La princesa Leonor con uniforme de guardiamarina. /
La singladura de la princesa Leonor a bordo del Juan Sebastián Elcano sigue cumpliendo sus etapas previstas. Tras una travesía de 22 días desde las Islas Canarias, el buque escuela hacía su primera escala americana en la ciudad brasileña de Salvador de Bahía , donde se conmemoró el 400 aniversario de su recuperación a los holandeses por parte de una flota combinada hispano portuguesa. Desde allí el velero partió hacia Montevideo , donde la guardiamarina Borbón vivió cuatro días llenos de experiencias.
Ahora las dos próximas paradas técnicas del buque escuela serán en Chile, tras el siempre complicado paso del Cabo de Hornos: la primera en Punta Arenas y la segunda en Valparaíso. Después visitarán los puertos de El Callao (Perú), Ciudad de Panamá, Cartagena de Indias y Santa Marta (Colombia) antes de poner rumbo hasta Santo Domingo y Nueva York, para volver a cruzar el Atlántico de regreso hacia Gijón, Ferrol y Marín (Pontevedra).
Si se cumplen los tiempos previstos, será el 20 de marzo cuando la princesa Leonor y sus compañeros desembarquen en Punta Arenas, en la Zona Austral de Chile. Es la capital de la provincia de Magallanes y de la Antártica Chilena, que fundada por militares chilenos en 1848 en su día sirvió como colonia penal. Antes había sido bautizada por los británicos como Sandy Point, del cual deriva su actual nombre. Al contrario que en sus dos anteriores visitas a populosas urbes, aquí los habitantes no llegan a 150.000, pero aun así la hija de los reyes Felipe y Letizia encontrará allí un buen número de atractivos turísticos que vamos a repasar.
En palabras del escritor chileno Francisco Coloane sobre esta ciudad, « la dificultad de vivir aquí une a la gente. Crea una solidaridad humana y un sentido del honor que la gente del resto de Chile no siempre comparte». Punta Arenas es una mezcla ecléctica de plazas, perros callejeros, viviendas modernas y mansiones del siglo XIX.
El Museo Naval y Marítimo de Punta Arenas. /
La Plaza Muñoz Gamero es el centro neurálgico de la ciudad, flanqueada por imponentes edificios y un monumento que precisamente conmemora el 400 aniversario del viaje de Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano . Una instructiva visita para la princesa sería el Museo Naval y Marítimo, que detalla el viaje del explorador sir Ernest Shackleton y el rescate de su tripulación en la Isla Elefante.
El Museo Regional de Magallanes permite asomarse a la antigua casa de un pionero de esta región antártica, mientras que el Museo Salesiano contiene diversos objetos coloniales e indígenas. A 15 minutos de la plaza central, el Cementerio Municipal bien vale el paseo para conocer mejor el colorido pasado inmigrante de la ciudad.
El Parque del Estrecho de Magallanes, situado a unos 50 kilómetros al sur de Punta Arenas, es el lugar ideal para empaparse de historia. Aquí se encuentra el Fuerte Bulnes, un centro de visitantes que detalla la historia de los primeros colonizadores de la zona. También se pueden realizar tours de avistamiento de ballenas jorobadas.
Pingüinos en el Estrecho de Magallanes. /
El Parque Nacional Pali-Alke es una joya aislada aún por descubrir de la Patagonia, donde guanacos y ñandúes pasean sin miedo, hay un volcán que escalar y lagunas de otro mundo llenas de aves y extrañas formaciones rocosas. Es una visita obligada si los guardiamarinas del Elcano tienen tiempo para hacerla. Y los amantes de los pingüinos tienen un destino inolvidable en Isla Magdalena, donde se puede pasear entre estas aves acuáticas.
La cercana Tierra del Fuego es un archipiélago formado por asentamientos azotados por el viento, que es la puerta de entrada a la Antártida. Desde allí se puede realizar la caminata de los Dientes de Navarino, que tiene unos 50 kilómetros de recorrido y está considerada como una de las mejores rutas de trekking del mundo.
Si Leonor y sus compañeros de tripulación buscan un restaurante típico, la Marmita es una de las opciones más populares de la ciudad, y con razón. El menú presenta algunas opciones exóticas como el guanaco, un animal similar a la llama, además de tener una excelente carta de vinos.
El Café Tapiz es una pintoresca cafetería que sirve un buen desayuno y se precia de tener la mejor tarta de queso de la región. Y para cenar, es hora de vivir una experiencia bien curiosa en la Parrilla Los Ganaderos. Allí los camareros van vestidos de vaqueros y sirven buenos platos de carne, con el cordero patagónico como especialidad.
Y llegada la hora de quemar calorías bailando, hay varios clubes recomendables en la ciudad chilena. El Celebrity Pub sirve buenos cócteles y siempre hay música en directo, mientras que Los Brujos, abierto desde 1959, es una de las discotecas más populares de la zona.