El cambio radical de vida de Paloma Rocasolano: la madre Letizia deja Madrid para mudarse a un pueblo de Murcia

La madre de doña Letizia, Paloma Rocasolano , sorprendía estos días por el importante giro que le ha dado a su vida. Y es que la abuela de Leonor y Sofía ha dejado Madrid y se ha mudado a vivir a una pequeña localidad murciana.

El motivo no puede ser más romántico. Y es que la exenfermera, ya jubilada, ha querido seguir a su novio, el empresario Marcus Brandler , en este nuevo cambio de residencia por motivos laborales.

La madre de la reina y el empresario, propietario de Tillbrook Products, negocio dedicado al comercio de café, té, cacao y especias, mantienen una relación de lo más estable y no ha dudado en dar juntos este importante paso.

Paloma Rocasolano, jubilada ya a sus 72 años, siempre ha sido una mujer de espíritu joven, activa y moderna. Separada desde 1999 de Jesús Ortiz, padre de la reina y de sus otras dos hijas –Telma y Érika, fallecida en 2007–, la madrileña criada en Asturias ha comenzado una nueva vida. Según informaba este jueves el periodista Jesús Manuel Ruíz, la madre de la reina y su pareja se han mudado a Los Belones, una localidad del municipio de Cartagena. Junto a su novio, el empresario inglés Marcus Brandler, la suegra de Felipe VI ha dejado Madrid y actualmente residen en Los Belones, un pequeño pueblo cercano al Mar Menor en el que existe una importante colonia inglesa.

Ubicado en la provincia de Cartagena (Murcia), se trata de una pequeña localidad de poco más de 2000 habitantes habituales y muy cercana a interesantes zonas naturales, y algunas playas naturistas, como el Parque Regional de Calblanque o las islas del Mar Menor. Un lugar en el que no sabemos si lo conseguirán, dado que ella es madre de la reina de España, pero en el que Rocasolano y su pareja buscarán una vida tranquila y con muchos planes en plena naturaleza. Nada que ver con las posibilidades que les ofrecía hasta ahora Madrid. La parte negativa es que su hija Letizia y sus nietas Leonor y Sofía quedarán a muchos kilómetros, más en el caso de la menor cuando regrese tras las vacaciones de verano al internado galés UWC Atlantic donde realizará su segundo y último año de bachillerato internacional.

De todos modos, la distancia no es en realidad un problema teniendo en cuenta las agendas que manejan tanto doña Letizia y su marido el rey Felipe VI como la princesa Leonor, que a finales de este mes se incorpora a la segunda etapa de su formación militar y que este curso próximo la llevará a la base naval de Marín (Pontevedra). Si durante el curso 2025-2026 Paloma Rocasolano siguiera viviendo en Murcia, tendría la suerte de poder coincidir más con su nieta Leonor, que para entonces estará recibiendo formación en la Academia General del Aire de San Javier, a menos de 30 kilómetros de donde ahora reside su querida abuela materna.

La madre de la reina Letizia parece haberse adaptado de maravilla a las bondades de residir en un lugar mucho más pequeño que Madrid. Según comentan algunos vecinos de la zona de los Belones, Paloma Rocasolano hace una vida todo lo normal que puede y comparable a la de cualquier otro habitante de la pequeña y tranquila localidad murciana: hace la compra en comercios locales –Paloma hace la compra en los comercios locales –la han visto e una carnicería cercana a su nuevo domicilio– y acuda de una peluquería «de barrio» sin ningún tipo de problema.

Aún no existen imágenes de la suegra de Felipe VI en su nuevo lugar de residencia. Pero lo que sí sabemos con seguridad es que la veremos el próximo mes de octubre. Será cuando Paloma Rocasolano, como cada año desde que su hija entró a formar parte de la Familia real, esté en Oviedo en la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, una cita que el gusta especialmente y que nunca se pierde. En 2022 y en el teatro Campoamor de la ciudad asturiana tuvo lugar, precisamente, la «presentación en sociedad» de su novio Marcus Brandler, un próspero empresario nacido en Nigeria cuando aún era una colonia británica.

La nueva vida que comienza Paloma Rocasolano junto a su novio demuestra que la pareja está más unida que nunca y que, aun estando él todavía en activo con su empresa familiar de importación de productos como el te o el cacao, tanto la madre de la doña Letizia como su «padrastro» buscan una vida más tranquila y alejada del bullicio madrileño. Un deseo que, con suerte, se cumplirá en la pequeña localidad murciana a la que se han mudado.