SU LEGADO VIVO

Los hijos de Pepe Domingo Castaño, de los que estaba muy orgulloso: Hugo, del primer matrimonio de su mujer, y Óscar, que sigue sus pasos

Pepe Domingo Castaño mantenía un relación fabulosa con ellos y hablaba de ellos con mucha satisfacción por sus cualidades humanas.

Pepe Domingo Castaño en una imagen de archivo. / / GTRES

Juanra López
Juanra López

La inesperada muerte de Pepe Domingo Castaño este 17 de septiembre generó una enorme conmoción y así quedó reflejado en las redes sociales no solo por compañeros de profesión, que ponderaron sus enormes cualidades, pero también por personas anónimas que le han seguido a lo largo de su longeva y fructífera carrera. Ahora son su vida, María Teresa Vega, y sus dos hijos, Hugo y Óscar, quienes recogen y mantendrán vivo su legado.

Pepe Domingo Castaño había estado casado en primeras nupcias con la recordada presentadora María Luisa Seco , fallecida prematuramente a la edad de 39 años víctima de un cáncer de huesos, pero su matrimonio estaba roto mucho antes de que se pudieran divorciar legalmente, en 1981. María Teresa Vega irrumpió como un torrente en su vida cuando se conocieron en la discoteca Long Play de Madrid el 23 de febrero de 1976.

María Teresa Vega ya había sido madre de un niño, Hugo, fruto de una relación anterior. Sobre su hermano, Óscar, y él habló el año pasado en una entrevista con Paco González en plena promoción de su libro Hasta que se agoten las palabras: «Hugo, que es el mayor, no es hijo biológico mío. Es hijo de Tere y nos cogimos tanto cariño que le adopté y le di mis apellidos. Es tan bueno… Es un hijo extraordinario. Óscar es tímido, como yo, desconfiado, gruñón. A mi me llamaban el Marqués de Gruñón. Es un pedazo de pan».

Su hijo mayor, socio y piloto de una compañía aérea

Hugo Castaño Vega es piloto de comercial desde 1998, como consta en su perfil de Linkedin, y socio y consejero de Plus Ultra desde 2014, unas líneas aéreas que vieron la luz en 2011 y cuyo primer vuelo se remonta a 2015. Un año antes de que existiera la compañía para la que trabaja su hijo, Pepe Domingo Castaño 2010 creó la empresa Saudade Flavia S.L. destinada a servicios de representación de medios de comunicación, según ha publicado Vanitatis, propietaria del 2,15% de las acciones de la mencionada compañía.

En cuanto a Óscar Castaño Vega podemos destacar que estudió Comunicación Audiovisual entre 1997 y 2005 en la Universidad Complutense de Madrid. Antes de licenciarse trabajó durante cuatro meses como operador de cámara en Localia Coruña. Con la carrera terminada, entre 2007 y 2012 realizó programas multicámara en directo para Canal+, Cuatro y #0.

Óscar también demostró su versatilidad como realizador de partidos de Baloncesto Euroliga y ACB, y como operador de EVS en retransmisiones de fútbol en las principales competiciones, la Liga, la Europa League y la Champions. También ha sido montador y mezclador de vídeos siguiendo los deportes que también apasionaban a Pepe Domingo Castaño, cuyos pasos ha seguido, eso sí, detrás de las cámaras.

Su hijo menor trabaja con su gran amigo Manolo Lama

Su periplo profesional siguió dos meses como editor de video para Warner Bros International Production, posteriormente trabajó como freelance unos meses y desde mayo de 2019 trabaja como realizador de El Golazo de Gol, presentado por Manolo Lama, a quien Pepe Domingo Castaño unía una estrecha relación profesional y de amistad de más de treinta años. Lama se despidió de Pepe Domingo Castaño en Carrusel Deportivo de La Ser, con unas palabras muy definitorias del carácter del periodista: «Sabía vivir y nos enseñaba a vivir».

Es enorme el patrimonio humano que ha dejado Pepe Domingo Castaño, como considerable es el material, según publicaba Vanitatis. El periodista había invertido fundamentalmente en propiedades inmobiliarias. Vivía en una casa en Aravaca de unos 300 metros cuadrados, pero también tenía un piso de 180 metros cuadrados en Las Lomas, una de las zonas más exclusivas de Marbella, que compró en los años 80.

La familia solía pasar sus vacaciones entre Marbella y una casa cerca de la playa de Mera en Galicia. Pepe Domingo también era propietario, según esta publicación, de dos apartamentos con garaje en Las Rozas. Sin duda, supo invertir bien las ganancias de una carrera muy fructífera en éxitos que le sitúa en un lugar de honor de la historia de la radio y del periodismo deportivo.