Laura Matamoros ha compartido en su perfl de Instagram una situación por la que hemos pasado casi todas: después de una larga jornada de playa, mar, excursión, chiringuito y carretera, nos vemos incapaces de peinar nuestro pelo . Sobre todo si, como Laura, hemos caído en la tentación de hacernos un moño o unas trenzas que se han ido enmarañando a lo largo del día, sin que hayamos encontrado un momento para deshacer el destrozado peinado. Ya sabemos lo que pasa a la vuelta a casa: nos metemos rápidamente en la ducha para eliminar los restos del camino y, a la salida, la melena está impracticable. No hay quien meta el cepillo .
Las enmarañadas trenzas de Laura Matamoros que no pudo desenredar. /
Para salir de este atolladero, lo primero y probablemente fundamental es no apurarse ni tratar de resolver la situación rápidamente y a tirones. Olvídate de cepillar enérgicamente esos nudos para recuperar el pelo liso cuanto antes: solo conseguirás ejercer una presión innecesaria sobre el cuero cabelludo y terminar con un buen montón de cabellos en el peine. De hecho, lo mejor es no tratar de cepillar mientras el pelo está húmedo, pues es el momento de máxima fragilidad de la fibra, cuando más daño puede hacerle cualquier tirón o fricción. Paciencia.
Después de la ducha, Laura Matamoros se las tuvo que ver con estos nudos. /
Para resolver este problema de nudos de la mejor manera posible, lo ideal es recurrir a un spray desenredante o un acondicionador sin aclarado, por ejemplo, el Spray Desenredante sin Enjuague de Leche de Avena, de Klorane, o el Moisture Rich Nourishing Detangling Spray, de TRESemmé. Este tipo de fórmulas facilitan el peinado y protegen el cabello con sus ingredientes vitaminados.
Mientras esperas a que se absorba el producto y el pelo pierda humendad, te conviene también recurrir a un cepillo de erizo (el Tangle Teezer o similar), cuyas cerdas están elaboradas con material sintético muy blando. Cuando el pelo se vaya secando, puedes empezar a peinar, desenredando primero puntas, luego medios y solo en último lugar peinando desde la raíz. Recuerda: ¡sin tirones!