Victoria de Borbón-Dos Sicilias, la guapísima y discreta aristócrata que pudo ser reina de España por un simple rumor

A la emocionante boda de Victoria de Borbón-Dos Sicilias, allá por 2003, asistió la familia real española al completo. Fue en el convento de la Asunción de Calatrava, en Almagro y la novia, Victoria de Borbón-Dos Sicilias , era hija de Carlos de Borbón-Dos Sicilias, duque de Calabria, primo del rey Juan Carlos – le nombró infante de España –, con quien estudió en la finca de las Jarillas, en los años cincuenta. En ese momento, Carlos de Borbón-Dos Sicilias ocupaba el primer puesto en la línea de sucesión a la corona española, tras los descendientes del rey Juan Carlos.

La madre de la novia es la princesa Ana de Francia. A la una de la tarde Victoria de Borbón-Dos Sicilias dio el «sí, quiero» al armador griego Markos Nomikos, 10 años mayor que ella, ante 500 invitados, el 27 de septiembre de 2003. Además de su parentesco con los Borbón Grecia, era muy querida por todos ellos.

Asistieron también las hermanas del Rey Juan Carlos , la princesa Ana María de Grecia, la hermana de doña Sofía, Irene de Grecia, Alexia de Grecia y su marido, Carlos Morales, y Pablo de Grecia con Marie-Chantal Miller , además de la reina Margarita de Bulgaria y el príncipe Kyril y su esposa, Rosario Nadal. La ceremonia se celebró por los ritos católico y ortodoxo, en una misa que duró 75 minutos. El convite tuvo lugar en la finca familiar de «La Toledana», situada en Pueblo Nuevo del Bullaque, en Ciudad Real.

La novia vistió un romántico diseño de Lorenzo Caprile , de corte imperio, y cuerpo drapeado, con escote barco y un vaporoso sobrevestido. Eligió el velo de encaje de su madre, que iba sujeto debajo de un peinado muy original en forma de trenza adornada con alfileres de brillantes, pertenecientes a la tiara de botones familiar, herencia de la archiduquesa María Cristina de Austria. La novia llevaba, además, un sencillo ramo de narcisos. La infanta Elena , que entonces estaba casada con Jaime de Marichalar , llamó la atención con una gran pamela de paja con lazo y un traje sastre Chanel en color rosa empolvado.

Los novios se habían conocido un año y medio antes de pasar por el altar. La petición de mano tuvo lugar en el mes de mayo. Victoria María Aline Carolina de la Santísima Trinidad y de Todos los Santos de Borbón-Dos Sicilias es la menor de los cinco hijos que tuvieron los Duques de Calabria. Hoy, el mayor, Pedro de Borbón-Dos Sicilias, ha heredado el título, tras el fallecimiento de su padre, en 2015.

Victoria es actualmente tía del Duque de Noto, Jaime de Borbón-Dos Sicilias , heredero de la Casa, y casado recientemente con Lady Charlotte Lindesay-Bethune, con quien ha tenido un primer hijo. Estudió arquitectura de jardines y creo una empresa para dedicarse a ello. De facciones dulces y semblante sonriente, fue una de las jóvenes cuyo nombre se asoció con el del príncipe Felipe como novia.

Sin embargo, el propio príncipe de Asturias negó que fuera cierto y aseguró que la relación que le unía a Victoria era como la de una hermana y así se habían tratado desde niños. La decepción fue grande, porque había una cantidad importante de monárquicos para los cuales Victoria era la candidata perfecta a reina de España, tanto por su ascendencia como por su parentesco con la familia real. Dos meses después, don Felipe anunciaba de manera imprevista, su noviazgo con la periodista Letizia Ortiz .

Hoy, a sus 47 años, Victoria sigue siendo una gran amiga del rey Felipe y todavía recuerda las largas tardes de juegos en el Palacio de la Zarzuela con las Infantas y el rey. Victoria, sin embargo, siempre ha querido pasar desapercibida, aunque hubo quien la bautizó como «it girl», una de las primeras, a comienzos de los años 2000. De su matrimonio han nacido cuatro hijos: Anastassios, de 18 años, Ana, de 17, Carlos, de 15, y Simeón, de nueve. Victoria y Markos Nomikos viven en Atenas, pero ella viaja a menudo a España.