El príncipe Guillermo y Kate Middleton sienten una «intensa ansiedad» ante la idea de tomar en el futura las riendas de la monarquía cuya cabeza visible es ahora Carlos III , según señala una experta en la realeza británica. Desde que en febrero anunciara públicamente su diagnóstico de cáncer , el monarca, de 75 años, se ha visto obligado a poner en pausa gran parte de su agenda real y ha asumido menos obligaciones de cara al público. Esto ha redundado en más trabajo para sus familiares y también en especulaciones sobre su hipotética sucesión en el trono.
Al mes siguiente, su nuera revelaba que ella también estaba luchando contra el cáncer, al mismo tiempo que el Rey seguía recibiendo un tratamiento cuyos efectos están siendo positivos y alentadores, según han señalado recientemente fuentes del Palacio de Buckingham. Pero el hecho de verse en el centro de las conversaciones sobre el futuro de la Corona en su país, puede estar afectando negativamente a los jóvenes príncipes.
«La noticia del cáncer de Carlos III ha puesto a Guillermo y Kate en una aterradora proximidad al ascenso al trono«, ha declarado al diario 'The Mirror' la que fuera directora de 'Vanity Fair', Tina Brown. »La perspectiva de este hecho, según me han comunicado, les está causando una intensa ansiedad«.
Una vez que Guillermo, el heredero al trono, se convierta en el nuevo monarca del Reino Unido, se espera que Kate Middleton, de 42 años, sea coronada Reina al igual que Camilla y asuma muchos más compromisos oficiales que antes.
Vídeo. 5 curiosidades de Kate Middleton /
Disfrutar una vida de lujos palaciegos no es sinónimo en muchas ocasiones de tener una sólida mental. Kate Middleton está lejos de ser la única princesa que en los últimos años ha debido enfrentarse a problemas de este tipo. Por ejemplo, según informaron en su día los medios galos, la princesa Charlène de Mónaco estuvo «deprimida, aislada y triste» durante su embarazo de los principitos Jacques y Gabriella .
Del mismo modo, la princesa Mette-Marit sufría de una terrible ansiedad cada vez que se enfrentaba a la posibilidad de coger un avión. «Ya no tengo miedo a volar. Si tienes miedo a volar, empieza a meditar. No bromeo. Me ha ayudado, ya no tengo miedo. Y yo tenía miedo. De verdad», declaraba la noruega en una entrevista de 2004.
Kate Middleton en una imagen reciente. /
Pero es en la Familia Imperial de Japón donde se han dado más casos de 'princesas tristes', como las ha apodado la prensa. Antes de ser emperatriz, la princesa Masako, esposa entonces del heredero Naruhito, arrastra durante décadas una grave depresión crónica, causada al parecer por las presiones para que diera a luz a un varón. En los últimos tiempos parece haber experimentado cierta mejoría, que por ejemplo le permitió realizar el año pasado su primer viaje al extranjero, con destino a Indonesia.
En el país del sol naciente, también la sobrina de Masako, la princesa Mako, padece desde años lo que se ha diagnosticado como un «trastorno de estrés postraumático debido a la excesiva cobertura mediática» de su relación con su pareja, el plebeyo Kei Komuro, desde el inicio de su noviazgo en 2017. El interés de la prensa aumentó exponencialmente después de que a principios de 2018 saliera a la luz un escándalo financiero en el que estuvieron implicados la madre de Komuro y el antiguo prometido de esta. En 2021 Kei y Mako contrajeron matrimonio y ahora llevan una discreta y anónima vida en Nueva York.
Mientras dos altos cargos de la Familia Real continúan con sus tratamientos para sus respectivos diagnósticos de un tipo no especificado de cáncer , la Corte se ha visto obligada a sufrir una importante remodelación.
La reina Camilla, la princesa Ana, el príncipe Eduardo y su esposa, Sophie , duquesa de Edimburgo, han asumido cada uno un papel más activo en ausencia del Rey y de la princesa de Gales.
Sin embargo, no parece que Carlos vaya a permanecer fuera de combate mucho tiempo. El monarca, que hoy celebra su 19 aniversario de boda con su esposa Camilla, habría activado sus planes para realizar este otoño una intensa gira de dos semanas por Australia, Nueva Zelanda y Samoa.
Carlos III de Inglaterra en una imagen reciente. /
«El Rey está ansioso por partir después de un tiempo considerable de descanso debido a su diagnóstico de cáncer», manifiesta una fuente de Buckingham a 'The Sun', añadiendo que Carlos III está «encantado» de que su tratamiento contra el cáncer haya comenzado bien.
«Sabe que no puede quedarse de brazos cruzados y se siente muy optimista después de que sus últimas pruebas médicas le permitieran asistir al servicio religioso del Domingo de Pascua y pasar tiempo con sus compatriotas, algo que había echado de menos«, añade el diario inglés.