Magnesio, el mineral esencial para adelgazar y reducir el cansancio

Una alimentación equilibrada, como su propio nombre indica, tiene que tender al equilibrio de nutrientes. Dejar de lado uno u otro puede llevarte a ciertos problemas en el funcionamiento del cuerpo o de la mente, puesto que todo está unido. Hoy vamos a hablarte de la importancia del consumo habitual de magnesio, un mineral que interviene en más de 300 reacciones bioquímicas en el cuerpo.

Sí, el magnesio es muy importante para el correcto funcionamiento del organismo. Es fundamental para el correcto funcionamiento de músculos y nervios, el sistema inmunológico y el mantenimiento de los huesos. Pero es que además regula los niveles de glucosa en la sangre, ayuda en la producción de proteínas y colabora en el buen funcionamiento del sistema cardiovascular.

Este mineral también es un aliado muy valioso para quienes buscan perder peso y reducir el abdomen. Esto es así porque ayuda a acelerar el metabolismo, aumentando la quema de calorías incluso cuando estás en reposo, además de mejorar la digestión y la relajación muscular.

Por un lado, el magnesio mejora el metabolismo de los carbohidratos y las grasas, ayudando al cuerpo a usar la energía de manera más eficiente. Y por otro lado, promueve la digestión, ya que regula el tránsito intestinal y previene el estreñimiento.

Para finalizar, el magnesio juega un papel en la relajación muscular y la reducción del estrés, lo que puede evitar la acumulación de grasa abdominal relacionada con el cortisol, la hormona del estrés.

El magnesio también es conocido por su capacidad para reducir la fatiga y mejorar los niveles de energía. Esto se debe a que su consumo aumenta la producción de adenosina trifosfato (ATP), la principal molécula de energía en el cuerpo, lo que ayuda a enfrentar el día con ganas.

Además, el magnesio es un mineral clave para las personas activas y deportistas, ya que ayuda en la recuperación muscular después del ejercicio, aliviando el dolor muscular y previniendo los calambres. También mejora el rendimiento físico al regular los niveles de glucosa y controlar el equilibrio de electrolitos.

1. Frutos secos y semillas: los expertos recomiendan el consumo de almendras, semillas de lino, cacahuetes, pepitas de calabaza y semillas de chía para incrementar la ingesta de magnesio.

2. Cereales integrales ricos en fibra: la quinoa y el trigo sarraceno son los que más magnesio contienen.

3. Legumbres: altamente nutritivas, variedades como los frijoles negros, las alubias y la soja tierna (edamame) son ricas en energía y magnesio.

4. Productos lácteos bajos en grasa: si bien se los suele recomendar por su alto contenido en calcio, estos alimentos también son una buena fuente de magnesio.

5. Verduras de hoja verde: verduras como espinacas, acelgas y col rizada (kale) son excelentes fuentes de magnesio.

6. Frutas: especialmente aguacate, plátano, papaya y moras.

7. Dátiles: este fruto es rico en hierro, potasio, calcio y magnesio además de fibra.

8. Verduras: otros vegetales como los guisantes, el maíz y las patatas contribuyen a los requerimientos diarios de magnesio.

9. Chocolate negro: es uno de los alimentos que más magnesio contiene, con 500 miligramos de magnesio por cada 100 gramos de producto.

10. Agua: el agua, tanto la mineral como la del gripo, contribuye al aporte de magnesio conteniendo entre 1 mg y 120 mg por litro.