Cómo evitar la ansiedad de la depresión post vacacional y disfrutar de la vuelta a la rutina

Da igual si es una semana o un mes: el tiempo parece triplicar su velocidad en tus días de descanso. Descubre qué paradoja lo explica y cómo abrazar la rentrée sin (apenas) nostalgia.

Sesión de AntiGravity Yoga, en el Hotel ME Ibiza./D.R.

Sesión de AntiGravity Yoga, en el Hotel ME Ibiza. / D.R.

Marita Alonso
Marita Alonso

No sabemos si acabas de regresar de tus días de descanso o si llevas ya un tiempo intentando asumir la vuelta, pero es posible que te invada esa sensación de domingo prolongado asociada al fin de las vacaciones . La responsable es la paradoja vacacional de la que habla la psicóloga Claudia Hammond en Tiempo deformado.

En ese libro, explica que las vacaciones , al romper la rutina y la monotonía, generan las condiciones idóneas para que el tiempo pase más rápido. «Las vacaciones son algo efímero relacionado con la percepción subjetiva que tenemos del paso del tiempo. Nuestro cerebro las procesa como un momento especial y las guarda generando recuerdos que almacenamos de forma más prolongada.

Hay muchas personas que consideran esos días libres como una solución a sus problemas, pero hemos de tener presente la subjetividad, sabiendo que es un periodo de descanso a cuya vuelta regresamos a la rutina habitual», aclara María Sánchez, e-Health manager de Cigna España. Es precisamente ese reenganche a la rutina el causante del síndrome postvacacional, que invade al 65% de la población y que se traduce en ansiedad e irritabilidad.

«Unos días antes de incorporarnos al trabajo, tenemos que empezar a coger la rutina poco a poco y retomar los horarios. Si la empresa nos permite fraccionar las vacaciones, lo ideal es hacerlo, para tener así la sensación de que el año es más corto. También hay que buscar lo positivo, porque, por ejemplo, si no trabajaras... ¿te podrías haber ido de vacaciones?», pregunta Mar Aguilera, directora de Fundación Alares.

El Hotel ME Ibiza / D.R.

Pero, en ocasiones, ni fraccionando el descanso logramos aprovechar el tiempo. «Tenemos que intentar que las vacaciones realmente lo sean, hacer algo que nos apetezca y pensar previamente cuáles son nuestros objetivos: sentir emociones fuertes, descansar, pasar tiempo con los amigos...

También hay que tratar de tener una expectativa realista y hacer algo coherente con lo que queremos y con lo que podemos hacer, y para ello tenemos que asumir que hay que invertir recursos. El que nos sepa a poco depende de las expectativas que tengamos, de nuestra capacidad para disfrutar, de cómo hayamos programado las actividades...

Por no hablar de que hay vacaciones muy estresantes y que exigen mucha preparación, y es entonces cuando decimos que necesitamos vacaciones de las vacaciones...», añade Rafael San Román, psicólogo de Ifeel. Sus declaraciones rememoran las palabras del escritor y filósofo Elbert Hubbard: «Nadie necesita más unas vacaciones que el que acaba de tenerlas».

Escena de la serie Hacks, de HBO Max / d.r.

¿Cómo podemos conseguir entonces que esos días nos ayuden realmente a descansar? « Priorizando el descanso por encima de todo lo demás –responde Marta Rico Pérez, psicóloga en el Hospital Universitario La Zarzuela–. Hacer una lista de los objetivos que queremos cumplir y seleccionar los puntos más valiosos para nosotros para priorizarlos. La clave está en no imaginar el tiempo de vacaciones como un pozo sin fondo. Tenemos que ser capaces de analizar nuestro autodiálogo y poner límites a nuestra autoexigencia y a la necesidad de estar siendo productivos todo el tiempo», señala.

Y así llegamos a la verdadera importancia del descanso, del retiro y de atrevernos a «no hacer nada», el elefante rosa de la habitación. Mar Aguilera recomienda introducir el ocio en nuestro regreso desde el minuto uno y dedicarnos espacios personales para hacerlo.

«Una buena idea es planear pequeñas escapadas que se transformen en momentos de disfrute con los que compaginar tu vida personal con la profesional». Siguiendo esa filosofía, los hoteles ya no son solo oasis vacacionales, sino que funcionan cada vez más como el puente perfecto para llegar a la rentrée descansados y con la mente liberada, con talleres de yoga, mindfulness y tratamientos ayurvédicos.

Película Viaje al paraíso, con George Clooney y Julia Roberts, que se estrena en cines el 16 de septiembre. / D.R.

«Hemos de aprovechar el tiempo libre para desconectar y aparcar el móvil y los dispositivos digitales», explica María Sánchez, que ahonda en la importancia de no descuidar los buenos hábitos tanto en las vacaciones per se como posteriormente, cuando hemos de mantener este estilo de vida saludable para que el efecto positivo del descanso no se esfume.

El aforista Mason Cooley dijo que las vacaciones demuestran que una vida de placer está sobrevalorada... Y nosotros pensamos que lo que está infravalorado es la capacidad de permitirnos dejar abiertas pequeñas ventanas de hedonismo, descanso y retiro a lo largo del año, para que las vacaciones no nos sepan jamás a poco y para que, al volver, no pensemos que nos quedan 11 meses por delante para poder abrir otra ventana.