La ganadora de la medalla de bronce en triple salto en los Juegos Olímpicos de Tokio, Ana Peleteiro, ha acudido al Mercedes-EQ Welife Festival, el evento del año en cuanto a la sostenibilidad y a la vida saludable, para hablarnos de cómo el entrenamiento de su cuerpo no solo ayuda a su forma física, sino también a su mente. Con tan solo 25 años, la gallega ha conseguido hacer historia en el atletismo español. A los 16 años se convirtió en la campeona del mundo junior de triple salto, batiendo la mejor marca europea de todos los tiempos de la categoría juvenil, lo que le valió ser galardonada con el Premio Princesa de Asturias (actualmente, Premio Princesa Leonor). Este año también ha sido interesante para la deportista, alzándose con la medalla de plata en el Campeonato Europeo y el bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio.
La deportista ha charlado con Miriam Aguilar, directora web de Welife, en el evento presencial más importante de nuestro país sobre bienestar, salud y sostenibilidad, el Mercedes-EQ Welife Festival, que cuenta con el apoyo de Mercedes EQ como Global Partner, el patrocinio de Asana, Aveda, Bobbi Brown, Cepsa, Darphin, Garnier, Miele, Origins y Solán de Cabras y la colaboración de Ahava, Cupper, Diana, Komvida Kombucha y Welnia, entre otros. El manejo de la presión ha sido el tema estrella de esta charla y es que, para alguien que se juega en un sólo minuto todo lo trabajado durante años, la estabilidad mental es algo fundamental.
Miriam Aguilar, jefa web de Welife charlando con Ana Peleteiro. /
Peleteiro ha recordado el año 2012, cuando comenzó a adquirir popularidad con tan sólo 16 años, algo que, según sus propias palabras, «le vino grande». Y es que la gestión de las emociones es algo muy importante para la atleta, que comenzó a acudir a terapia a consecuencia de la pandemia. «Ahora soy capaz de gestionar mejor mis emociones. La terapia me ayuda a comprenderme y a saber que todo el mundo tiene derecho a estar mal, pero tienes que identificar el por qué para que esa sensación no se alargue en el tiempo».
Evidentemente, después de lo sucedido en los Juegos Olímpicos de Tokio con Simone Biles, la salud mental está en el punto de mira. «Desde que estoy en terapia soy mucho más feliz», confiesa Ana, «igual que voy al fisio, digo con naturalidad que voy a terapia. Es importante cuidarte por dentro no sólo la alimentación, sino también la cabeza». «Me sorprendió que ella no tuviese un equipo detrás que le dijera lo que necesitaba oír en ese momento», confiesa en relación a lo ocurrido con Simone Biles. Y es que para Ana Peleteiro, es muy importante rodearte de gente «que sume», y son a los únicos a los que hace caso cuando se siente juzgada.
Ana Peleteiro durante su intervención en el Mercedes -EQ Welife Festival /Andrea Vega
Ana asegura entender cómo se sintió Biles, aunque considera que se maneja muy bien bajo presión. «Nunca he vivido tanta tensión como en esa villa olípica», asegura. «Mi entrenador tiene un papel muy importante pero, en un deporte como el mío, al final todo depende de ti y te tienes que cuidar el triple. La cabeza te puede provocar lesiones. Yo he llegado a tener fiebre provocada por una mala gestión de los nervios», nos ha confesado.
Para todo ello, asegura que el coaching le ha ayudado muchísimo. «Yo empecé a cuidarme porque no podía gestionar entrenar día a día con la mejor de la historia (refiriéndose a su compañera y amiga Yulimar Rojas). Todo cambió cuando dejé de luchar contra ella y nos unimos. El sentirme acompañada hizo que dejara de setirme pequeña dentro de la pista», y es que cómo olvidarnos del abrazo sincero entre Yulimar y Ana cuando la gallega superó su propia marca, lo que le valió el ansiado bronce en Tokio.
Foto de archivo.
Una charla interesantísima la que ha mantenido Ana Peleteiro con Miriam Aguilar, directora web de Welife, sobre cómo cuidar de tu salud mental para que esto tenga también beneficios a nivel físico. Porque todavía hoy se consideran tabú todos aquellos problemas que tengan que ver con la mente, o la gestión de las emociones, y la atleta ha querido compartir sus propios problemas para normalizar las soluciones, como puede ser una buena terapia. Si nos faltaban referentes, aquí está Ana Peleteiro.