Soltero de oro
Carlos Alcaraz ganador del Laureus 2023 al Deportista Revelación. / /
Carlos Alcaraz se ha convertido en una estrella de tal magnitud que el interés que suscita desde hace meses trasciende lo estrictamente deportivo. Y eso que se ha colado en la final de Wimbledon que disputa este domingo, 16 de julio, frente a Novak Djokovic.
Precoz número uno del mundo y junto al croata, el tenista más joven en alcanzar las semifinales de los cuatro grand slams (Open de Australia, Roland Garros, Wimbledon y Open USA) era noticia recientemente por convertirse en embajador de la firma de Louis Vuitton , pero lo es más habitualmente por su vida sentimental sobre la que rara vez se pronuncia.
Las leyendas urbanas y rumores que han surgido en torno al murciano, pupilo de Juan Carlos Ferrero, quien también fuera número 1 del mundo, han proliferado en los últimos meses. El que más fuste tenía era una supuesta relación sentimental con la cantante Ana Mena , sobre la que ¡Hola! manifestaba el pasado mes de mayo que se habían visto en varias ocasiones, porque tenían amigos comunes, y la mayoría de las veces acompañados de terceros.
La misma publicación sostenía que Carlos Alcaraz y Ana Mena habían tenido una excelente conexión, siempre bajo el paraguas semántico de la amistad, pero que ya habían dejado de tener contacto, fundamentalmente por sus apretadas agendas profesionales. Alcaraz, porque viaja constantemente por la enorme exigencia del circuito tenístico y Mena, por encontrarse de promoción de su primer álbum de estudio, Bellodrama.
La única concesión a la galería que ha hecho Carlos Alcaraz, muy discreto en lo que a su vida personal respecta, se produjo cuando a principios de este año desveló que no tenía pareja en una entrevista publicada por Vogue: «Llevo 18 meses soltero». No entró en más pormenores, pero esta afirmación nos lleva a la que fue su novia, sobre la que no se pronunció en público, y con la que comparte profesión.
Hablamos de María González Giménez, estudiante de Derecho, también tenista, y de Murcia, como él. ¿Cómo se llegó a la conclusión de que eran pareja si ninguno de los dos se pronunció sobre su relación ni los paparazzi consiguieron fotos confirmatorias de ellos juntos? Muy sencillo, como en el cuento de Pulgarcito de Charles Perrault, dejando un reguero de pistas que avezados periodistas siguieron hasta llegar a la conclusión de que dos más dos son cuatro.
La primera pista es que se seguían mutuamente y también algunos miembros de la familia de Carlos Alcaraz. Otra más elocuente fue cuando se publicó una foto en la que el tenista murciano besaba la mejilla de María González Giménez, que echaba su brazo sobre el hombro del deportista, quien escribía: «Te echo de menos». También proliferaron los piropos por parte de Alcaraz, hasta que llegó el último, que se remonta al 18 de julio de 2021. Los 18 meses de soltería son puras matemáticas y los números salen…
María González Giménez compite por el Real Murcia Club de Tenis y tiene una considerable presencia en redes sociales a través de TikTok e Instagram. En esta última tiene 12.000 seguidores, pero en los últimos tiempos no lo ha actualizado con demasiada frecuencia. Tras cesar su vínculo con Carlos Alcaraz ha desaparecido por completo del foco mediático.
Carlos Alcaraz está absolutamente centrado en su carrera profesional que le está llevando a conseguir unos números estratosféricos. Sus estadísticas en la pista son impresionantes y sus ingresos, solo por el desempeño en las pistas, en el momento de escribir este reportaje, ascienden nada menos que a más de 16,5 millones de dólares. A esta cifra habría que sumar los beneficios derivados de las marcas patrocinadoras y los contratos publicitarios.
En el horizonte está la sombra de Rafael Nadal , que se ha tomado un tiempo de descanso a la espera de regresar en la próxima temporada, que podría ser la última. Sin embargo, las comparaciones son odiosas, incluida esta, y lo alcanzado por Alcaraz le sitúa a los 20 años entre los mejores tenistas españoles de todos los tiempos.
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