Ana Soria y Enrique Ponce se encuentran ya en España. Después de que Ponce toreara el pasado viernes en Nimes, la pareja decidió quedarse el fin de semana a disfrutar un poco de la ciudad francesa, dando por terminada la escapada ayer por la noche cuando aterrizaron en Madrid.
Aunque parecía que Ana ya no acompañaría más al torero debido a la expectación generada, en esta ocasión no ha podido resistir la tentación y le ha acompañado en el ruedo de una forma muy discreta.
Ana volvió a ver, de nuevo, como el diestro escribía la ya famosa A con el pie en la plaza y aplaudía la faena de su amor con esmero. Ponce salió de la plaza a hombros y después, celebró la victoria con Ana.
Paseos, gestos de cariño, miradas cómplices... parece que nada empaña el amor de la pareja.