Cremas en textura gel que hidratan sin dejar sensación grasa

Si tienes la piel grasa , muy probablemente hayas probado todo tipo de cremas, pero ninguna te convenza lo suficiente porque muchas dicen que son ligeras, pero no fresquitas. En estos casos, la mejor opción son las cremas en formato gel.

Ojo, porque una vez las pruebas, el amor a primera vista es inmediato. Son de rápida absorción, tienen una aplicación muy agradable y, además, están especialmente diseñadas para las pieles grasas, pero también para las fatigadas, deshidratadas o que buscan un confort inmediato.

Sus fórmulas son sencillas, minimalistas y suelen estar infusionadas con ingredientes antiedad, hidratantes y seborreguladores que le aportan a la piel todo lo que necesita sin saturarla o sin que sea insuficiente.

Esta crema gel es ideal para pieles grasas y sensibles. Ayuda a matificar la piel y reduce el tamaño de los poros. Su fórmula contiene Sebulyse, un ingrediente que regula la producción de sebo, y tiene un efecto astringente.

Es perfecta para aquellas que van buscando en su crema diaria una textura ligera y que no de sensación grasa. Lo bueno es que refresca desde el primer segundo que entra en contacto con tu rostro y no se siente pesada.

Es otra opción que destaca por ser una crema gel con una textura muy ligera y no comedogénica, que la hace perfecta para pieles grasas o para aquellas que, como con la anterior, buscan un punto extra de ligereza.

Lo que la hace destacar es su fórmula libre de aceites que ayuda a controlar el brillo y que proporciona a la vez una hidratación duradera, al mismo tiempo que refuerza la barrera de hidratación de la piel.

Finalmente, esa crema es la favorita de los expertos y de muchos dermatólogos porque está formulada específicamente para pieles grasas y con tendencia acneica que busquen reducir el nivel de imperfecciones sin perder humedad.

Contiene ácido salicílico y ácido hialurónico, que ayudan a purificar la piel, reducir granitos, brotes o espinillas y proporcionar hidratación sin dejar una sensación grasosa. Además, ayuda a controlar el brillo y mejorar la textura de la piel.