Jorge Vázquez posa en su casa de Madrid para Mujerhoy./Iciar Carrasco
Jorge Vázquez posa en su casa de Madrid para Mujerhoy. / Iciar Carrasco

Buen Gusto

Los tesoros de lujo que guarda Jorge Vázquez en su impresionante casa en el centro de Madrid

El diseñador gallego nos abre las puertas de su remanso de paz en la capital y nos presenta a sus queridos perritos.

Paula Peña

Lo más llamativo de la casa de Jorge Vázquez, además la artesanía, son sus perritos, Thomas y Philippa. Dos Teckle que le regalaron sus amigos y le siguen por toda la casa . El suelo por el que corretean cada día, original de construcción, es tan especial como el resto de piezas que alberga. Como los dos elefantes que custodian el salón: «Los compré en una subasta porque me recuerdan a las casas barrocas de los años 70», confiesa.

Como los dos elefantes que custodian el salón: «Los compré en una subasta porque me recuerdan a las casas barrocas de los años 70», confiesa el diseñador. Se define a sí mismo como un apasionado de la decoración y, no es para menos: su casa es un sueño en el que los tesoros asoman por doquier y cada rincón es un regalo.

Toda la casa de Vázquez está decorada con cajas. «Me encantan, sobre todo las de papel maché. Como esta negra con motivos pintados a mano. El grabado que está encima de la chimenea es de los años 50. Lo compré en un anticuario en El Rastro y me encanta. Hay algo en todo lo que es asiático que me fascina».

Thomas y Philippa, los Teckle de Jorge Vázquez.

Basta con ver la estantería de su salón, repleta de libros de arte, revistas, novelas... para darse cuenta de que a Vázquez le interesa la cultura en todas sus formas. «La lupa con el cuerno es un regalo que me hicieron por un cumpleaños. Nunca la había utilizado, pero desde que cumplí los 50 me viene bien para leer algunas cosas, como los créditos de foto de una revista», bromea.

La mesa tapizada con la lupa de Jorge Vázquez. / Iciar Carrasco

«No tengo que usar gafas para ver de cerca, porque si no se me nubla mucho. Así que es la solución perfecta». Y además, decora. La mesa tapizada sobre la que reposa tenía otro tejido. «Era negro y precioso, pero se iba la tela y se le hacían agujeros. Por eso lo tuve que reemplazar por otra tela que imita a un tapiz, aunque me dio muchísima pena», se sincera.

La caja que Jorge Vázquez ha colocado encima de su chimenea.

«Esta silla es muy especial porque es india y está hecha con mosaico de nácar. Es un trabajo artesanal increíble. Igual que el de la porcelana china: la tengo decorando toda la casa porque me encanta«, explica sobre cómo ha ido configurando la colección de antigüedades en la que se ha convertido su casa de Madrid.

Un rincón del salón de Jorge Vázquez.

Aunque, asegura, en Galicia tampoco se queda corto en materia de piezas especiales de decoración. «Siempre busco nuevas piezas. El mueble también lo conseguí en El Rastro, rescatado de los 70. Tengo otro igual en Galicia que es rojo y turquesa, en lugar de negro», explica el diseñado», termina.