Quién es quién
Quién es quién
La modelo mexicana Adriana Abascal se convertía en la gran protagonista en el desfile de Rocío Peralta que rendía homenaje a Salvador Dalí durante la semana de la moda flamenca 2025. Pero lo hacía más que por sus habilidades en la pasarela, porque allí hacía público su noviazgo con el príncipe Manuel Filiberto de Saboya. El pretendiente al desaparecido trono italiano viajó hasta la capital hispalense para mostrar su apoyo a su nueva pareja, de la que no se separó en todo el evento.
Este romance por sorpresa, que se ha convertido rápidamente en la comidilla de la prensa y tertulias del corazón, es el último asociado al nombre de la que fuera Miss Veracruz y finalista en Miss Universo. Adriana Abascal, que a lo largo de su dilatada carrera ha sido actriz, coleccionista de arte, productora ejecutiva de televisión, escritora, diseñadora de moda e influencer, ha compartido su vida con algunos hombres tan ricos como poderosos.
Con tres esposos y otros tantos hijos a sus espaldas, su vida ha sido prácticamente como una de las telenovelas que producía antaño. Pero ella no se arrepiente de nada y mira al futuro con optimismo. Como confesaba en una entrevista reciente con 'Vanitatis', «en lo que yo creo es en la importancia de buscar la felicidad. Yo no me casé pensando en que mis matrimonios se iban a romper. Te caes y sigues mirando al futuro. Tengo más miedo a un tatuaje que no sé si lo podré eliminar».
Criada junto a una niñera que hacía brujería, lo que la aficionó al tarot y al ocultismo, cuando la joven Adriana tenía tan solo 18 años comenzó su relación sentimental con Emilio Azcárraga Milmo, alias El Tigre, y a la sazón presidente del canal Televisa. Él tenía 40 años más que ella y era un magnate todopoderoso que en su día llegó a ser el hombre más rico de América Latina, con una fortuna que se calculaba en más de 4.000 millones de euros.
La modelo fue su cuarta y última esposa. Estuvieron juntos, literalmente, hasta el final, ya que el empresario murió en sus brazos a bordo de su yate Eco, fondeado a las afueras de Miami, tras haber sido diagnosticado con cáncer de páncreas. Años después, la mexicana vendería la lujosa embarcación a otro multimillonario, Larry Ellison, el propietario de Oracle.
Su desembarco en Madrid llegó tras su boda en 2001 con Juan Villalonga, entonces presidente de Telefónica. Adriana y el que fuera gran amigo de la infancia de José María Aznar se casaron en la mansión de la novia en Los Ángeles. En la ceremonia, civil e íntima, estuvieron presentes desde Alberto Cortina a Salma Hayek o Gloria Estefan.
La pareja tuvo tres hijos –Paulina, Diego y Jimena– pero su amor duró apenas ocho años y se divorciaron en 2009. El empresario español, de 71 años, confirmaba hace apenas unos días su tercera separación, tras romper su matrimonio con la baronesa alemana Vanessa von Zitzewitz. «El mundo no se acaba por eso y hay que acostumbrarse a que ahora las relaciones empiezan y terminan y no pasa nada. Se pasa página y ya está», eran sus escuetas declaraciones a 'El Mundo'.
La mexicana encontró de nuevo el amor en brazos del ejecutivo francés Emmanuel Schreder. En este caso eligieron Ibiza para celebrar una boda muy original y divertida donde estuvieron presentes rostros tan conocidos como Naty Abascal, Eugenia Silva o Alfonso de Borbón. Tras el 'sí, quiero', el matrimonio se instaló en París hasta su ruptura en 2021.
Ahora, tras un breve noviazgo con el galerista belga Max Falkenstein, Adriana Abascal no esconde su relación con el príncipe y actual jefe de la casa real italiana, Manuel Filiberto de Saboya.
El nieto de Humberto II, último rey de Italia, se casó en 2003 con la actriz francesa Clotilde Courau y ha protagonizado diversas polémicas mientras se convertía en un conocido rostro televisivo en su país. Su última aparición sonada en los titulares fue cuando en 2023 anunció que abdicaba en su hija mayor, Vittoria. Sin embargo, meses más tarde y tras la muerte de su padre, cambiaría su decisión y retiró los derechos dinásticos de su hija.