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Vestido de Bevza y salones de Balenciaga.
editorial de lujo
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Tiene una voz limpia, acogedora, profunda y, cuando canta Little Bird, la canción que compuso en memoria de su madre, consigue emocionar. La hija de los actores John Travolta y Kelly Preston, Ella Blue Travolta (California, 2000), ha vivido desde muy joven las mieles y las hieles de la vida. Perdió a su hermano Jett, cuando él tenía 16 años y ella solo nueve. Y a su madre con apenas 20 años por un cáncer de mama. A pesar del dolor, los reveses vitales le han enseñado que la vida es tan hermosa como frágil y que hay que aprovechar cada momento.
Tras trabajar junto a estrellas de la talla de Morgan Freeman (Poison Rose) o Robin Williams (Dos canguros muy maduros) –y más recientemente en Get Lost, una revisión contemporánea de Alicia en el país de las maravillas–, a finales del año pasado presentó Colors of Love, su debut en el mundo de la música. Y lo hizo de la forma más personal y auténtica.
En su presentación como compositora y cantante, refleja distintas etapas de su vida y canta sobre la pérdida y la traición amorosa o el verdadero amor, en temas como Dizzy o Lost in your love. En esta entrevista, nos habla de cómo ha vivido y sufrido ella esas circunstancias, pero también de la catarsis que le ha supuesto componer. Y de esperanza, vida, confianza, futuro y cine.
También sobre moda, otra de sus pasiones, como demuestra en esta sesión de fotos realizada en un estudio de Brooklyn, en Nueva York. «¡Qué cariñoso! ¡Me hace feliz, muchas gracias!», contesta cuando le digo que tiene una voz preciosa y que sus canciones conmueven.
Abrigo de Max Mara y pendientes de Repossi. /
MUJERHOY ¿Cómo se siente después de haber estado tres años componiendo para su debut musical?
ELLA TRAVOLTA. Es increíble, me siento muy bien por haberlo conseguido. No tenía una fecha límite para terminar este trabajo y tampoco sabía si sería capaz de hacerlo. Pero compuse las canciones, grabé la mayoría de ellas y, más tarde, volví a grabarlas para cambiar algunas cosas. Ha sido un proceso largo, pero estoy muy orgullosa de haber escrito estas letras y compuesto las melodías para que la gente las disfrute.
Creo que empezó al piano, de una forma un poco espontánea, no premeditada. ¿Cómo fue el proceso?
Sí, comencé de una manera fortuita. Tocando el piano surgieron algunas ideas y las grabé en las notas de voz, sin instrumentos. Continué adelante y surgieron más letras y otras melodías. No sabía que eso podía ocurrir en mi vida, que tenía la capacidad de hacer canciones. Quería contar cosas que me habían ocurrido y que me estaban pasando en ese momento... Y todo fue fluyendo suavemente, de una forma muy natural.
Además del piano, toca también el ukelele. ¿Cómo se interesó por este instrumento?
Mi familia materna es de Hawái y he estado allí muchas veces. En una ocasión, lo escuché y me encantó. Es parecido a la guitarra, pero más fácil de tocar y empecé a hacerlo. Cuando estaba componiendo, me senté y toqué algunos acordes con el ukelele para ver cómo sonaban.
Este primer disco, Colors of love, refleja diferentes aspectos de su vida y distintas situaciones relacionadas con el amor: la pérdida, la traición, la primera experiencia romántica, el amor auténtico... Es usted muy joven, ¿los ha vivido todos? ¿Cómo pensó en escribir sobre esos sentimientos?
Es una pregunta complicada... Cuando escribía esas canciones, no siempre hablaba de mis experiencias personales. La mayoría lo son, pero otras no. Por ejemplo, aún no tenía novio cuando compuse sobre la traición amorosa. Surgió por observación, por las historias de otras personas, por cosas que había visto y oído. Fui juntando unas con otras, hasta llegar a la letra. En otros temas sí he mostrado mis sentimientos y experiencias. Fui componiendo y después pensé: «Tengo que juntarlas». Además, fue en ese momento cuando empecé a enamorame... Todo encajaba.
¿Está feliz con la respuesta del público? He leído muy buenas críticas y comentarios, por ejemplo en YouTube, con mucho cariño hacia usted y hacia su trabajo.
Sí, estoy agradecida y feliz por cómo la gente está recibiendo las canciones y está reaccionando a Little Bird. Me transmiten mucha alegría con sus comentarios, porque disfrutan y reciben sensaciones positivas y hermosas.
En Lost in your world, habla de su primera experiencia romántica. ¿Qué quería contar?
Fue quizá el primer tema que escribí en tiempo real, cuando estaba viviendo la experiencia del primer amor. Era algo totalmente nuevo y pensaba: «¿Qué me está pasando? ¿Qué son estos nuevos sentimientos?». También me planteaba si la otra persona sentía lo mismo, qué ocurriría en el futuro... La estaba componiendo y me estaba enamorando a la vez. Es una de mis canciones preferidas, porque puse mucho de mí en ella.
Top de punto de Versace. La gargantilla de oro y diamantes y el reloj Panthère de oro con doble pulsera son de Cartier. /
Little Bird es un homenaje a su madre. ¿Cómo le cambió la vida su trágica pérdida? ¿Afectó a su carácter, su personalidad, su forma de ver la vida?
