Cartier reconoce, desde hace más de 15 años, al talento femenino emprendedor que trabaja para conseguir un mundo mejor. Lo hace a través de Cartier Women's Initiative, unos galardones que recompensan el trabajo en pro del medioambiente en particular –según los valores establecidos en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas– y la sociedad en general.
En su última edición, celebrada el pasado 10 de mayo, la prestigiosa firma de joyería contó con una personalidad muy especial como embajadora del evento: Amal Clooney. La abogada y activista es la primera persona en formar parte de las Cartier Voices, que darán visibilidad a este encomiable proyecto.
Los galardones se reparten en nueve categorías regionales y dos temáticas y las ganadoras optan a dotaciones económicas de entre 100 mil y 30 mil dólares. Desde 2006, cuando nació en programa, Cartier ha invertido más de 7 millones de dólares en ayudar a más de 300 mujeres.
«Cartier se enorgullece de continuar construyendo su compromiso con el empoderamiento de las mujeres, aprovechando así los negocios como una fuerza para el bien», expresaba Cyrille Vigneron, CEO y presidente de Cartier Internacional durante la 16º ceremonia de los premios.
La buena noticia es que la convocatoria del año que viene acaba de abrirse y permanecerá así hasta el próximo 30 de junio. Una oportunidad que no merece la pena perder, ya que en 2024 habrá 33 premiadas (primero, segundo y tercer puesto de cada categoría), que no solo se beneficiarán de las ayudas económicas, sino también de los recursos humanos, de formación y visibilización que ofrece Cartier.
En el caso de España, quien quiera presentarse puede optar al premio regional por Europa o bien a alguno de los dos temáticos – Pionera en Ciencia y la Tecnología y Premio a la Diversidad, Igualdad e Inclusión–, dependiendo de la índole del negocio.
La española Andrea Barber fue la primera en conseguir el galardón al mejor proyecto europeo por su software RatedPower, orientado a diseñar plantas de energía solar optimizadas, para conseguir el mayor rendimiento de esta fuente de energía verde. Barber se benefició de la máxima dotación económica y el uso de herramientas que supusieron un antes y un después en su negocio.