belleza
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Ya os contábamos en nuestra sección de moda que el escote ha vuelto. A juzgar por los vestidos que han triunfado en las alfombras rojas de este 2016: blusas, vestidos y tops se abren paso casi hasta el ombligo. Una tendencia sexy que no solo está reservada a las famosas.
Sofia Vergara con un sexy escote en los Oscar 2016. /
Siempre que tu escote muestre un aspecto impecable, ¿por qué no lucirlo? Y más con la llegada del buen tiempo…
El problema es que la piel del escote suele envejecer incluso antes que la del rostro, mostrando los inevitables síntomas del paso del tiempo: arrugas y manchas. Lo que lleva a muchas mujeres a esconderlo…
La piel del cuello y del escote es muy fina y delicada.
Es una zona sensible a las diferentes etapas de la vida de la mujer: embarazo, menopausia y dietas hacen estragos en tu escote.
Es una de las zonas más olvidadas en cuanto a los cuidados y acusa mucho la falta de hidratación.
En primer lugar debes tener presente siempre una frase que seguro has oído en más de una ocasión "el rostro acaba en el escote". Recuérdalo a diario tanto a la hora de la limpieza como de la hidratación.
A partir de los 40 años, es aconsejable utilizar tratamientos específicos para esa zona, de los que puedes ver una selección en esta galería. Hasta entonces bastará con que apliques tu crema del rostro en el escote. Y no te olvides del sérum, que tiene componentes antiedad, perfectos para evitar el envejecimiento de esta zona.
Utiliza protección solar siempre. El escote está muy expuesto al sol, más que otras zonas del cuerpo, y si no aplicas cremas protectoras, se llenará de manchas. Incluso aunque no vayas a la piscina o a la playa... Protege tu escote del sol siempre que lo lleves descubierto
Evita los cambios bruscos de peso. Adelgazar de forma brusca hará que tu escote se resienta, así que intenta llevar una alimentación equilibrada y sana para que tu peso se mantenga estable.
Cuida también tu busto. Aunque una cosa es el escote y otra el busto, ambos están relacionados. Lucir un escote bonito también tiene que ver con encontrar el sujetador adecuado a tus senos y mantenerlos firmes mediante ejercicios de los que puedes ver algunos ejemplos en nuestra sección de fitness.