in memoriam

La trágica vida de Daniele Casiraghi, cuñado de Carolina de Mónaco: de la muerte de su hermano Stefano a la de su mujer

El cuñado de Carolina de Mónaco murió víctima de una larga enfermedad en 2016 y dejó tres hijos fruto de su matrimonio con Laura Sabatini.

Carolina de Mónaco y Stefano Casiraghi, en una imagen de 1984. / gtres

Juanra López
Juanra López

La familia Casiraghi, más allá del esplendor económico y de su privilegiada posición, está íntimamente ligada a la tragedia. Dio la vuelta al mundo la terrible muerte de Stefano Casiraghi, segundo marido de Carolina de Mónaco, el 3 de octubre de 1990 en un accidente de off-shore en la bahía de Montecarlo. Veintiséis años más tarde, también de manera prematura, falleció su hermano Daniele, a los 60 años, víctima de una larga enfermedad.

El funeral se celebró en la iglesia de Santo Stefano, muy cerca del lago Como, a las 11 de la mañana. A la ceremonia acudió la propia Carolina de Mónaco, acompañada por sus hijos, Andrea Casiraghi y su hermano menor, Pierre. Los Grimaldi querían arropar con su presencia a los tres hijos del finado, Mariza y Fernanda, y al pequeño Lorenzo. Las hijas definieron a su padre con unas conmovedoras palabras en una carta leída durante la ceremonia: «Papá, eres un león».

Hasta el momento de su muerte, Daniele Casiraghi había estado viviendo en villa Cicogna, la residencia oficial de los Casiraghi en la localidad de Fino Mornasco, para arropar a su madre, Fernanda Biffi, que ha visto morir a dos de sus cuatro hijos. Solo sobreviven Rosalba Casirghi , una de las ejecutivas más poderosas de Italia, y Marco Casrigahi, que sigue con los negocios familiares inmobiliarios y de construcción en el principado de Mónaco.

Daniele Casiraghi tuvo que vivir otra tragedia en octubre de 2009, la muerte de su mujer, Laura Sabatini, que tenía solo 53 años, también víctima de una enfermedad mortal. Por cierto, había sido la madrina de bautismo de Pierre Casiraghi. La familia la despidió también en la iglesia parroquial de Santo Stefano, en fino Mornasco. Fue un golpe durísimo para toda la familia y especialmente para sus hijos.

Los Casiraghi siempre han sido muy discretos

La familia siempre había sido muy reservada y la luctuosa noticia no trascendió hasta el último momento. El funeral, de igual manera, fue para los familiares más íntimos. Solo las personas más allegadas a la familia conocían la situación que atravesaban y que, sin duda, los dejó absolutamente destrozados.

A propósito de los hijos del matrimonio debemos señalar que Marzia Casiraghi contrajo matrimonio en septiembre de 2013 en la iglesia de Monte Carmelo de Appiano Gentile, en la provincia de Como. Fue una boda que generó una enorme expectación en los principales medios de comunicación italianos ya que acudieron Carolina de Mónaco y su hijo Andrea, acompañados por su mujer, Tatiana Santo Domingo .

Carolina de Mónaco y Stefano Casiraghi, en un momento feliz de su relación. / GTRES

Su hermana, Fernanda, mantiene una gran relación con su tía, Carolina de Mónaco. No en vano fue su madrina en el sacramento de la confirmación. Se ha dejado ver en diversos eventos en el Principado y en el emblemático Baile de la Rosa, la cita de la alta sociedad internacional por excelencia en Montecarlo.

Fernanda es la más mediática de la familia, con permiso de sus primos Grimaldi. No en vano, mantiene una activa presencia en Instagram, donde podemos comprobar el lujoso estilo de vida que lleva. Apasionada por los viajes, los organiza con su propia empresa, Place2Be, en la que diseñan experiencias a medida para los clientes más exigentes.

Carolina de Mónaco tenía un gran aprecio por su cuñado Daniele y de igual manera sigue manteniendo una excelente relación con la que fuera su suegra y sus dos cuñados. De igual manera que los Casiraghi siempre han sido muy poco de mostrarse de cara a la galería, la propia hija de los recordados Grace Kelly y Rainiero de Mónaco tampoco se prodiga en eventos mucho más allá que los institucionales en el Principado y algunos otros relacionados con el mundo de la moda y la cultura.