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La sombra de la princesa Diana continúa siendo alargada, aunque más bien habría que hablar de una luminosa presencia, sobre todo en el universo de la moda. Su estilo consiguió aunar el matiz 'royal' con una personalidad inconfundible, siempre absolutamente actual y atenta a la última tendencia. De hecho, sus estilismos de los años 80 y 90 continúan siendo revisados e incesamente analizados. Uno de los aspectos que más llaman la atención en su armario es la capacidad que lady Di desarrolló para reutilizar todo tipo de prendas, desde vestidos de noche hasta outfits de día. Las modificaciones de costura fueron incesantes: vestidos excesivos de los años 80 fueron simplificados en los 90 eliminando volantes, mangas abullonadas o faldas con vuelo; tops de lunares con peplum terminaron recortados para ajustarse a una silueta minimalista más actual; hasta convirtió una famosísima banda decorada con piedras preciosas que llevó sobre la frente en un 'choker'. Algunos de sus trucos de estilismo son relevantes todavía hoy.
Su atrevimiento a la hora de combinar piezas (chaquetas con faldas y pantalones de distintos conjuntos) no puede ser mas actual. Esta combinación de torera roja con fada tubo morada continúa siendo moda hoy, y es una inspiración para encontrar nuevos mix de color que posean esta capacidad de sorpresa.
Este es uno de los trucos que vimos con más frecuencia en sus apariciones públicas: llevó las chaquetas en todas las versiones posibles. Las vimos abotonadas a modo de top, pero también absolutamente desabrochadas combinadas con camisas. Además, supo encontrar una vía intermedia cambiando un cuello mao por un escote pico gracias a una camisa con lazada. El look parece, directamente, otro.
Los conjuntos de lunares figuran entre los más icónico del armario de la princesa Diana. Los llevó en los 80, con su exceso plasmado en volantes y volúmenes peplum a la cadera, para reformarlos en los 90 en un estilo más sencillo y depurado. Aquí vemos un conjunto de top y falda tubo reformado en esta dirección.
Si aún te quita el sueño encontrar un look con estilo para algún evento importante, esta idea de Diana Spencer continúa funcionando hoy tanto como en los 90. Se trata de una revisión absoluta del clásico esmoquin: un conjunto de chaqueta y falda de color blanco que da un vuelco absoluto gracias a una pajarita negra. Va fantástica.
Otra estrategia maravillosa para darle un nuevo aire a un traje de chaqueta: añadir una camisa con cuello esmoquin y una corbata a juego. Un gesto sencillísimo que cambia totalmente la previsibilidad de cualquier americana. Eso sí: tenemos que encontrar exactamente el mismo tono y un diseño de corbata suficientemente ligero y estrecho.