Por qué Enrique Ponce lo ha dejado todo: borró su matrimonio, sus redes sociales y, ahora, se retira de los toros

Conmoción en el mundo del toro por la retirada de Enrique Ponce. Aunque era de esperar, nadie se explica un comunicado tan precipitado.

Pincha en la foto para ver los romances toreros más apasionantes y escandalosos: de Enrique Ponce y Ana Soria a Paquirri y Carmina Ordóñez. /GTRES

Pincha en la foto para ver los romances toreros más apasionantes y escandalosos: de Enrique Ponce y Ana Soria a Paquirri y Carmina Ordóñez. / GTRES

Elena de los Ríos
Elena de los Ríos

El comunicado ha causado una gran conmoción a ambos lados del Atlántico: Enrique Ponce se retira. «A quienes durante más de tres décadas me han acompañado, lo primero que quiero es daros las gracias por su cariñoy apoyo incondicional, en especial en este último año de pandemia en el que decidí defender la tauromaquia, tirar para adelante y devolverle al mundo del toro lo mucho que me ha dado», escribe el diestro. «En este momento de mi temporada taurina 2021 he decidido hacer un alto en el camino y retirarme por tiempo indefinido«. Escueto, conciso y agradecido, este anuncio de Enrique Ponce ha provocado una lluvia de análisis tanto desde la crítica taurina (esta es su primera temporada sin corridas en los grandes cosos de nuestro país, por no hablar de que los aforos no alcanzan el 60%) como desde la crónica social: tanto Paloma Cuevas como Ana Soria están en el punto de mira.

Enrique ponce le da la mano a Ana Soria durante un festejo taurino en Granada, en julio del año pasado. / GTRES

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La espantada de Enrique Ponce no ha sido una absoluta sorpresa para los observadores de su última peripecia vital, pues desde que anunció su separación hace más de un año ha estado más en lo sentimental y mediático que en lo profesional. Sí ha podido serlo en su círculo de amigos y conocidos, esos para los que su estatus de maestro del toreo aún era inexpugnable. Se habla de cansancio mediático de la pareja formada por Ponce y Ana Soria, pero también de un posible embarazo de la joven estudiante de Derecho. Se acumulan las hipótesis que pueda explicar un comunicado que se ha precipitado de manera algo extraña. ¿Cómo es posible que hace no tanto se cerraran apariciones del diestro para las próximas semanas? ¿Por qué la cuadrilla no sabía de las intenciones de retirada del maestro?

Enrique Ponce y Palom Cuevas, durante la boda de Verónica Cuevas y Manuel del Pino en junio de 2014. / gtres

Las teorías son muchas, pero lo que salta a la vista es que estamos asistiendo a una auténtica mutación vital. Un corto y cambio que coincide con una fecha grabada a fuego en cualquier biografía: el medio siglo. El próximo mes de diciembre, Enrique Ponce cumplirá 50 años, de los que al menos 30 ha estado ligado al mundo del toro. Como torero lo ha conseguido todo: fama, dinero, reputación. Ha sido el número uno del escalafón y el mejor valorado por la crítica. Poco más podría lograr ya en una profesión que, además, amenaza con una extinción acelerada por la pandemia. Si a esta sensación de final de fiesta le sumamos varias lesiones encadenadas (rodilla, muñeca, hernia inguinal) y la inevitable crisis de la mediana edad, cuando una vida totalmente estructurada, previsible y encarrilada puede convertirse en asfixiante, nos encontramos con la coyuntura perfecta para una revolución vital.

Enrique Ponce y Ana Soria, durante sus mediáticas vacaciones en julio del año pasado. / GTRES

Enrique Ponce ha abordado su particular revolución a lo grande: inició una relación con Ana Soria, una veinteañera al inicio de su camino vital y a rebosar de la energía juvenil que tanto se añora a los 50; luego se borró de su aparentemente ejemplar matrimonio con Paloma Cuevas, después de 25 años de relación y dos hijas que enfilan la adolescencia; y, ahora, abandona la relación más larga, intensa y determinante que ha mantenido hasta la fecha: el toreo. «No le veo ningún drama ni ningún misterio. Un hombre como Ponce que lleva más de 2000 corridas de toros, que lleva 30 años jugándose la vida delante de un toro, tiene todo el derecho del mundo a descansar«, ha declarado Francisco Rivera en televisión.

Puede que este no haya sido un golpe sobre la mesa, pero lo parece. En cuestión de un año, Enrique Ponce ha echado abajo la vida que ha construido durante tres décadas para reconstruirla casi desde cero. Cómo será su necesidad de hacer borrón y cuenta nueva, que hasta desapareció de sus redes sociales para desenganchar definitivamente su pasado con vistas, acaso, de poder mostrarse en su nueva encarnación, probablemente como cantante de baladas románticas y boleros. ¿Podría llegar ese nuevo disco en diciembre? Algunas fuentes cercanas ya lo auguran como bombazo de Navidad, apadrinado además por Julio Iglesias y con Materia Prima como autores de parte de las canciones. Ojalá.