Su reino es Internet
Su reino es Internet
Leah Isadora Behn, hija de la princesa Marta Luisa de Noruega y el malogrado escritor Ari Behn, cumplió 18 años el pasado mes de abril, y desde ese momento ha dejado aún más claro que no quiere ser princesa, ni nada que se le parezca. La nieta del rey Harald ha escogido para sí misma un trono mucho más moderno y efímero: el del éxito en internet, la moda y la televisión.
Su papel como «reina» de las redes sociales lo ejerce con tanta soltura que parte de sus seguidores ni siquiera eran conscientes de que esta joven rubia, ganadora del Vixen Award a la influencer de belleza, forma parte de la realeza europea.
La burbuja explotó para esos despistados seguidores recientemente, cuando en un directo de Instagram le preguntaron entre hack y hack si era cierto que era hija de una princesa. Leah Isadora decidió quitarle hierro al asunto afirmando que así era, pero que «mi madre es sólo mi madre» y retomó lo importante, sus trucos de belleza.
A pesar de su juventud, Leah Isadora, lleva ya tiempo siguiendo la estela de otras royals europeas que no aspiran a ningún trono, como Olimpia de Grecia o Carlota Casiraghi, pero sí al glamour de una vida de ensueño a golpe de post de Instagram y contrato con firma de lujo.
Vídeo. Los momentos más conflictivos de los hijos de Harald de Noruega /
Leah Isadora no sólo tiene una nutrida cuenta de seguidores en Instagram y TikTok sino que alimenta de contenidos su propio canal de Youtube, tiene un contrato como modelo, ha hecho colaboraciones con firmas de cosmética y ha formado parte del elenco del programa de televisión Powerwoman que se emitía en Viaplay. No está mal para alguien que acaba de cumplir la mayoría de edad.
Mientras los hijos del príncipe Joaquín de Dinamarca se tomaron el hecho de ser despojados de su estatus de príncipes como una auténtico drama, para Leah Isadora no tener ningún tratamiento de alteza real es un activo que pretende exprimir al máximo. Aunque, por supuesto, su indiferencia royal no siempre fue tan férrea como la que muestra en la actualidad. «De pequeña, quería ser una princesa Disney. Estaba completamente «obsesionada» con La Bella Durmiente y cosas así», confesó en 2022 en una de su numerosas entrevistas.
Leah Isadora con su madre, la princesa Marta Luisa, en el funeral de su padre, Ari Behn. /
Pero no tuvo que ir muy lejos para comprobar, con el tiempo, lo complicado que es coordinar sin ofender a nadie el pertenecer al organigrama principesco y llevar la vida que se desea. Leah Isadora ha sido testigo de todas las peripecias vitales de su propia madre publicadas en la primera plana de la prensa.
De hecho, aunque en la actualidad Marta Luisa de Noruega aún conserva (por los pelos) su título de princesa ha tenido que renunciar por completo a su papel de representación de la corona por las críticas que recibían sus negocios personales con su prometido. Con semejante ejemplo en casa, Leah Isadora ha aprendido la lección.
Como haría demasiado tarde Margarita de Dinamarca, el rey Harald fue quién decidió no conceder a los hijos que tuviera su hija Marta Luisa con Ari Behn ningún título nobiliario. La joven se ha tomado siempre esta decisión como una bendición para hacer lo que le dé la gana con su vida sin pedir permiso ni perdón.
«Soy una adolescente y estar en el centro de atención, en cierto modo, me da un poco de miedo, de alguna manera siempre te preocupa lo que la gente dice de ti. Pero también tengo una buena actitud porque no me importa. Realmente no importa lo que la gente piense, siempre y cuando hagas lo que quieras, y yo siento que lo hago, soy muy buena en eso», explicó en una entrevista televisiva que concedió en el programa Lindmo de la NRK noruega.
Marta Luisa de Noruega describe a su hija mediana como una joven «con mentalidad empresarial y que persigue sus sueños», y todo apunta a que el hecho de que Leah Isadora no posea títulos le acerca aún más a explotar esas dos virtudes.
Leah Benn en una fotografía de sus redes sociales. / /
Eso sí, por mucho que la adolescente pretenda olvidar sus orígenes nada humildes y explote al máximo la fama familiar sin asumir responsabilidades royals el no tener títulos no exime a Leah Isadora de seguir perteneciendo a la restringida lista de descendientes de Harald de Noruega con opciones a subirse al trono. En este momento se encuentra en sexto lugar, por mucho que a ella no le importe.