La reina Letizia se dio un verdadero baño de masas a su llegada a la catedral de Pamplona, donde junto al rey Felipe celebró el 600 aniversario de la fundación de la ciudad, con la firma del Privilegio de la Unión. Arrasó, también, con un vestido blanco deslumbrante , que subrayaba sus icónicos brazos y una melena más imponente que nunca. La verdad: la monarca estaba más guapa que nunca y sus fans se la comieron a fotos y a piropos.
Letizia domina a la perfección estas situaciones y, ante la ingente demanda de sus fans en el exterior de la catedral de Pamplona, supo lucirse. Se dejó saludar, piropear, fotografiar y casi abrazar, pues las señoras adelantaban sus manos para tocar mínimamente a la reina. Esta cogió las manos a alguna muy veterana, visiblemente emocionada ante la cálida actitud de la monarca. Que iba más guapa que nunca de blanco , por cierto.
El vestido blanco, en múltiples variantes , figura entre los looks favoritos de la reina Letizia, tanto para el día como en eventos más formales. De hecho, este vestido que triunfó en Pamplona es de Sfera y ya lo lució en la primavera de 2022, en el acto de entrega de la bandera nacional a la Fuerza de Guerra Naval Especial que tuvo lugar en Cartagena. Se trata de un diseño muy veraniego pese a su largo midi, gracias a su manga sisa y a la preciosa textura del encaje que lo adorna.
La monarca volvió a llevar este vestido blanco el pasado mayo, en la recepción en el Palacio Real al presidente de Colombia, Gustavo Petro, y su esposa, Verónica Alcocer. Atención, porque es un diseño que ha estado en Sfera durante dos temporadas a un precio imbatible: alrededor de 50 euros. Letizia lo lució entonces con unos zapatos muy parecidos a los que llevó en Pamplona: unos Carolina Herrera destalonados y de tacón cómodo, de color 'nude'.
Quizá para compensar la sencillez de su vestido, un diseño sin más adorno que el encaje del textil, Letizia rescató de su joyero unos pendientes que no llevaba desde hace años: una joya firmada por Yanes, confeccionada en oro blanco, diamantes, turmalinas rosas, aguamarinas y perlas australianas. Unos pendientes protagonistas que añadían aún más luz a su look.
Imposible no detacar el look 'beauty' de la reina, a la que hemos visto más rejuvenecida y con una piel refrescada deslumbrante. No sabemos si es efecto del descanso veraniego o de algún tratamiento de comienzo de curso, pero Letizia estaba más guapa que nunca. Nos gusta especialmente su apuesta por una melena frondosa y larga , más oscura pero con su característico mechón canoso. Porque después de los 50 también se puede lucir un pelo largo.
La agenda de los reyes Felipe y Letizia en esta conmemoración del Privilegio de la Unión transcurrió en la Catedral de Santa María la Real y el Ayuntamiento de Pamplona, donde ejerció de anfitriona Cristina Ibarrola, alcaldesa, junto a María Chivite, presidenta de Navarra, e Isabel Rodríguez, ministra en funciones de Política Territorial. Allí visitaron el Salón de Planos y firmaron en el Libro de Honor.
En la catedral, los monarcas visitaron el mausoleo del rey de Navarra Carlos III y de su esposa, la reina Leonor de Trastámara o Leonor de Castilla, quien adujo malos tratos a finales del siglo XIV para escapar de la corte navarra y volver a su Castilla natal. Tras seis años de alejamiento voluntario, Leonor volvió a la vida marital y llegó a ser regente de Navarra en ausencias del rey y fue determinante en el entendimiento y buenas relaciones con Castilla.
Navarra celebra el 600 aniversario del Privilegio de la Unión, un tratado otorgado por el rey de Navarra Carlos III el Noble que fundía en la ciudad de Pamplona los tres principales burgos medievales, enfrentados por constantes discordias. Aquella 'jurería' es origen del actual ayuntamiento, que ha tirado la casa por la ventana para organizar un centenar de eventos para festejar seis siglos de convivencia pacífica. Una de ellas será la recreación de la firma del Privilegio.
20 de enero-18 de febrero
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