De alguna manera, sí, aunque no como persona. Entendí que había que celebrar la vida y comprendí muy bien a otras personas que habían atravesado por esa misma situación. El tema es un canto a la vida y recalca que no debes dar nada por garantizado, porque puedes perderlo todo. La canción es una forma de celebrar todo el tiempo que disfruté con las personas que perdí, pero también todo el que quiero pasar con las personas que tengo ahora en mi vida.
En la canción y el videoclip, transmite un mensaje de esperanza, de momentos felices.
Es obvio que estaba profundamente triste, porque la muerte de una madre es algo que no querrías tener que vivir. Pero también es un reconocimiento a la vida de mi madre, a la que tanto quería. Es un mensaje para ella y para mí misma. Un homenaje a todo el tiempo que pasé a su lado. Una reflexión, mirando atrás, a los momentos tan felices que viví junto a ella.
Contó en una entrevista que ese proceso de componer le hizo descubrir la mujer que es. ¿Cómo es usted?
En este tiempo, he conseguido más confianza como mujer y como artista. Aprendí mucho sobre mí misma: que podía componer y que la música es una maravillosa forma de comunicación que te permite contar cosas que quizá no puedes decir de otra manera. También aprendí que la vida es hermosísima y a ser feliz por tener la posibilidad de trabajar en algo que me gusta y me llena. Sí, convertir lo que sentía en canciones, en letras y melodías me ha hecho saber quién soy, me ha dado confianza y me ha ayudado a descubrir qué quiero ser como artista.
Top de tirantes de Miu Miu. /
¿Cuáles son sus metas profesionales?
Quiero continuar, seguir escribiendo y componiendo canciones. También me gustaría empezar a dar algún concierto. Ahora estoy más motivada para escribir más temas y seguir disfrutando de todo este proceso.
¿Qué música le gusta escuchar y cuáles son sus fuentes de inspiración?
Pues me gustan mucho Norah Jones, Carly Simon... Pero también otros como Billie Eilish y Harry Styles. Admiro a muchos artistas y me encanta buscar nuevas propuestas, nuevas voces que me sorprendan y que utilicen formas de expresarse diferentes, como Lola Young.
¿Le gusta bailar? ¿Ha bailado en alguna ocasión títulos icónicos como Night Fever, de Fiebre del sábado noche, y You never can tell, de Pulp Fiction? Ambas películas, protagonizadas por su padre, triunfaron en todo el mundo y han traspasado generaciones.
Sí, claro. La ocasión más reciente en la que las escuché y bailé fue la pasada Nochevieja. Tuvimos una reunión familiar, con mis tíos, mis primos... Mi primo y yo fuimos los DJ y pusimos las dos canciones para bailarlas. Fue muy divertido.
Abrigo con manga corta de Dior y medias de Calzedonia. /
Su carrera profesional empezó en el cine, ha trabajado en varias películas y protagonizado Get Lost, de Daniela Amavia. ¿Quiere continuar compaginando ambos campos, la música y el cine?
Definitivamente, sí. Los dos mundos van de la mano, son complementarios y deseo seguir en los dos. Ahora tengo un proyecto de cine a la vista con mi padre. Estoy muy emocionada, pero prefiero no contar mucho más por el momento.
¿Cuándo sintió que la interpretación era su vocación?
Muy pronto. Creo que fue lo primero que quise hacer: de niña me encantaba cantar, actuar, bailar, jugar haciendo performances... He nacido y he crecido en un ambiente artístico, así que dedicarme a la interpretación surgió de una forma natural, nada premeditada. Lo sentía y tenía capacidad, por eso continué con ello. A los siete años, prefería actuar, pero siempre me ha gustado mucho cantar. Aunque tengo que reconocer que, con la música, no tenía tanta confianza; no sabía si era capaz de escribir una canción y una melodía.
¿Podríamos decir que esa faceta artística es casi una herencia familiar, que corre por sus venas?
Sí, totalmente. Es algo que fluye en mi interior, que corre por mis venas. Siempre he sentido que era mi camino en la vida, desde que era muy pequeña.
En una película musical podría actuar, cantar y bailar. ¿Se lo ha planteado alguna vez? ¿Le gustaría?
Desde luego que sí, me encantaría, sería muy divertido. Ojalá se presente la ocasión de hacerlo.
Top de manga corta y pantalones, de Issey Miyake. /
Cambiando de tema, sé que le gusta también la moda, pero no sé si como consumidora o si tiene interés más allá...
Me gusta porque es también muy creativa. Cuando era niña, como a muchas otras, me gustaba maquillarme, vestirme con ropas diferentes... Cuando crecí, dejé de prestarle atención. Pero después volvió a interesarme de una manera distinta, más desde la admiración por la creatividad. Y porque la ropa, la forma de vestir, genera emociones. Admiro el trabajo de los diseñadores, la capacidad de transmitir diferentes sensaciones. Me hace feliz jugar a mezclar looks, es una forma de expresarme con la que disfruto.
¿Se ve diseñando una colección? ¿Le gustaría, por ejemplo, hacer una colaboración con algún diseñador?
Me encantaría y espero tener la oportunidad de hacerlo.
CRÉDITOS:
Maquillaje: Olivia Barad para Dior (See Management).
Peluquería: Takuya Yamaguchi para Oribe (Wall Group).
Asistente de fotografía: Mike Sikora.
Diseño de luces: Nick Grennon.
Asistentes de estilismo: Vera Mezentseva y Mary Bace.
Representante de Ella Travolta: Agencia Stormmanagement.com.
Producción: Jean Jarvis.
Laboratorio: Tomasz Orlowski / Art Lab.