Letizia Ortiz en la Feria del Libro: radiografía del cambio de la reina a través de los libros que se ha llevado (y sus gustos literarios desvelan más que sus looks)

Todos lo repetimos: la visita anual a la Feria del Libro de Madrid es el evento cultural favorito de la reina Letizia , que además estará deseando dar carpetazo a la polemica visita del rey emérito Juan Carlos a España. Su vinculación con la literatura no tiene que ver solo con los profesional, sino que destaca como un componente clave de las historias de amor más importantes de su biografía. Alonso Guerrero, su primer marido, es profesor de literatura y autor de varios libros, entre ellos una novela. El amor de Penny Robinson, que relata el salto a lo mediático de un anónimo que es ex de una reina. Además, Letizia Ortiz confesó durante su pedida de mano que se había enamorado del Felipe de Borbón por ser «un gran lector» y, de hecho, le regaló una primera edición de una novela del siglo XIX sobre el amor en la corte, El doncel de don Enrique el Doliente, de Mariano José de Larra.

Desde 2016, la reina Letizia sustituye a la reina emérita Sofía como la representante de la familia real encargada de dar el pistoletazo de salida a la Feria del Libro de Madrid, que este año bate récord de casetas (378, mas 400 expositores), homenajea a los recientemente fallecidos Almudena Grandes y Domingo Villar y está dirigida por primera vez por una mujer, Eva Orúe. Sin embargo, en este lapso de tiempo no acudió a su cita en dos ocasiones: en 2018, cuando fue sustituida por la infanta Elena, probablemente porque estaba recién llegada de un viaje de cooperación a Santo Domingo, y debido a la pandemia de coronavirus en 2020. En las cuatro citas restantes, los libros que Letizia ha comentado o comprado se convirtieron en la comidilla de profesionales y aficionados.

En su primera aparición oficial en la Feria del Libro, la reina Letizia quiso causar sensación. No dejó de hacer comentarios en los que dejaba claro su afición por la lectura, aunque se quejó de que no le dejaran pagar los libros de su interés. Cada vez que se detiene en una caseta, alrededor de una decena cada año, le regalan varios títulos destacados. Una fija es la de la editorial Planeta, líder de la industria en español que cuenta con el apoyo decidido de la Corona. Más allá de las paradas institucionales, la reina quiso mostrar la amplitud de su gusto literario con dos paradas muy pensadas: se llevó de la librería Generación X una novela gráfica de Alan Moore, el creador anarquista de V de Vendetta; y de la librería Trotta, obras de Nietszche y Kierkegaard. Además, conversó en otra caseta sobre los directores de cine Jean Jacques Truffaut y Alfred Hitchcock.

No se puede ser más canónica, en el sentido de señalar a los grandes maestros del canon, que la reina Letizia en 2016. Su vocación cultureta se dirigía en estos años a los nombres clásicos e irreprochables, creadores avalados por la historia que no suponen ningún riesgo ni amenazan críticas. Sin duda, le preocupaba extraordinariamente no levantar suspicacias, pero a la vez quiso demostrar que sus lecturas van más allá de las novelas superventas que se les supone a las lectoras. De hecho, en sus anteriores visitas de incógnito a la Feria ya había sorprendido por su afición tanto a lo alternativo como a lo sofisticado. En 2015 compró un ensayo de Moore, 'Ángeles Fósiles', sobre varios iconos de la contracultura y el ocultismo, y en 2012 'Libertad', la novela de moda del estadounidense Jonathan Franzen.

Portugal era el país invitado a la Feria del Libro de Madrid 2017 y el rey Felipe VI acompañó a Letizia y al presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa. La nutrida presencia institucional eclipsó el paseo triunfal por la literatura de la reina, que no pudo tomar tanto protagonismo como en el año anterior. Aún así, quiso subrayar dos libros que ya muestran una mayor naturalidad (y tranquilidad) al respecto de sus inclinaciones literarias. En la caseta de la editorial Libros del K.O. no pudo evitar comentar que ya se había leído 'Una historia personal', el libro de memorias de Katherine Graham, la mítica editora de The Washington Post, ganador de un Pulitzer en 1998. Además, se interesó mucho por 'Yo también sufrí bulling', el ensayo del actor Nacho Guerreros. Y no quiso faltar a su cita con el cómic: se llevó 'Filmish', una explicación de cómo funciona el cine de Edward Ross, probablemente para Leonor y Sofía.

En la visita a la Feria del Libro de este año, una Letizia ya francamente empoderada levantó acta de la cuarta ola feminista eligiendo libros escritos o protagonizados por mujeres, además de ensayos de actualidad y política. Compró dos libros de la escritora feminista Marta Sanz: 'Tsunami', una antología que reúne los textos y testimonios personales de diez autoras españolas que repiensan a la mujer; y 'Retablo', un libro ilustrado. Rechazó 'Sigo aquí', de Magie O'Farrel, porque ya lo tenía, e incluyó dos volúmenes con intención activista: 'No hay vuelta atrás', de Melinda Gates, y para sus hijas 'Cambiemos el mundo', de Greta Thunberg. No todo fueron mujeres: también se declaró fan del polémico escrito francés Michel Houellebecq, aseguró que tenía ganas de conocer a Siri Hustvedt y compró el nuevo libro de uno de sus poetas favoritos, Raúl Zurita.

Tras el parón de 2020, la reina Letizia volvió al parque del Retiro ya definitivamente liberada de cualquier tipo de presión para demostrar que lee, y mucho. Quisieron regalarle 'Los años extraordinarios', el divertido superventas de Rodrigo Cortés, pero dijo que ya lo había devorado. Se llevó en su lugar 'Los abismos', de la colombiana Pilar Quintana, una historia que profundiza en la opresión que viven las mujeres. La reina no se olvida de apoyar a las creadoras, y de hecho suelen regalarle libros escritos por mujeres en las casetas a las que se acerca. Colombia era, precisamente, el país invitado, y la reina quiso subrayar la calidad de la novela 'El olvido que seremos', de Héctor Abad Faciolince. Este era uno de los autores que supuestamente figuraba en una lista de censurados por el gobierno colombiano por ser 'muy políticos'.