NOS HEMOS LEÍDO SU LIBRO (ENTERO) El destino escrito en la infancia de Vicky Martín Berrocal: los hombres que la han decepcionado y las mujeres que la quieren contra viento y marea

Padre ausente, novios fugaces. Vicky Martín Berrocal desvela en su nuevo libro (La felicidad ni tiene talla ni edad) detalles de su relación con los hombres que van a sorprender a sus fans. No ha sido nada fácil.

Vicky Martín Berrocal narra parte de su infancia en 'La felicidad ni tiene edad ni tiene talla', su nuevo libro, en el que desgrana su relación con su padre, los hombres de su vida y los kilos de menos o de más. / GTRES

Elena de los Ríos
Elena de los Ríos

Aunque el nuevo libro de Vicky Martín Berrocal , La felicidad ni tiene talla ni tiene edad, trata sobre su relación con la alimentación y los kilos de más o de menos, son otros detalles sobre su vida familiar e íntima los que van a sorprender a los fans de la diseñadora sevillana. Sabemos de la infancia poco habitual de Vicky , pero es la primera vez que conocemos sus impresiones directamente, de primera mano.

No es ningún secreto que José Luis Martin Berrocal , padre de Vicky, mantuvo dos vidas paralelas durante gran parte de su vida adulta. Tenía dos relaciones sentimentales, dos casas, dos familias e hijos en cada una de ellas. El empresario fue bígamo, aunque finalmente decidió envejecer al lado de Victoria Martín Serrano, la madre de la diseñadora, y optar por su segunda familia, aunque sin llegar a vivir en la misma casa todo el año. En la época, un escándalo.

«Mi padre no estuvo en el parto», cuenta Vicky Martín Berrocal en su libro. «Creo que no me conoció hasta unos días después. He vivido sin él, pero lo he querido más que a nadie en el mundo. Yo me quedé a vivir con mi madre y mis abuelos hasta los nueve o diez años, en una aparente normalidad, al menos ante mis ojos. Todo era raro en mi vida, pero jamás me traumatizó».

Los padres de Vicky Martín Berrocal, José Luis Martín Berrocal y Victoria Martín Serrano. / instagram

Durante toda su infancia, Vicky Martiin Berrocal experimentó la paternidad en momentos puntuales: su figura masculina de referencia fue, como poco, inconstante. «Hasta que no cumplí los diez años nunca vivimos juntos los tres», cuenta refiriéndose a su particular infancia. «Él me recogía en la puerta de casa de mis abuelos y me iba con él unas horas. Le veía muy de vez en cuando. Podría estar meses sin pisar mi casa. Pero siempre estuve muy agradecida fuese más o fuese menos el tiempo que pasara conmigo».

Sintomáticamente, la niña Vicky no vivió la ausencia de su padre de manera traumática, y si ha dejado algún patrón en su manera de vivir la afectividad no tiene que ver con los reproches. «Nunca le reproché que no estuviera conmigo», confiesa. « No sabía si aquello era normal o no, esa era mi vida y punto. No había nada más que hablar ni otras preguntas que hacer. Tenía el mejor padre del mundo que aparecía cuando podía y una madre viviendo el amor a su manera».

Por qué las confesiones de Vicky Martín Berrocal dejan ver cierta decepción en sus relaciones con los hombres

Sin embargo, el relato de Vicky Martín Berrocal en su nuevo libro deja traslucir cierta decepción en su relaciones con los hombres, no solo con su padre, al que adoraba pese a todo, sino en sus experiencias sentimentales. ¿Están conectadas ambas vivencias decepcionantes? En un momento de honestidad brutal, la diseñadora admite: «Una cosa es que viva las experiencias con optimismo y otra que no haya tenido carencias. Sé de mis vacíos y me hago cargo de ellos».

