La trágica historia del título nobiliario de los marqueses de Urquijo que hereda ahora la sobrina de Myriam de la Sierra

El marquesado de Urquijo está teñido de tragedia y vuelve a ser noticia porque ahora lo ha solicitado Victoria, hija de Juan de la Sierra, que murió el 5 de julio de 2022 tras una larga enfermedad, y sobrina de Miriam de Urquijo la más mediática de esta familia, marcada por la tragedia. Ella es la primogénita del matrimonio del ejecutivo, que en los últimos años de su vida residió en Panamá, con Rocío Carucho Fontela, con la que tuvo a la mencionada Victoria, Juan y Marieta.

Sin duda, la vida de esa familia está marcada por el asesinato de María Lourdes de Urquijo y Manuel de la Sierra , que fueron asesinados en su chalet de Somosaguas, en Madrid, el 1 de agosto de 1980. Un crímen por el que fue condenado a más de cincuenta años de cárcel el exmarido de Myriam de la Sierra, Rafi Escobedo, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en el penal de El Dueso el 27 de julio de 1988.

Tras ingresar en la cárcel de Carabanchel, admitió su culpabilidad, pero después en el juicio se retractó de su confesión inicial y apuntó a Diego Herrera, administrador de los finados, en connivencia con los hijos de los marqueses. Sin embargo, fue condenado a una pena de 53, confirmada por el Tribunal Supremo, además de tener que indemnizar a sus hijos con 20 millones de pesetas.

Tras dos intentos de suicidio, primero cortándose las venas y después inyectándose heroína, se quitó la vida ahorcándose en su celda. Dos semanas antes de morir, en una entrevista con Jesús Quintero manifestó que no tenía ganas de seguir. En la autopsia se encontró cianuro puro en los pulmones lo que llevó a pensar que pudo haber sido envenenado.

Javier Anastasio de Espona fue detenido en octubre de 1983, bajo la acusación de ser posible coautor del crimen, pero logró fugarse poco antes de que se celebrara el juicio. Logró desaparecer y en 2010 se retiraron los cargos por prescripción del delito. En febrero de 1990 se condenó a Mauricio López-Roberts y Melgar, marqués de Torrehermosa, por encubrimiento al haber prestado dinero a Javier Anastasio para que pudiera emprender la huida. La condena fue de diez años.

Su hija, Macarena López-Roberts, actual marquesa de Torrehermosa publicó el libro Honor, las otras víctimas del crimen de los marqueses de Urquijo (Almuzara), quien pretendió con esa iniciativa sacar del olvido este caso tan devastador y de alguna manera restituir el honor de su padre. Según aseguraba, su padre no tuvo nada que ver con los asesinatos, pero pagó un precio muy alto por proteger a su amigo Rafael Escobedo.

Este mediático caso tuvo tanta repercusión, que además de infinidad de reportajes periodísticos y televisivos, dio pie a dos adaptaciones cinematográficas. La primera, la película Solo o en compañía de otros, en la que se utilizó un nombre ficticio para componer la figura de Rafi Escobedo, labor que recayó en el actor Juan Ribó. Dieciocho años más tarde, en 2009, Félix Gómez se metió en la piel de Escobedo para la película para televisión El crimen de los marqueses de Urquijo, dentro de la serie La huella del crimen, protagonizada por Félix Gómez y Juanjo Puigcorbé.

Marcos García-Montes , quien fuera abogado de Rafael Escobedo, ha mantenido en diversas ocasiones que su cliente no se suicidó y que, además, no fue el autor material del asesinato. Una tesis también mantenida por su exmujer, Myriam de la Sierra, en su libro de memorias ¿Por qué me pasó a mí?, publicado en 2013, manifestaba que no creía que él hubiera sido el asesino.

Como una losa pesa en la historia de este marquesado este macabro asesinato. El título tiene su origen en mayo de 1871 cuando Amadeo I se lo concedió al financiero y político alavés Estanislao Urquijo y Landaluce. El tercer marqués de Urquijo, Estanislao de Urquijo y Ussía, logró la grandeza para el título, concedida por Alfonso XIII , además del título de marqués de Bolarque.

Por su parte, el IV marqués de Urquijo, Juan Manuel de Urquijo y Landecho, ostentó también los títulos de marqués de Loriana y marqués de Villar del Águila. La V marquesa de Urquijo pasó a la historia, junto a su marido, por su asesinato, y es ahora su nieta la que ostenta este reconocimiento nobiliario, que ha solicitado y aparece recogido en el BOE del pasado 27 de julio.