El invierno unido a las bajas temperaturas y al aumento de humedad afectan a las pieles maduras, haciendo que esta esté más vulnerable a la sequedad, la irritación o la pérdida de elasticidad . Uno de los grandes problemas es, que, con el paso de los años, la barrera cutánea pierde su capacidad de retención de la humedad, lo que hace las pieles maduras sufran más intensamente los cambios estacionales.
Por este motivo, aunque tengamos una rutina adecuada a nuestro tipo de piel y a nuestras necesidades, debemos de adaptar algunos productos a los cambios de estación. El objetivo es proteger la piel, mientras que la nutrimos en profundidad con activos de cuidado . ¿Cuáles son los mejores? Nos lo explican la dermatóloga Elena Martínez Lorenzo; Rachel Keys, enfermera dermoestética y Noemí Bermúdez, CEO en Mímate Cosmetics y experta en nutrición.
El frío, por sus temperaturas extremas, produce una serie de cambios en las pieles. La doctora Martínez Lorenzo destaca que «tanto con las pieles maduras, como con las más jóvenes, se produce una alteración en la barrera cutánea. Al estar la barrera cutánea alterada a consecuencia del frío, la piel se irrita con facilidad, ya que pierde el agua producida por la propia piel».
La enfermera dermoestética Rache Keys se centra en las pieles maduras y explica que «la piel madura, con el paso de los años, pierde la capacidad para retener la hidratación debido a la disminución de colágeno y elastina». La profesional prosigue y menciona que «el frío, junto con menos humedad ambiental, hace que la piel se deshidrate más, lo que puede causar tirantez, sequedad e incluso irritaciones». Otro factor a tener en cuenta es que «la circulación sanguínea disminuye con el frío, lo que afecta la elasticidad y la luminosidad de la piel , haciéndola lucir más opaca».
Por ello, las pieles maduras necesitan cuidados específicos. La dermatóloga Martínez Lorenzo considera que «necesitamos aportar grasas, lípidos y ceramidas que ayuden a reforzar la barrera cutánea, evitando la pérdida de agua». Añade Noemí Bermúdez que «los cuidados deben centrarse en la hidratación profunda y la protección frente a las agresiones externas». Prosigue consideran que debemos «elegir productos más emolientes y ricos en ingredientes como el ácido hialurónico, las ceramidas y aceites vegetales que restauren la barrera cutánea».
Para la experta, otra recomendación es « no olvidarse de la protección solar» y esto es porque «aunque no haya sol visible, los rayos UVA siguen siendo agresivos, por lo que es fundamental usar protector solar todos los días durante el invierno». La profesional concluye considerando incluir en la rutina a « la nutricosmética , con suplementos ricos en antioxidantes y ácidos grasos esenciales, que mejoran la hidratación desde el interior».
La protección de la barrera cutánea es esencial para los cuidados de las pieles con el frío, ya que si esta se encuentra alterada nuestra piel estará incómoda y tendremos molestias. La doctora Elena Martínez Lorenzo recomienda para protegerla que «hidratemos en base al uso de productos que contengan ceramidas, ácidos grasos y lípidos para conseguir aportar a la barrera cutánea, aquello que pierden con el frío, consiguiendo restructurar la barrera cutánea y, por lo tanto, evitar la pérdida de agua».
Durante el invierno, la piel está más vulnerable y la enfermera explica que «los ingredientes que restauran la barrera cutánea son fundamentales para evitar la deshidratación». La profesional menciona y coincide con la doctora en «productos que contengan ceramidas, ácidos grasos esenciales y colesterol». Estos activos lo que hacen es « restaurar y proteger la estructura lipídica de la piel, impidiendo la pérdida de agua». También considera Keys que debemos de «evitar limpiadores agresivos y tónicos con alcohol también para no comprometer la barrera».
A lo largo de las declaraciones de las expertas han ido mencionando algunos de los activos a tener en cuenta, pero ¿cuáles son los mejores para proteger y reparar la función barrera? Elena Martínez Lorenzo recomienda que busquemos «cremas hidratantes que contengan ceramidas, ácidos grasos y lípidos, además de componentes como el ácido azelaico y la niacinamida ». La razón de estos dos últimos es que «ayudan a reducir la inflamación y controlar el posible crecimiento bacteriano que se puede dar en estas pieles irritadas, evitando por lo tanto la aparición de brotes de dermatitis o acné».
