vestidos de cine
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El cine tiene una cita especial la noche del 11 de marzo. La 96.ª edición de los Premios Óscar reunirá un año más a las grandes estrellas de Hollywood para premiar las mejores películas y, por supuesto, para presumir de los looks más espectaculares en su alfombra roja.
Si hay un evento en el que las ceebrities sacan la artillería pesada en materia de moda, esa es la noche de los Oscars. A lo largo de los años hemos sido testigos de estilismos impresionantes que nos han dejado con la boca abierta y que ya han pasado a la historia como un atractivo esencial de la gala.
A pocos días de sorprendernos con una nueva alfombra roja de los Premios Oscars repasamos 20 looks icónicos de la historia de este evento. Desde una jovencísima Gwyneth Paltrow a los vestidos más impresionantes de las últimas ediciones, estos son nuestros estilismos favoritos de los Oscars:
Aunque tras 19 Oscars Meryl Streep parezca toda una veterana en estos premios, también tuvo una primera vez. Fue en el año 1980, cuando recibió su primer Oscar por su papel en Kramer contra Kramer. Pero ese día no se recuerda solo por su galardón, su estilismo también ha pasado a la historia. La actriz escogió un vestido blanco largo con falda de vuelo y pedrerías en el cuerpo del vestido. La torera de manga larga a juego con el vestido completa uno de los outfits más emblemáticos de la historia de los Oscars.
El Oscar a Mejor Actriz en 1999 fue para Gwyneth Paltrow por su papel en Shakespeare in Love. Una ocasión así merece un estilismo a la altura y la protagonista de la noche supo dar en el clavo con un vestido que ya es parte de la memoria colectiva de estos premios. Hablamos del mítico diseño de Ralph Lauren en color rosa chicle. Los tirantes finos y el escote en V reflejaban dos de las grandes tendencias de la década ( y que ahora están de vuelta) mientras daba a la ganadora un aire principesco e inocente en su gran noche.
En 2001 Julia Roberts no solo conquistó el Olimpo del cine con su papel en Erin Brockovich, también hizo lo propio con la alfombra roja gracias a un Valentino con el que seguimos soñando más de 20 años después. Este diseño en blanco y negro inspirado en el Hollywood clásico destaca por su escote formado con tiras blancas y su capa con cola de tul y tiras similares que daban como resultado uno de los estilismos más bonitos y elegantes.
Nicole Kidman destaca por ser una de la mejor vestidas en las distintas ediciones de esta cita. Pero entre los looks más emblemáticos de la historia de Nicole Kidman en los Oscars, nuestro favorito es el vestido rojo de Balenciaga que llevó en 2007. Más allá de su corte súper favorecedor, que marcaba y estilizaba a la perfección su silueta, lo que más nos gusta es su cuello halter con lazada que demuestra que lo espectacular se encuentra también en lo más sencillo.
2009 fue un año de alegrías para Penélope Cruz porque fue el año en el que se adentró de lleno en Hollywood con su Oscar a Mejor Actriz por su papel en Vicky Cristina Barcelona. Una ocasión así no merecía menos que el Pierre Balmain vintage con el que deslumbró en la alfombra roja. Con palabra de honor y falda larga con cola abullonada, la historia del vestido lo hace aún más especial: Penélope se enamoró de él en una tienda de segunda mano de Los Ángeles y prometió que si algún día la nominaban a un Oscar, volvería a por él.
Ahora que los vestidos lenceros anuncian su regreso por todo lo alto en la próxima temporada, no podemos no acordarnos del espectacular vestido lencero que Sarah Jessica Parker lució en la alfombra roja de los Oscars en 2010. Se trata de un diseño de satén de Chanel Couture en amarillo con adornos en plata en el escote, a juego con las joyas y accesorios con el que completó el estilismo.
Otro de los vestidos rojos más famosos de estas alfombras es el que Anne Hathaway llevó en la ceremonia de 2001. Se trata de un diseño en palabra de honor de Valentino Couture 2002 que destaca por su cola abullonada con detalles florales. El recogido bajo que escogió como peinado permitió lucir al completo el vestido, que se ha consagrado como una de las joyas más bonitas de los últimos años.
