionamiento de su papel es rechazado como sexismo velado", reflexionaba el diario hace unos meses.

The Telegraph, también de perfil conservador, abunda en esa línea y hace unos días titulaba: ' La única cosa sexista sobre las críticas a Carrie Johnson es llamarlo sexismo '.

¿La mujer más vilipendiada del Reino Unido?

Sin embargo, otros medios (como el Irish Times) y otros dirigentes conservadores, como el ministro de Sanidad Sajid Javid, han decidido jugar la carta machista para defender a Johnson . "Es sin duda la mujer más vilipendiada del Reino Unido. Arrastrada por cada error que él comete, se le hace responsable de todos sus males" , escribía la columnista del diario Anne Harris.

Y en eso tiene razón: se le ha acusado de ser la instigadora de las fiestas que han puesto en aprietos a Johnson y se ha aprovechado su perfil animalista para responsabilizarle (sin pruebas) de priorizar la evacuación de animales a personas de Kabul , una polémica que también ha puesto contra las cuerdas al primer ministro. "Puede que no parezca la cuestión feminista más acuciante, pero la persistencia en culpar y c riticar a las cónyuges de los líderes masculinos de una manera que nunca se hace con los cónyuges masculinos de las líderes femeninas, demuestra que el feminismo todavía tiene un largo camino que recorrer", continúa Harris en su argumento.

Lo que está claro es que Carrie Johnson , que acumula tantos defensores como detractores y que se he convertido en una figura tan polémica como la del primer ministro, no deja indiferente a nadie.