Sabemos dónde pasan sus vacaciones secretas Letizia y las royals: los destinos (lujosos y polémicos) favoritos de la reina, de Máxima de Holanda y de Kate Middleton

Tras los días pasados en Mallorca, en compañía de la reina Sofía y de su hermana, la princesa Irene, los Reyes de España y sus hijas ya disfrutan de sus vacaciones privadas , un destino guardado en secreto para preservar su intimidad.

En España, estos días ocultos de don Felipe y doña Letizia han sido criticados en numerosas ocasiones. Deberían, se dice, permanecer en Mallorca todo el mes de agosto, como hacía la familia real durante el reinado de don Juan Carlos. Sin embargo, ¿son los reyes españoles los únicos en tomarse unos días de vacaciones fuera de los focos? Quizá no los únicos, pero sí los más celosos de su intimidad.

Muchos esconden su destino para librarse del posible acoso de la prensa. Otros no lo ocultan, pero se refugian en lugares totalmente inaccesibles. De una forma o de otra, casi todas las familias reales se toman unos días lejos del ojo público, para descansar y disfrutar de la vida familiar lejos de miradas indiscretas.

La familia real danesa pasa sus vacaciones en Cahors, Francia, en el castillo de Cayx. La reina Margarita y su esposo, Enrique, fallecido en 2018, lo adquirieron en 1974. Es una imponente construcción medieval rodeada de viñedos. La reina fabrica su propio vino. Aquí coincide con sus hijos y sus nietos, tras pasar unos días en el castillo de Grasten, en Dinamarca, escenario de los posados estivales.

Tras los días compartidos con la familia, a los príncipes Federico y Mary de Dinamarca y sus cuatro hijos, Christian, Isabella, Josephine y Vincent, también les gusta disfrutar de unos días en el castillo de Marselisborg, en Aarhus o a bordo del barco real Dannebrog. En otras ocasiones, se han obtenido instantáneas de los príncipes disfrutando de la playa en Australia.

Los reyes de Holanda , Guillermo y Máxima se refugian con sus hijas y con la princesa Beatriz en la Toscana, en una villa que la entonces reina compró en 1973. Pero, sin duda, el destino preferido de los reyes de Holanda es Grecia. Tras pasar unos días en Nueva York, como ocurrió en 2019, o en alguna otra ciudad, los reyes de Holanda se instalan en su residencia de Kranidi, en la costa del Peloponeso griego.

Los monarcas holandeses se enamoraron primero de Mozambique, y no dudaron en adquirir una mansión en 2007, de la que tuvieron que deshacerse poco después debido a las críticas que recibieron por su alto coste. Pero entonces les entusiasmó la costa del Peloponeso y allí adquirieron una propiedad que también ha traído consigo alguna que otra polémica, por sus lujosas instalaciones. También recibieron fuertes críticas en plena pandemia cuando hicieron una escapada a Granidi y tuvieron que volver, puesto que el Gobierno había recomendado no salir del país.

La familia real sueca suele pasar unos días de descanso en el castillo de Solliden, el lugar de veraneo de la realeza sueca desde hace más de un siglo, en la isla de Oland. La estancia en Solliden siempre coincide con el cumpleaños de la princesa Victoria. Tras estos días familiares, la familia real sueca suele reservar un tiempo para pasarlo en la Costa Azul, en su residencia Saint Maxime. La realeza noruega opta por la pequeña península de Magero para los días de asueto más familiares.

El más conocido destino de vacaciones es Balmoral, en las tierras altas de Escocia, donde se instala la reina Isabel II para pasar el verano y por donde pasan, en algún momento de los meses de julio y agosto, sus hijos, sus nietos y sus sobrinos. No para los Windsor, que no posan, pero para la mayoría de las familias reales europeas, las fotos en familia ante la prensa suelen ser el final de sus agendas públicas y el comienzo de sus viajes privados.

Se sabe que la familia real española ha pasado esos días privados en el Algarve portugués, en la isla griega de Mykonos o en un crucero por el Mar Adriático. Pero estos días fuera de los focos no son exclusivos de don Felipe y doña Letizia.

No es ningún secreto que los Duques de Cambridge viajan a la isla privada de Mustique, donde pueden gozar de una intimidad imposible en cualquier otro sitio. Está ubicada en un archipiélago caribeño al que se accede en avión privado. Es la isla que más le gustaba a la princesa Margarita, hermana de Isabel II, y donde han recalado millonarios, aristócratas y estrellas del rock desde los años setenta.

Alquilan una imponente villa a la orilla del mar, que suele costar unos 30.000 euros semanales. Tras dejarse ver paseando por su residencia de Norfolk, Guillermo y Catalina ponen rumbo al Caribe, durante el mes de agosto. Pero en los dos últimos años han optado por un destino mucho más cercano e igual de idílico: las islas Sorlingas, situadas al suroeste de Gran Bretaña, allí pasó algunos veranos William con sus padres, Lady Di y el príncipe Carlos,

Los príncipes Haakon y Mette Marit también escogen un destino al sol, la Costa Azul, tras el posado veraniego con la familia. También han recalado, en estos años, en Italia, Sicilia o Portofino. En 2019, comenzaron sus vacaciones en Ibiza y Formentera, islas que adoran por sus aguas cristalinas. Antes pasan unos días en Sørlandet, donde disfrutan parte del verano en la residencia estival de Vogts Villa, en la isla Dvergsøya, frente a la costa de Kristiansand, en el sur de Noruega, donde suele tener lugar el posado familiar.

Los reyes de Bélgica, Felipe y Matilde, tras pasar unos días de asueto en el Castillo de Ciergnon, residencia de verano de la familia real belga, suelen viajar hasta la isla francesa de Yeu, cerca del Golfo de Vizcaya, para disfrutar del mar, y en la que poseen una casa. Pero la tranquilidad de la que disfrutaban en la isla quedó interrumpida en 2021 por la polémica que generó en la localidad la construcción de un anexo en la casa de mayor superficie de la permitida.

Este verano se les ha visto paseando, con sus cuatro hijos, en Croacia. Eran unas vacaciones secretas, pero un veraneante belga destapó el secreto. El veraneante viajaba en un ferry a la isla de Mljet, situado a pocos kilómetros de Dubrovnik, cuando se percató de la identidad de los pasajeros que estaban sentados a su lado. «Escuché una voz familiar y luego me di cuenta de que se trataba la reina Matilde», declaró al programa informativo RTL Info.