ACOSO SEXUAL
ACOSO SEXUAL
En 2017, 'The New York Times' sacó a la luz las agresiones sexuales a las que, durante décadas, el todopoderoso productor de cine Harvey Winstein había sometido a actrices y otras mujeres de sus equipos. Surgía el movimiento Me Too, que dijo "basta ya" al acoso en la industria del entretenimiento. Después, Harvey Weinstein fue declarado culpable en el juicio y el Me Too se convirtió en un clamor mundial. Se destaparon casos de acoso en el deporte francés y en el estadounidense, sobre todo tras la denuncia de Simone Biles y otras gimnastas; en China, aunque tímidamente; el tenor Plácido Domingo ha tenido su propio Me Too y hasta en las últimas semanas Francia se ha visto de nuevo convulsionada por los casos del #MeTooInceste.
Pero hace veinte años las cosas eran muy distintas y Nevenka Fernández, una joven concejala de Hacienda del Ayuntamiento de Ponferrada, tuvo que enfrentarse a situaciones tan injustas que hoy son difíciles de entender. Dos décadas después, y con una sociedad más concienciada con el acoso, Netflix ha decidido contar el caso en 'Nevenka', una docuserie de tres episodios que llega a la plataforma de streaming el 5 de marzo. Tras un manto de silencio que ha durado años, la propia víctima ha decidido hablar para el documental. Estas son algunas de las claves del caso que estalló en el año 2001 y que, hoy, como sociedad, nos enfrenta a nuestro propio pasado.
1. En 1999, Ismael Álvarez, de 49 años, gana las elecciones por el Partido Popular y se convierte en alcalde de Ponferrada. Nevenka Fernández, que por entonces tiene 24 años, entra al Gobierno local como concejala de Hacienda. A finales de ese año ambos empiezan una relación sentimental, pero ella decide ponerle fin después de un tiempo. En septiembre de 2000, Nevenka Fernández pide la baja del Ayuntamiento por depresión y, poniendo tierra de por medio, decide refugiarse en Madrid.
2. El 26 de marzo de 2001, Nevenka Fernández convoca una rueda de prensa para presentar su dimisión y ofrece unas declaraciones demoledoras. "Tras manifestar repetidamente a Ismael no tener claros mis sentimientos, la relación se acaba. Es a partir de ese momento cuando empieza para mí un infierno. Mi negativa provocó su acoso. Su actitud de presión se tradujo en notas manuscritas, mensajes en el teléfono móvil, cartas, comentarios verbales que prefiero no reproducir literalmente y un desprecio absoluto hacia mi trabajo y mi persona mediante descalificaciones, actos y vejaciones que atentaron contra mi integridad física y psíquica". Unas horas antes de la comparecencia, los abogados de Fernández habían presentado una querella criminal contra Álvarez en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. En la querella hay múltiples detalles de las situaciones a las que el alcalde sometió a Fernández.
3. Hasta la llegada del juicio, que comenzó el 29 de abril de 2002, Nevenka Fernández se fue quedando completamente sola. Sus compañeros de partido no la apoyaron o se pusieron, directamente, de parte de Ismael Álvarez. Incluso la Asociación para la Defensa de la Mujer Acosada (Apadema), que en un principio se había presentado como acusación popular en el juicio, decidió, el 8 de marzo de 2002, retirar su apoyo a Fernández "por haber perdido la confianza" en la víctima. "Lo único que se va a comunicar es que tanto el equipo jurídico de Apadema como la junta directiva ha decidido retirar la confianza en Nevenka Fernández. Éste es el motivo exclusivo por el que hemos renunciado y no vamos a decir absolutamente nada más", dijo la portavoz de la asociación. La familia y el abogado de Nevenka Fernández declararon a los medios de comunicación que los motivos por los que Apadema se retiraba del caso eran económicos y que habían pedido a la denunciante varios millones de pesetas para seguir con la causa.
4. El fiscal del caso, José Luis García Ancos, fue durísimo con Nevenka Fernández, a la que consideraba "una fabuladora". Durante el interrogatorio a la víctima en el juicio, el magistrado lanzó algunas 'perlas' que han pasado a la historia por su machismo recalcitrante. "¡Usted no es la empleada de Hipercor a la que le tocan el trasero y tiene que aguantarse porque es el pan de sus hijos!", llegó a decir en la sala. Y en una entrevista en la radio, García Ancos aseguró que de uno de los testimonios expuestos durante el juicio, "se desprendía que se quería decir que Nevenka, siendo una colegiala, era una putilla". Por suerte, el fiscal fue apartado del caso.
5. La sentencia se dio a conocer el 30 de mayo de 2002. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León condenó a Ismael Álvarez a la pena mínima: una multa de 6.480 euros y una indemnización de 12.000 euros a la víctima por un delito de acoso sexual. La corte no exigió la renuncia de Álvarez ni tampoco su partido, pero el alcalde decidió dimitir por voluntad propia. Ana Botella, la mujer del entonces presidente del Gobierno, José María Aznar, llegó a decir: "Hay que tener un respeto total por el alcalde de Ponferrada, que ha tenido una postura impecable al dimitir antes de que haya una sentencia firme".
6. Tanto Nevenka Fernández como Ismael Álvarez recurrieron la sentencia. La víctima pedía que se reconociera el daño psíquico que había sufrido durante meses de acoso. Antes del juicio, un equipo de psicólogos habían asegurado que Fernández sufría un "trastorno por estrés postraumático derivado de una experiencia de acoso sexual". Mientras, el ex alcalde continuaba asegurando que era inocente. Finalmente, el Tribunal Supremo le dio cierta ventaja al ex alcalde y asestó un nuevo golpe a Nevenka Fernández: desestimó el recurso de ella y rebajó la multa de Álvarez a un tercio porque decidió retirar el agravante de abuso de superioridad.
7. Nevenka Fernández ganó el caso (con matices) en los tribunales. Se convirtió en la primera mujer que ganaba una sentencia por un caso de acoso sexual de un político en España. Sin embargo, la ex concejal de Hacienda perdió el juicio social. Una semana después de conocerse la sentencia, hasta 4.000 personas se manifestaron por las calles de Ponferrada en apoyo a Ismael Álvarez. En algunas pancartas, según recogía El País, se podían leer frases como "A una gestión digna, una salida digna. Gracias Ismael". En 2011, Álvarez volvió a presentarse a las elecciones por la alcaldía de Ponferrada. Fue la tercera fuerza más votada.
8. Mientras, Nevenka Fernández tuvo que enfrentarse al escrutinio social. Incapaz de encontrar trabajo en España porque los empresarios se negaban a contratarla tras el revuelo mediático, se marchó a vivir a Reino Unido, donde fijó su residencia hasta el día de hoy.