Así va a ser la Semana Santa más difícil de Kate Middleton y Guillermo: aislados, en familia y rodeados de naturaleza

El 'timing' del anuncio de Kate Middleton con su diagnóstico de cánce r no fue para nada causal. La Princesa de Gales y su esposo, el príncipe Guillermo, lo hicieron coincidir con el inicio de las vacaciones de Pascua de sus hijos para asegurarse de que se enteraban antes que nadie. George, Charlotte y Louis comenzaron ese mismo viernes sus días libres con motivo de las vacaciones de Semana Santa en el prestigioso colegio Lambrook al que acuden.

La familia hizo público el anuncio en vídeo de Kate a la prensa unas horas después de que el colegio cerrara, para que sus hijos no tuvieran que enfrentarse inmediatamente a preguntas incómodas en el patio tras hacerse pública la noticia.

Mientras fuentes cercanas a la pareja aseguran que el heredero al trono está «extremadamente orgulloso» de la fortaleza mostrada por su esposa desde que le diagnosticaron cáncer, también ha trascendido que fue la propia nuera de Carlos III la que escribió personalmente el comunicado sobre su enfermedad.

En su primer discurso público a la nación tras más de dos meses de ausencia de la vida pública y entre especulaciones de todo tipo sobre su estado, Kate sorprendió a sus más allegados con su decisión de anunciar que había comenzado un tratamiento de quimioterapia preventiva . Este formaba parte de un meticuloso plan de dos semanas para informar al público de sus problemas de salud. Superado este trámite y entre numerosas muestras de cariño y apoyo llegadas de todas partes del mundo, ahora los Gales se han aislado para pasar las vacaciones en uno de sus rincones favoritos.

Los diarios británicos dan por hecho que Kate, Guillermo y sus hijos ya están disfrutando de sus días de reposo en su casa de campo de Anmer Hall , una mansión de diez habitaciones en la finca de Sandringham en Norfolk, antes de que el heredero al trono reanude sus funciones públicas a mediados de abril. Según una fuente del Palacio de Kensington que cita 'The Mirror', «la familia solo quiere irse de vacaciones de Pascua, pasar tiempo juntos, los cinco, aislarse del mundo y seguir adelante».

De este modo, los royals cambian su residencia habitual de Adelaide Cottage, en Windsor, por el mismo lugar que ya eligieran hace unos meses como lugar de reposo para Kate tras su operación abdominal .

Edificada originalmente en 1802, Anmer Hall fue un lujoso regalo de boda de la reina Isabell II a Guillermo y Kate después de que se casaran en 2011. La propiedad se sometió a una amplia renovación que costó 1,5 millones de libras y durante la cual se añadieron un invernadero y una cocina nueva y se restauró por completo el tejado. Kate y Guillermo residieron allí a tiempo completo entre 2015 y 2017, cuando junto a miembros de la aristocracia local formaron lo que todavía se conoce como los 'Turnip Toffs' o 'el club del nabo' .

Allí los pequeños de la casa pueden disfrutar de extensos jardines y de la compañía de numerosos animales, entre lo que destacan el perro de la familia, un cocker spaniel negro llamado Orla que fue un regalo para sus sobrinos de James Middleton, y el poni que recibió Charlotte por su séptimo cumpleaños. Pero los principitos también pueden jugar con cobayas, hámsters, conejos y gallinas. Columpios, una pista de tenis o una pared de escalada son otras de las actividades recreativas para que se entretengan durante las vacaciones. Además, a los pequeños les encanta observar a los pájaros con los prismáticos.

En lo que ha sido bautizado como una 'Pascua light', Carlos III parece decidido a estar presente en la misa del domingo de Resurrección en la capilla de San Jorge de Windsor «si su salud lo permite». Fuentes del Palacio de Buckingham aseguran también que «el Rey ha estado en contacto con la Princesa de Gales desde el momento en que fue ingresada en el hospital en enero y durante todo su actual tratamiento contra el cáncer.

«Está totalmente decidido a dar una muestra de unidad a su familia y tranquilizar al público y al mundo en general, con un mensaje de que la monarquía es estable, a pesar del tumultuoso período actual», publica el 'Daily Mail' citando fuentes reales. Ayer también se supo que el monarca ha grabado un «mensaje pascual de esperanza», que se emitirá el Jueves Santo en la catedral de Worcester.

En esta ocasión no está previsto que ni los Príncipes de Gales ni sus hijos acompañen a Carlos y Camilla en este tradicional servicio religioso, como hicieron al completo por primera vez el año pasado. Esta no será pues la gran reunión familiar que podríamos esperar ver en otras circunstancias.

Por su parte, Camilla encabezará la representación de la Corona en el Servicio Real de su segundo Maundy Thursday (Jueves Santo en España) como Reina, el primero que realizará en solitario. La palabra 'maundy' viene del latín y significa 'mandamiento' y en este acto, que se celebra desde el año 600, el monarca británico distribuye unas monedas simbólicas entre los pensionistas locales, en un paralelismo con Jesús lavando los pies de los Apóstoles en la Última Cena.