Qué está haciendo Harry con las joyas de su madre: la guerra de Guillermo contra su hermano por la herencia de Diana de Gales

Netflix calienta motores para la última temporada de The Crown convirtiendo a Diana de Gales en un fantasma que se aparece a la familia real y al príncipe Guillermo no le ha gustado nada la creatividad de la plataforma de streaming. «Es increíblemente hiriente. El príncipe no lo verá, pero estará muy disgustado» ha sido el comentario de un amigo íntimo del heredero al trono británico al The Daily Beast.

Si algo ha quedado claro con la actitud del príncipe de Gales y de la lectura de «En la sombra», el libro del príncipe Harry , es que ninguno de los dos hermanos reales parece haber superado de una forma mentalmente saludable la pérdida de su madre. Es más, según la revista alemana Bunte, el legado materno es ahora el nuevo campo de batalla entre los hijos de Carlos III.

Un movimiento que resulta cuanto menos chocante si tenemos en cuenta que las terceras en discordia en esta pelea, Kate Middleton y Meghan Markle , han sido durante años las más empeñadas en «parecerse» a la princesa fallecida o incluso en rendirle un velado tributo en cada una de sus apariciones públicas, posados posparto incluidos.

De este enfrentamiento entre cuñadas Kate Middleton ha salido victoriosa y ha barrido por completo a Meghan Markle, y hasta medios especializados en la familia real británica, como Histories royales, ya la consideran la heredera natural de Diana de Gales a la que «rinde homenaje, pero sin copiarla».

En contraposición a los celebrados homenajes de la británica, Meghan ha tenido que conformarse con escenas rocambolescas como las protagonizadas en su documental de Netflix , enseñando a su hija Lilibet fotos de su abuela muerta (o como cuando el propio Harry establece paralelismos entre lo sufrido por su esposa y lo padecido por su propia madre).

A pesar de que Kate Middleton ha batido a la exactriz por goleada el príncipe Guillermo sigue siendo quisquilloso en cuanto algo roza, aunque sea de lejos, la imagen de su madre, y esta actitud afecta a casi cualquier cosa.

Según Bunte, el nuevo detalle de la vida de su expatriado hermano que ha molestado a William ha sido la desaparición del anillo de pedida del dedo de Meghan Markle. Mientras el resto del planeta especulaba sobre el hecho de que dicha desaparición podría significar que oficialmente hay problemas en el matrimonio de los Sussex , esta posibilidad a Guillermo le importó bien poco. A él lo que le preocupa es la joya en sí.

Mientras que el anillo de compromiso que Diana de Gales recibió del príncipe Carlos acabaría convertido en el que Guillermo le daría a Kate Middleton para pedirle matrimonio, Meghan y Harry tuvieron que «conformarse» con otra pieza del joyero materno para su propio compromiso.

El anillo de pedida de Meghan Markle estaba compuesto por tres diamantes y fue diseñado por el propio Harry. El diamante central representaba a Botsuana, país en el que se enamoraron, y los dos diamantes que lo rodeaban, uno a cada lado, pertenecieron a Diana de Gales y formaban parte de su colección privada… colección que ahora custodia el príncipe William.

No es la primera vez que Harry y William se enfrentan por las joyas de su madre. La prensa británica filtró que al príncipe William le había molestado también la elección de joyería que hizo la duquesa de Sussex el día de su boda. Concretamente cuando Meghan Markle lució en su dedo, camino de Frogmore House, el anillo de aguamarina de Lady Di, uno de los más simbólicos de su colección.

La joya es un casi un símbolo en la prensa rosa porque fue la primera que se compró la princesa de Gales después de firmar su divorcio con Carlos III , de hecho, la usó para reemplazar su anillo de casada. Una elección de mal gusto a ojos del hermano mayor de Harry por parte de los recién casados.

Ahora, según el Mirror y la revista New Idea, es la «desaparición» de dos pequeños diamantes maternos del dedo de Meghan Markle los que han provocado la preocupación del heredero del trono que quiere saber dónde se encuentran las joyas de su madre.

Por qué Meghan Markle no los lució «orgullosamente» en los últimos Juegos Invictus, es la duda que corroe al príncipe William tanto, que hasta le ha confesado su preocupación a sus íntimos. ¿Qué está haciendo su hermano con las joyas de su madre? Una duda con la que tendrá que convivir porque, a pesar de las preguntas de la prensa, los Sussex guardan silencio absoluto cuando les interrogan por sus anillos de compromiso.