PIezas históricas
PIezas históricas
La infanta Margarita ha sido siempre de una gran discreción, pero no por ello dejó de lucir algunas de las joyas más bellas de la familia real española. En ocasiones, pidió prestada tiara a su hermana, la infanta Pilar –la de zafiros– y su cuñada, la reina Sofía, la de tiara de conchas de Cartier. Pero doña Margarita tiene un joyero propio, heredado en gran parte de su madre, la condesa de Barcelona, María de las Mercedes.
Al igual que su hermana, la infanta Pilar, fallecida en 2020, doña Margarita atesora importantes joyas históricas, que proceden de la reina María de las Mercedes y de la reina María Cristina y que llegaron hasta su madre, la Condesa de Barcelona, como regalos de boda o herencia.
Son piezas bellas y muy valiosas, que la infanta Margarita ha lucido en numerosas ocasiones. Repasamos algunas de estas piezas que cuentan también la historia de la familia Borbón, al margen de las joyas de pasar, que utiliza hoy la reina Letizia.
La infanta Margarita con el broche de zafiro, junto a la reina Sofía. /
Esta pieza es herencia de la Condesa de Barcelona y una de las más importantes del joyero de doña Margarita. Se trata de un zafiro cuadrado rodeado de dos filas de diamantes. Fue un regalo de bodas de Alfonso XIII a la princesa María de las Mercedes de Borbón cuando se casó con dos Juan, en 1935.
Según explica The Royal Watcher, el broche era originalmente un colgante que se llevaba suspendido de un f ino collar de chatones de diamantes. Se dice que, originalmente, este collar y colgante fueron un regalo de bodas para la princesa Beatriz, la hija menor de la reina Victoria de Inglaterra, de su cuñado, el príncipe de Bulgaria, cuando se casó con el príncipe Enrique de Battenberg, padre de Victoria Eugenia, en 1885.
Parece que Victoria Eugenia lo llevó en la coronación de su tío, el rey Eduardo VII, en 1902.La infanta Margarita lo lució en el banquete de Estado ofrecido a la reina Isabel II, en 1988. Desde entonces l o ha utilizado en numerosas ocasiones, pero sin el collar. Parece que los zafiros son una de sus piedras favoritas.
No se conoce bien el origen de este conjunto, pero muy probablemente se trate de una adquisición personal de la infanta. Margarita lo utilizó en la Misa de Proclamación de su hermano, el Rey Juan Carlos I, en 1975. Este conjunto de topacios y diamantes está compuesto por un broche oblongo formado por un gran topacio engastado en un marco de diamantes, unos pendientes, un anillo y una pulsera.
La infanta empezó a lucir este broche antes de su boda, en 1972, y, más tarde, estrenó los pendientes, el anillo y la pulsera. Es posible que las piedras le fueran entregadas como regalo de bodas. La Infanta Margarita también lució el broche en la boda de la Gran Duquesa María Vladimirovna de Rusia y el Príncipe Francisco Guillermo de Prusia. Luego lo ha lucido en algunos banquetes de Estado, como el celebrado en honor de Balduino y Fabiola de Bélgica, en 1978. En ocasiones solía colgar dos grandes perlas del broche.
La infanta Margarita con la tiara de los broches de diamantes. /
Esta tiara, formada por dos broches gemelos de diamantes que pueden utilizarse por separado fue un regalo de boda que recibió la condesa de Barcelona cuando se casó con Don Juan, en 1935. Margarita utilizó los broches en el baile previo a la boda de Juan Carlos y Sofía, en 1962, y también en el de su hermana, la infanta Pilar, en 1967.
En esta ocasión, llevó uno de ellos como prendedor de pelo. A finales de los años sesenta, Margarita comenzó a lucir ambos broches en una tiara, en distintos acontecimientos reales y familiares. En los ochenta, la Infanta añadió a su tiara pequeñas perlas y fue así como la lució a partir de entonces. Parece que fue en 1996, según The Royal Watcher, cuando se vio la tiara por última vez.
Este broche perteneció a la condesa de Barcelona que lo heredó de su madre, la princesa Luisa de Orleans y ésta de su madre, María Isabel de Orleans y Borbón, la abuela y la bisabuela respectivamente del rey Juan Carlos I. Doña Margarita lo lució en la ceremonia de ascensión al trono del rey Felipe VI de España en 2014. Este broche es un lazo de diamantes y tiene una perla redonda en el centro.
También se le puede añadir una perla grande en forma de lágrima como colgante, pero la infanta casi siempre lo ha lucido sin la lágrima. Luisa de Orleans, madre de la Condesa de Barcelona, lo llevó, en 1935, durante la boda de su hija, María de las Mercedes, con el Infante Don Juan. Margarita lo lució en la celebración de las bodas de plata de los eméritos y en el funeral de la condesa de Barcelona.
Margarita de Borbón luciendo el broche de las hojas de fresa. /
Este broche perteneció a la reina María Cristina y, más tarde, a la condesa de Barcelona. Alfonso XIII obsequió a su segunda esposa, la archiduquesa María Cristina de Habsburgo-Lorena, varias piezas de joyería por su matrimonio, en 1879, entre ellas un broche compuesto por un conjunto de diamantes rematado por ocho hojas de fresa o madroño.
La reina María Cristina lució esta pieza con frecuencia. Pero parece que fue en parte desmontada y convertida en varios broches más pequeños y lucidos como gargantilla. Años después, María de las Mercedes lució un par de estos broches, probable obsequio de su suegro, el rey Alfonso XIII. En 1953, María de las Mercedes lució los Broches de hojas de fresa en la Coronación de la Reina Isabel II, en la Abadía.