Poco tardó en hacerse viral el espectacular vestido de terciopelo negro de Atelier Versace que Angelina Jolie lució en la alfombra roja de los Oscars de 2012. Con escote palabra de honor y una impresionante abertura en la pierna, la actriz se convirtió en el blanco de todas las miradas y demostró que sensualidad y elegancia no son en absoluto incompatibles. Unos labios rojos y la melena suelta fueron suficiente para complementar uno de los looks más icónicos de la historia de estos premios.
Jennifer Lawrence protagonizó uno de los momentos más divertidos de la gala de los Oscars de 2013 cuando se tropezó al subir las escaleras cuando iba a recoger su premio. Sin embargo, más allá de la anécdota, Lawrence deslumbró ese año con su vestido palabra de honor en color maquillaje con una cola voluminosa de Alta Costura de Dior digno de una diva de Hollywood.
Si hay un vestido que ha quedado grabado en la memoria de todos los amantes de la fiesta del cine es el que llevó la actriz Lupita Nyongo en 2014. El Prada de corte helénico y escote de pico en color azul celeste y con cola no solo le sentaba de fábula a Lupita, también despertó el deseo en todas de lucir un diseño similar en las próximas ocasiones especiales.
El año que Emma Stone se llevó la estatuilla por su papel en La La Land fue un triunfo doble: primero, por el reconocimiento a su trabajo y, después, por su espectacular estilismo. La actriz volvió a mirar al Hollywood clásico con todo el protagonismo del look enfocado en el vestido dorado de Givenchy con encajes y flecos confeccionado a mano.
Para su nominación a Mejor Actriz y Mejor Canción por Ha nacido una estrella Lady Gaga quiso rendir homenaje a una de las grandes divas del cine. Para los dos looks que escogió para esa noche se decantó por vestidos negros, sobrios y elegantes, con faldas de vuelo al estilo clásico. Sin embargo, lo que más sorprendió de su look fue el collar de diamantes valorado en 23 millones de euros que ya llevó la propia Audrey en 1961 y que resultó ser el complemento perfecto tanto para el Alexandre McQueen palabra de honor que lució en la alfombra roja como para el Brandon Maxwell que vistió en la gala.
La modelo y actriz escogió para esta ocasión tan especial un diseño de Carolina Herrera que pertenece a la colección nupcial de la firma. Esta elección inspirada en las grandes estrellas clásicas de Hollywood deslumbró por su sencillez y su elegancia inspirada en divas como Grace Kelly. Fue, precisamente, el resultado refinado y natural lo que ha provocado que aún hoy recordemos este look como uno de los más icónicos de la alfombra.
Otra de las caras más conocidas de estos eventos es Amanda Seyfried a quien la experiencia le ha enseñado a dominar a la perfección el dress code de estas galas. Prueba de ello fue su look de los Oscars de 2021: un vestido de Armani Privé rojo, plisado y con escote muy abierto que remata con una flada larga con mucho volumen.
Las alfombras rojas son el hábitat natural de Zendaya, que así lo demostró en los Oscars de 2022. La actriz apareció envuelta en un look dos piezas de Valentino compuesto por una falda plateada de lentejuelas con cola y un top camisa satinado cropped. Lejos de ser un vestido clásico como los que acostumbramos a ver en este tipo de eventos, Zendaya demostró que se puede estar a la altura de las circunstancias con prendas tendencia llevadas a su terreno y con un resultado espectacular.
En 2023 Ana de Armas estuvo nominada por su papel en Blonde, el biopic sobre Marilyn Monroe en el que daba vida a la protagonista. La actriz confió en Louis Vuitton para esta ocasión tan especial. El resultado fue un vestido en color plateado con pedrerías y con claras referencias al estilo de su personaje, pero de cierta inspiración flamenca por su espectacular cola de sirena con volantes.