La reina Letizia amadrina el festival de cine Atlàntida de Palma de Mallorca desde 2019. / LIMITED PICTURES

de filmin a marivent

Cómo conquistar a Letizia: así consiguió Jaume Ripoll que la reina aceptara su invitación al festival de cine Atlàntida de Palma de Mallorca

La presencia de la reina Letizia en cualquier evento tiene un valor incalculable. Ejemplo: el festival de cine Atlàntida de Palma de Mallorca, de uno más a la gran cita cinéfila del verano.

Si los reyes Felipe y Letizia tienen hoy algún poder, ese es el de la presencia. De ahí la importancia de quien confecciona en Casa Real su agenda oficial, llena de citas institucionales de corte diplomático y, también, de gestos de apoyo a iniciativas privadas y empresas. Estas últimas deben ser intachables, pues cualquier borrón en su actividad puede manchar a la Corona. Las precauciones que se toman antes otorgar el favor de los monarcas son máximas. Aunque, a veces, se toman atajos. Bien lo sabe Jaume Ripoll, director del festival de cine Atlàntida de Palma y artífice de la plataforma de streaming Filmin.

¿Cómo ha conseguido este pequeño festival, una iniciativa modesta más dirigida a cinéfilos que al gran público, contar con la presencia de la reina? Es fácilmente constatable: el Atlàntida Film Festival no despegó mediáticamente hasta que Letizia consintió en amadrinar sus inauguraciones o clausuras. Alrededor de 4.500 personas asistieron a sus proyecciones en 2016, la primera edición en la que llevaron el festival online a pie de calle. En 2019, con la reina a bordo, llegaron a 15.000. El año pasado, 17.000 sacaron entrada.

El festival de cine Atlàntida de Palma de Mallorca celebró así el increíble éxito de la edición de 2022, cuando la reina Letizia entregó el premio 'Master of Cinema' a la actriz francesa Isabelle Huppert. «El festival también ha batido un récord en cuanto a su impacto mediático con más de 4.200 noticias y un clipping auditado por un valor de más de 20 millones de euros, aumentando la difusión de Mallorca en países como Reino Unido, Francia o Alemania».

La presencia de la reina Letizia puede valorarse en euros

¿Cuánto vale el apoyo de la Casa real y la reina Letizia a una iniciativa de estas características? En esos 20 millones de euros tenemos una buena cifra para empezar a discutir. Cualquier empresario de la cultura española querría para sí el milagro que obra la monarca.

Siempre sin menospreciar, claro, la fantástica programación y la acertada elección de premiados del equipo del Atàntida Film Fest. Pero, ¿cómo logró este minúsculo festival llamar la atención de la reina Letizia?. Lo contó en 2019 a varios medios el propio Jaume Ripoll, director del Atlàntida Film Fest y de la plataforma de cine online que lo patrocina: Filmin. Si consideramos únicamente el relato de Ripoll, todo puede atribuirse a estar en el momento adecuado en el sitio idóneo para plantear su propuesta. Todo sucedió en el palacio de la Almudaina, donde los reyes ofrecen cada año una recepción a la sociedad civil balear.

La reina Letizia junto a la actriz francesa Isabelle Huppert, en la pasada edición del Atlàntida Film Fest de Palma de Mallorca. / LIMITED PICTURES

El encuentro se produjo en 2018, cuando Jaume Ripoll acudió al cóctel que cada verano ofrecen los reyes Felipe y Letizia. El empresario y programador ya había planteado a la oficina correspondiente de Casa Real la posibilidad de contar con el apoyo de la familia real a su festival, una petición que no fructificó en ninguna de sus intentonas. Al ver la ocasión de hablar directamente con la reina durante el cóctel no lo dudó: pidió dirigirle unas palabras. En pocos minutos, la monarca se cercó a él.

«Nos saludamos, hablamos y demostró un gran conocimiento y amor por el cine; un conocimiento y rigor que me dejaron impresionados», relató Ripoll. «Me limité a explicarle que el festival tiene unos valores diferentes a otros: apuesta por la innovación, ya que puede seguirse online y las proyecciones se hacen en lugares como una cárcel o un castillo; es gratuito y facilitamos que el público pueda acceder a las obras a la vez que damos voz a directores debutantes; y lo centramos en películas que analizan la realidad europea».

Sabemos que el cine es una de las grandes pasiones de la reina Letizia, amante del cine español y europeo. De hecho, su primera visita oficial a un festival de cine fue en en 2018, cuando acudió a la Seminci de Valladolid, el segundo festival más antiguo del país. No ha acudido, pese a ser invitada cada año, ni a los Premios Goya ni al Festival de San Sebastián.

Letizia por fin deja su marca en Palma de Mallorca

El año pasado, el director del festival de cine Atlàntida de Palma reconoció el impacto que produce la presencia de Letizia. Señaló como la reina había vuelto a demostrar su afecto personal al festival y valoró su apoyo como una forma de ampliar la visibilidad del festival y de Mallorca.

¿Podemos entender el apoyo de Letizia al festival de Ripoll únicamente desde su pasión por el cine, y su química personal? Quizá, pero nos quedaríamos cortos. Cabe apuntar otros motivos, más relacionados con la 'geopolítica de la familia real', que apuntalaron en su momento la involucración de la monarca en el Atlàntida Film Fest. Recordemos que, hasta ese momento, la presencia de Letizia en Palma estaba marcada por la incomodidad. Nada llevaba allí su marca: ni Marivent ni el Náutico ni las salidas a los mercadillos con la reina Sofía.

Letizia no encontraba su sitio en Palma de Mallorca, un lugar marcado como territorio Borbón y su afición a la vela. El festival de cine Atlàntida permitió a la reina construir una agenda propia, más acorde con sus gustos e intereses y totalmente alejada de los de la famosa corte mallorquina del rey emérito Juan Carlos que, de alguna manera, heredó el rey Felipe. Estamos ante la contraprogramación de la reina Letizia a la Copa del Rey de vela. Y un regalo de la monarca a Leonor y Sofía y a la sociedad mallorquina.