Vicky Martín Berrocal conoció a los 20 años a Manuel Díaz 'El Cordobés', padre de su única hija, Alba. / instagram

Vicky Martín Berrocal admite que ha sufrido mucho por amor y siempre por el mismo motivo: «Nunca estaba satisfecha, siempre pedía más». ¿Podemos leer en este hambre de amor un reflejo de las ausencias de su padre? Eso es algo que, probablemente, solo se averigua en terapia. Lo cierto es que la diseñadora no ha logrado sostener sus relaciones en el largo plazo, y con solo dos hombres ha querido, brevemente, convivir.

Solo Manuel Díaz El Cordobés , padre de su hija Alba, y su última pareja, el portugués João Viegas, han vivido bajo el mismo techo con Vicky. Al torero le conoció a los 24, se casó con él a los 24 y se divorció a los 28. A partir de entonces y hasta los 46, solo hubo (que sepamos) romances: Álvaro Muñoz Escassi, Israel Bayón o Lin Cortés. Con Viegas estuvo tres años y llegó a mudarse a Lisboa. La diseñadora admite que ha sido el gran amor de su vida, aunque solo han estado juntos tres años.

Vicky Martín Berrocal confiesa en su libro, 'La felicidad ni tiene edad ni tiene talla', que su última pareja, el portugés Joao Viegas, es el gran amor de su vida. / instagram

«He sido una mujer muy afortunada en el amor, pero también he sufrido mucho por él, presa de mi locura, de mi carácter, de mi apasionamiento y de mi forma de ser y de sentir», admite Vicky Martín Berrocal en su libro. «Lo creerás o no, pero casi todas mis historias han estado unidas al desasosiego, al temor: sufría cuando las vivía, sufría cuando se terminaban, sufría en mitad de todo eso… Sufría todo el tiempo».

«Nunca las disfruté porque desde el instante que empezaba una relación tenía miedo a que se terminara», reconoce Vicky Martín Berrocal sobre las relaciones sentimentales que han marcado su vida. «Creo que, en este sentido, los hombres no me han dado seguridad, sino que me la han robado. Por eso, a veces cunado me quedaba sola estaba mucho mejor que con ellos».

Por qué Vicky Martín Berrocal tiene a su lado mujeres que la aman de manera incondicional

Si el libro de Vicky Martín Berrocal deja traslucir una relación con los hombres más bien decepcionante, no sucede lo mismo con las mujeres. La diseñadora dedica las primeras líneas de su libro a homenajear a las personas más importantes de su vida. Solo es concisa, casi minimalista, al referirse a su hermana, Rocío. De ella se limita a decir en su dedicatoria: «Mi media mitad».

Con su única hija Alba y su madre Victoria, sin embargo, se le desbordan las palabras. De la hija mayor de Manuel Díaz el Cordobés, a la que llama «mi compañera, mi todo», dice: «Es una niña muy espiritual, no se parece mucho a las chicas de su edad y busca amigos de verdad, gente que le aporte y le trasmita algo. Tiene unos valores increíbles. Es mi gran compañera de vida».

Vicky Martín Berrocal con su madre, Victoria Martín Serrano, en una foto reciente. / instagram

«A mi madre no hay que perdérsela», asegura Vicky Martín Berrocal sobre su progenitora. Es infinitamente mejor que yo. Ella se adapta a todo y ha nacido para hacer feliz a la gente. No guarda rencor a nada, aunque haya sufrido momentos horribles. Siempre es capaz de dar de entregarse, de no reprochar. Es un titán. Me sorprende cómo ha pasado estos trece años desde que mi padre no está».

«Es muy especial, una señora en el sentido más amplio. La admiro por su sensibilidad y su saber estar. Es una mujer que transmite paz, a la vez es incansable y su percepción de la vida es alucinante. No hubiera podido ser de otra manera para estar al lado de mi padre durante 47 años. Algo tiene el agua cuando la bendicen. Cómo sería esa hembra para que mi padre, desde el día que la conoció, no la soltara».