A estas alturas nadie tiene dudas de que Enrique de Sussex es el heredero de Diana de Gales que más se parece a ella, por su capacidad para meter en líos a la familia real británica , sus entrevistas explosivas (para el recuerdo quedan sus acusaciones de racismo ante la mismísima Oprah Winfrey) y porque sus memorias van a ser tan jugosas como las que escribió Andrew Morton sobre su madre. Pero en este último escándalo, al menos, el príncipe británico no está solo, cuenta con la ayuda de un reputado periodista norteamericano, J. R. Moehringer.
La amistades hollywoodienses de la pareja real británica fueron las responsables de poner en contacto al hijo menor de Lady Di con el periodista. Además de su carrera en los medios J.R. Moehringer es escritor y su trabajo está muy bien considerado, de hecho ha ganado en una ocasión el premio Pulitzer, algo así como el Nobel del periodismo.
J. R. Moehringer se fogueó en grandes medios estadounidenses, como el New York Times, hasta que escribió el libro que llamó la atención de André Agassi: El bar de las grandes esperanzas, donde relataba su infancia con un padre ausente y todos los personajes que conoció en esta etapa de su vida y marcaron su destino y capacidad para contar historias. Gracias a esta narración el periodista colaboró con el campeón del tenis mundial y juntos escribirían la autobiografía que conmovería a todo el mundo: Open.
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Con semejante éxito editorial bajo el brazo no es extraño que George Clooney haya confiado en J.R. Moehringer sus propias memorias y que estén colaborando mano a mano para escribir un guión de cine basado en ellas. Por supuesto Amal Clooney, como buena a amiga de Meghan Markle que es, puso en contacto a los royals con el hombre que se encarga de poner orden y concierto a la narración que el príncipe Enrique quiere hacer de su vida y que tanto miedo está propagando en los Windsor aunque todavía no se ha publicado una palabra (habrá que esperar a 2022 para ver el resultado final).
Muchos son los que afirman que para la reina Isabel II el anuncio de estas memorias ha sido la gota que colma el vaso y que está hasta la coronilla de los duques de Sussex y su capacidad para hablar de la familia real en todos los soportes habidos y por haber. Pero la revista alemana Bunte apunta a quien peor lo va a pasar cuando las memorias se publiquen es la futura reina de Inglaterra: l a duquesa de Cornualles, la ex Camila Parker Bowles.
Según algunas fuentes, la tensa relación entre Enrique de Sussex y Camila, la actual mujer del príncipe Carlos, podría quedar expuesta en el libro que preparad en duque de Sussex. /
Según la publicación alemana a la reina Isabel II le preocupa que lo que cuente Enrique en sus memorias suponga una crisis para la imagen de los futuros reyes, el príncipe Carlos y su mujer, y muy especialmente para Camila, que nunca ha sido la favorita de la opinión pública ni de los medios más amarillistas británicos (que son muchos).
Durante años, la ex amante del príncipe, ahora su mujer, ha sido criticada y ridiculizada en público. Pero unas declaraciones de Enrique sobre cómo se comportó Camila con él tras perder a su madre puede ser todo lo que necesitan los medios para volver a cebarse con ella y dar al traste con el trabajo en favor de la corona que la duquesa ha realizado desde que se casó con el príncipe Carlos en 2005.
Una fuente anónima, pero cercana a la casa real, ha apuntado en el Daily Mail que « si Enrique documenta su tensa relación en el libro, podría ser muy perjudicial en un momento en el que el príncipe Carlos está sentando las bases para que ella se convierta en reina«. ¿Guardará silencio Enrique sobre su madrastra? Ahora mismo, sólo J.R. Moehringer lo sabe.