Por su parte, subraya Noemí Bermúdez que en las pieles maduras debemos de buscar activos que «proporcionen una hidratación profunda y protección antioxidante». Algunos de ellos serían «el ácido hialurónico porque mantiene la piel hidratada, ya que actúa reteniendo agua en las capas más profundas de la dermis». Otro activo a tener en cuenta serían «las ceramidas que refuerzan la barrera cutánea» y «la vitamina C que estimula la producción de colágeno y mejora la luminosidad». La profesional y fundadora de Mímate Cosmetics considera también «los aceites vegetales como el de argán o jojoba también son excelentes para nutrir la piel, mientras que los ácidos grasos esenciales (omega 6 y 3) ayudan a mantener la elasticidad».
¿Es necesario prescindir de algún activo en la rutina? La doctora Martínez Lorenzo considera que «no debemos evitar al 100% pero sí reducir la frecuencia de uso de principios activos con acción exfoliante como el retinol o el ácido glicólico». La razón de esto es que «afinan la capa más superficial de la piel, es decir, hacen más fina la barrera cutánea».
Algo en lo que coincide también Rachel Keys considerando que «los ácidos exfoliantes fuertes como los AHA y los BHA pueden dañar la barrera cutánea y aumentar la sensibilidad al frío». Por esta razón, «recomienda reducir su uso o, si se aplican, hacerlo con moderación y siempre acompañados de una hidratación profunda». En el caso de los retinoides cree que «pueden hacer que la piel se vuelva más sensible y propensa a la irritación durante el invierno», por ello, destaca que «es mejor usar estos activos sólo por la noche y, si es posible, combinarlos con productos más hidratantes».
Ultra Facial Cream es una crema hidratante que está formulada con escualano y con glicoproteína glacial. Un producto todoterreno que deja la piel más suave, reduce los daños del frío en la piel, mientras que también la tersa. Está indicada para todas las pieles, incluidas las más sensibles. (62 euros)
La crema Mushroom y Karité Story es una hidratante indicada para las pieles más secas y sensibles, dos de los problemas que aparecen con el paso de los años. Tiene propiedades emolientes y nutre en profundidad la piel, mejorando la barrera cutánea y evitando la pérdida de humedad. En su fórmula destacan las ceramidas, el escualano, el aceite de jojoba y la manteca de karité. (69 euros)
Con protección SPF 30, Multi Correxion Hydrate + Plump es una crema hidratante con ácido hialurónico que reduce las arrugas y las líneas de expresión. Es una fórmula en gel que se absorbe rápidamente y que ayuda a reponer la hidratación de la piel. (39,90 euros)
Barrier Repair Nourishing Moisturizer es una hidratante con una textura rica que repara la piel, mientras que protege la función barrera y reduce las rojeces que se pueden producir en la piel por el frío. La sensación tras su aplicación es de piel calmada. Se puede utilizar hasta en las pieles más sensibles. (82 euros)
La firma española cuenta en su gama con la crema hidratante de Células Madre de Naranja. Un producto tanto de día como de noche, indicado para utilizar en pieles secas, mixtas y que también tolerarán las pieles sensibles. Destaca en su fórmula la vitamina C, que proporciona luminosidad a la piel y que cuenta con acción antioxidante. (27,95 euros)
Hyaluronic Moisturize Sensitive Skin es una crema indicada para pieles sensibles. Su textura es ligera, mientras que previene y reduce los signos de la edad. Combina en su fórmula niacinamida, que reduce el aspecto de manchas y rojeces, con ácido hialurónico que rellena la piel. (39,90 euros)
La crema Snow Lotus Lifting Cream es perfecta para hidratar la piel con el frío, mientras que restablece la firmeza cutánea. Su fórmula contiene manteca de karité y extractos botánicos que consiguen una hidratación completa. Los péptidos de soja estimulan la síntesis del colágeno y de la elastina. (64 euros)
Extra Función Barrera es una crema regenerante y reparadora, que reduce el aspecto de la piel deshidratada y que actúa sobre la función barrera de la piel. La pueden utilizar todas las pieles y su fórmula contiene ceramidas, manteca de karité y semillas de chía. (47,99 euros)
Los sérums también pueden ser unos grandes aliados para las pieles durante el frío. Miracle Facial Oil es un producto nocturno que regenera la piel, gracias a su fórmula que combina aceites con bakuchiol, la alternativa natural al retinol. Reduce visiblemente las arrugas y las líneas finas. (120 euros)
Maui es una crema antiedad que se puede utilizar tanto en la rutina de mañana como en la de noche. Combina en la fórmula colágeno con manteca de karité, uno de los activos más beneficiosos para el cuidado de la piel madura y en época de frío. (40,95 euros)
20 de enero-18 de febrero
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