¿Quién dijo que las brumas faciales eran solo para el verano? Es cierto, que durante la época veraniega se usan con mucha frecuencia porque aportan frescor al rostro. Sin embargo, este tipo de productos también sirven para la temporada de frío porque ayudan a aliviar los problemas de sequedad.
La piel seca es algo muy habitual desde que comienzan a bajar las temperaturas. Los vasos sanguíneos se contraen, no llega mucho oxígeno y por tanto se pierden nutrientes en la zona de la dermis. Es por ello, que aparecen los problemas tan comunes como la irritación, o sensación de tirantez en el rostro.
Para evitar la piel seca en invierno hay muchas fórmulas. Desde preparar la piel con cremas que ayuden a reforzar la barrera cutánea, hasta aceites limpiadores calmantes, o mascarilla que aporten un buen chute de hidratación a la piel por la noche.
Pero seguramente no habías pensado en las brumas faciales o facial mists, ¿o no? Pues son un producto que se puede usar a lo largo del día para evitar en invierno que la piel se reseque y quede con un aspecto muy acartonado. Y aunque te parezcan que solo llevan agua, no es así, contienen muchos hidratantes que benefician a tu piel.
Una de las brumas faciales que puedes añadir a tu neceser esta temporada está inspirado en una de las fragancias favoritas de Elizabeth de Baviera, más conocida como Sissi Emperatriz. Fue una de las grandes emperatrices de Europa que rendía culto a la belleza.
Obsesionada con todo el universo de la belleza, se convirtió en una de las mujeres de la realeza más preocupadas e interesadas al mismo tiempo por el cuidado personal. Para mantener su belleza intacta, optaba por bañarse en aceite de oliva, o incluso lavarse el pelo con aceite de almendras y rosas.
Está claro que a Sissi le preocupaba su apariencia, pero también los productos que usaba. En su país, Hungría, se creó una de las primeras fragancias de la historia, la hungary water. Entre los objetivos de su creación, también hay diferentes versiones: puede que se creara únicamente con la intención de ser un perfume exclusivo para Sissi, o como remedio para prevenir la famosa peste negra que, por entonces, asolaba Europa.
Lo que sí está claro es que la nueva bruma facial de la marca está inspirada en Sissi Emperatriz y en ese agua purificador de Hungría. Se trata de la bruma facial Queen of Hungary Mist, un producto de belleza perfecto para el invierno. Se puede aplicar tanto por la mañana, durante el día, como la noche.
Cuenta, además, con numerosos ingredientes que la convierten en una bruma facial de tocado. Está formulada con flores de azahar, rosa, y salvia que ayudan a hidratar y purificar la piel. También cuenta con pectina de manzana que aporta más flexibilidad al tejido del rostro.
«Está elaborado a partir de esas aguas termales que tan célebre han hecho a Budapest gracias a sus numerosos beneficios. Un cóctel de minerales que mejoran la condición del tejido, lo mantienen sano, lo calman y lo reparan», explica desde Omorovicza su directora técnica, Estefanía Nieto.