Todo nos es ajeno hasta que lo descubrimos, lo probamos y después le decimos a nuestro cerebro dónde, cómo y cuándo. Es lo que tiene el maravilloso don de la plasticidad. Que siempre nos sorprende con algo nuevo. ¿Mi última hazaña? Utilizar este esmalte de uñas semipermanente en casa como una profesional y conseguir que la manicura me dure más de dos semanas.
Lo que a mí me parecía imposible (imitar la rapidez y la precisión de una manicurista experta sin salirme de la uña y sin que se me caiga la pintura a los dos días), es hoy una realidad gracias a la práctica, pero también gracias a este pintauñas y su correspondiente kit con lámpara que descubrí hace unos años y del que ya no me he vuelto a separar.
Es el Kit Essentiel Green Flash que incluye todos los pasos, de principio a fin, para conseguir una manicura perfecta y de efecto relleno. Es de la firma francesa Manicurist y lo primero que me llamó la atención y que me convenció para dar el paso final es que se vende como la primera semipermanente que se elimina como con un quitaesmalte tradicional que retira los pintauñas express.
Este es un detalle muy importante para quienes como yo, a veces, me fallaba la constancia de volver al salón a hacerme las uñas. Por pereza o por falta de tiempo terminaba arrancándome los restos de esmalte sin ningún producto que favoreciera la retirada de la pintura. Un error de belleza que debilitaba muchísimo mis uñas al dañar las capas superiores.
Eso sí. Desde que empecé a utilizar los esmaltes semipermanentes de Manicurist, mis uñas han cambiado a mejor. Puede que tenga mucho que ver su fórmula. «Limpios para las uñas y ecológicos para el planeta, están elaborados con ingredientes de origen biológico y formulado sin ingredientes tóxicos. Además, se elimina suavemente con un quitaesmalte suave sin acetona», explican desde la firma.
En Sephora se vende el kit completo que contiene la lámpara de uñas, una base, el pintauñas de color, un top coat, un quitaesmaltes y cinco pinzas para retirar las manicuras semi. Cuesta 74,99 euros y esta es mi opinión sobre si merece la pena comprarlo o no.
¿Y cómo se utiliza? Si te han hecho las uñas en un salón seguro que puedes visualizar todo los pasos. Primero te limpian las cutículas de las uñas. Después te pulen la primera capa para alisar la superficie y que no quede ninguna imperfección. También cortan y liman según el diseño y el largo que quieras llevar. Y después empiezan a pintar.
Primero con una base, luego el color (seguramente dos capas) y después una capa final de top coat que lo que hace es proteger el color y alargar la vida de esta nueva manicura. Como paso final, terminan con aceite para las cutículas o crema de manos.
Recrear todo el proceso no es fácil a la primera. Pero tampoco a la segunda ni a la tercera. Todo es cuestión de práctica, y una vez cogida la técnica solo tardarás unos 40 minutos en hacerlo. En mi caso, a veces me hago el arreglo de uñas (cutículas y pulidor) y a veces no. Según el tiempo. Lo cierto es que me suelen durar lo mismo.
Las indicaciones para empezar a pintar por parte de la marca son: una capa de base y después un minuto de lámpara en cada mano. Lo siguiente es el color el cual aconsejan aplicar dos pasadas más un minuto de lámpara en cada una de las pintadas (cuatro minutos en total). Para terminar, se aplica el top coat, se vuelve a introducir cada mano en la lámpara durante dos minutos seguidos y listo.
- El proceso es rápido, viene muy bien indicado y no tiene pérdida. La lámpara es muy fácil de utilizar y muy intuitiva.
-Que se retire fácilmente con un quitaesmalte suave sin acetona es el punto que más valoro de esta manicura semipermanente. Me ha llegado a durar más de dos semanas intacta y lo he retirado sin dañar la uña.
- He ahorrado dinero. Puede que al principio no parezca nada asequible gastar tanto de golpe. Pero es una inversión a largo plazo si cada 15 días te gusta cambiar de manicura. Al principio cuesta reunir diferentes colores pero con el tiempo podrás tener una colección bastante decente y de la que no cansarte.
-Los esmaltes no se secan rápido. Los primeros tonos de mi colección son de 2020 y aún siguen en perfecto estado. El color se desliza con facilidad sobre la uña.
-Echo de menos que cada compra por separado de un esmalte de color diferente sea un poco más asequible. Solo uno cuesta 19,99 euros y aunque duran bastante, no son aptos para todos los bolsillos. Aún así, con dos manicuras en casa ya has rentabilizado el producto.
- No es una marca accesible porque no vende en España. La podemos encontrar en Sephora pero solo online, por lo que tienes que planear con tiempo si quieres un nuevo tono. Además, suelen estar agotados y se reponen cada mucho tiempo.
20 de enero-18 de febrero
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