La princesa Carolina de Mónaco tiene cuatro hijos y siete nietos. /
En el siempre mediático principado monegasco, las relaciones entre los Grimaldi son siempre motivo de titulares. En lo que afecta a la princesa Carolina de Mónaco, muchas veces estos hablan de la rivalidad de sus hijas , Alexandra de Hannover y Carlota Casiraghi (posiblemente sea admiración la una por la otra y viceversa), o de las supuestas tensiones entre esta última y su madre (algo que pasa en las mejores famlias). Pero lo que se deja frecuentemente de lado es el más discreto papel de la royal como abuela.
Carolina de Mónaco es madre de cuatro hijos y abuela de hasta siete nietos. De su relación sentimental con el empresario italiano Stefano Casiraghi, fallecido trágicamente en 1990 en un accidente náutico, nacieron Andrea en 1984, Carlota en 1986 y Pierre en 1987. La princesa también tuvo una segunda hija, Alexandra, nacida en 1999 fruto de su matrimonio con el príncipe Ernesto de Hannover, con el que sigue legalmente casada.
Gracias a sus tres hijos mayores, la princesa se ha convertido en una abuela orgullosa y muy feliz. Un papel que empezó a desempeñar a los 56 años, con el nacimiento de Alexandre, conocido cariñosamente como Sacha, el primer hijo de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo . Desde entonces, se ha convertido en abuela en otras seis ocasiones. Andrea tiene también a India, nacida en 2015, y a Maximilian, nacido en 2018. Su hija menor, Carlota, es madre de dos niños, Raphaël, nacido en 2013, y Balthazar, que llegó al mundo en 2018. Por último, Pierre tiene dos hijos más: Stefano, nacido en 2017, y Francesco, en 2018.
Aunque sin duda quiere mucho a todos sus nietos y no parece probable que vaya a confesar jamás su favoritismo en público, Carolina de Mónaco parece tener una relación muy especial con Sacha Casiraghi, que ha cumplido doce años este 21 de marzo. ¿El motivo principal? Fue su primer nieto y el que la convirtió en abuela, algo de lo que solo él puede presumir.
Aunque el pequeño vive en Londres con sus padres , estos hacen todo lo posible para que pase el mayor tiempo posible junto a su abuela. Desde muy pequeño, el hermano de India y Maximiliano hizo varias apariciones oficiales como miembro de la familia real de Mónaco. Por ejemplo, ha aparecido en el balcón del palacio real en varias ocasiones con motivo de las fechas más señaladas en el principado.
Carolina de Mónaco, orgullosa de sus siete nietos. /
Aunque también la hemos visto hacer planes con otros de sus nietos –como cuando se fue de concierto con Raphäel Elmaleh – cada vez que hemos visto juntos a Carolina y Sacha, siempre se muestran muy unidos. A lo largo de los años nos han dejado imágenes muy tiernas con la princesa cogiéndole de la mano o dándole cariñosos abrazos.
No se ha prodigado en exceso Carolina de Mónaco a la hora de hablar de su papel como abuela, pero en 2019 concedió una entrevista a la revista francesa Point de vue en la que hizo algunas confidencias sobre este rol. «Intento ser una abuela como Dios manda», aseguró entonces. «Lo maravilloso es que he asumido el papel de abuela sin dejar de ser madre, porque Alexandra tenía 13 años cuando nació Sacha».
Calificando aquella transición como «perfecta», la royal añadió durante la conversación que «siempre he tenido muchos niños en casa, y me encanta sacar tiempo para cuidar de mis nietos».
En otro momento, hablando en esta ocasión para Madame Figaro, la princesa habló de su propia abuela paterna, la princesa Carlota , madre del príncipe Rainiero. «Físicamente, me parezco a ella», confesó a la publicación gala. «Era una mujer muy libre y original. Fue enfermera durante la guerra y luego dirigió un centro de rehabilitación para ex convictos», dijo sobre ella antes de recordarla como alguien «totalmente inclasificable».