Puede que Carla Vigo , sobrina de la reina Letizia , haya dado un paso adelante precisamente ahora y lamentablemente así por pura inconsciencia. La sobrina de Letizia Ortiz, de 21 años, ha querido dar su opinión sobre su real tía y sobre su prima y futura reina Leonor en el momento más inconveniente: cuando la visita del rey Juan Carlos primero a Sanxenxo y luego a Zarzuela lo ocupa todo. Suma así otra piedra en el zapato para casa real, donde probablemente se ven desbordados a la hora de apagar tanto fuego amigo por parte de familiares que no atienden a razones.
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¿Quién es Carla Vigo? Saltó a la fama como pequeña paje en la boda de los reyes, donde acompañó a Victoria Federica. Hija de Érika Ortiz, fallecida en 2007, trata de labrarse una carrera como actriz y modelo aunque, de momento, solo parece aprovechar su parentesco para hablar en los medios de comunicación. Es la patata más caliente en la más que discreta familia Ortiz.
La infancia de Carla Vigo (Madrid, 2000) no deja de tener una nota trágica: su madre Erika Ortiz se quitó la vida cuando su única hija tenía solo seis años. Tras su pérdida, la niña se mudó con su padre, el escultor Antonio Vigo, pero fue Letizia quien se convirtió en una referencia maternal para Carla. Por eso, resulta tan incomprensible que vengan precisamente de ella comentarios banales que afectan a la imagen de la reina. Carla Vigo, en una entrevista expresamente dedicada a comentar su relación con la familia real, habla así de los brazos de la reina Letizia: «Es su cuerpo. Si ella se ve a gusto así... En mi opinión personal, y no quiero que por eso digan que soy machista, el cuerpo está bien, pero los brazos así [tonificados] no quedan nada bien en una chica. Si yo tuviera esos brazos, me vería horrorosa, pero si ella se ve bien así…».
Aspirante a actriz y con experiencia en el teatro gracias a Rafael Amargo, Carla Vigo amenaza con convertirse en la familiar incómoda que no admita filtros a la hora de comentar cualquier aspecto público o privado de la familia real, una circunstancia que podría alejarla aún más de su familia en Zarzuela. El perfil de Instagram de Vigo muestra esa peligrosa naturalidad con la que la joven maneja su imagen pública: lo mismo presenta a su novio, un match en la plataforma de citas Badoo, que anuncia productos o se declara bisexual. De hecho, otra de las polémicas declaraciones de su entrevista de autopromoción abunda sobre una hipotético lesbianismo de la princesa Leonor, a propósito de la ley holandesa que permitiría reina a la princesa Amalia, si eligiera casarse con una mujer.
«Creo que hoy no se podría hacer eso en España», comenta Carla Vigo, probablemente sin detenerse a pensar en la trascendencia que podría tener su comentario. «No sé si la institución estaría preparada, pero la gente no, ni de broma; sobre todo porque aquí se critica todo. Tampoco creo yo que mi prima Leonor, aunque pudiese, eligiera una pareja femenina. Recuerdo que, cuando salió esa noticia, la gente decía: 'Eso aquí en España no podría hacerse, porque estamos atrasados'. No estamos preparados mentalmente. En otros países, la gente va un poco más a su rollo y, si hay una ley, pues se le hace caso y ya está».
Lo cierto es que la joven Carla Vigo no parece advertir (optemos por la prudencia) la delicada posición en la que se encuentra, a disposición de todo tipo de personajes e iniciativas que pretendan vincularse de alguna manera a la reina Letizia. Fue Rafael Amargo quien se puso en contacto con la sobrina de la reina Letizia para que participara en Yerma, la obra de teatro que estrenó en diciembre de 2020 de Madrid, justo cuando era detenido por su presunta implicación en un delito de tráfico de drogas. Fue un año después, en octubre de 2021, cuando fichó a Vigo, aunque ella no tenía ninguna experiencia interpretativa. En abril de 2022, el director y bailarín saltaba a los medios quejándose de que Letizia Ortiz no había acudido a ver su obra.
«Con tantos actos solidarios que hace, tendría lo primero de todo que apoyar a su sobrina. Apoya a tanta gente… Lo primero es apoyar a la casa y a la sangre de uno», declaró. Recientemente, Amargo ha vuelto a valorar el talento de su fichaje. Admitió que Carla es un poco «dispersa»: «Igual que Alejandro (hijo de Ivonne Reyes) es más centrado, ella es más dispersa», apuntó. «Tiene un corazón grandísimo. Me produce mucha vulnerabilidad y mucho amor».