Expertos en plantas nos explican cómo cuidar la Poinsettia o Flor de Pascua para que esté preciosa todo el año: riego, luz y ubicación

La Poinsettia o Flor de Pascua es, sin duda, una de las plantas de interior más famosas y reconocibles que tenemos en casa. Y aunque es típica de la Navidad, lo cierto es que con unos cuantos cuidados muy sencillos será muy fácil de conservar preciosa en nuestros hogares durante todo el año.

Lo más llamativo y característico de esta planta originaria de México que, cuentan, es signo de amor y sinónimo de buena suerte , son sus preciosas flores rojas, aunque las hay en otros tonos como amarillo o rosa, que resaltan aún más su color en contraste con el intenso verde de sus hojas.

Como decíamos, la Flor de Pascua es una planta de origen tropical y esto es, precisamente, lo que entra en conflicto con nuestro clima continental de temperaturas extremas y puede dificultar sus cuidados. Aunque, tal y como explican desde Interflora, «aunque la Poinsettia parezca delicada, no lo es tanto».

La clave para que nuestra Flor de Pascua sobreviva a las Navidades y esté preciosa todo el año está en seguir de forma rigurosa los consejos de los expertos y saber, exactamente, cuándo y cuánto regarla y dónde colocarla para que reciba la luz que necesita y esté expuesta a una temperatura adecuada a sus necesidades en cada momento.

Según los consejos de Magalí Puig, Plant Expert de Colvin, uno de los trucos para que la Poinsettia nos dure de una Navidad a otra y se conserve en buen estado todo el año es buscarle un buen sitio en casa. O, lo que es lo mismo, que esté en un lugar « entre 15 y 23 ºC, en un espacio sin corrientes de aire ni radiadores, porque no le van los cambios bruscos de temperatura».

Desde Stars for Europe nos indican, además, que «las flores de Pascua necesitan situarse en un lugar iluminado, como una ventana, ya que necesitan mucha luz, sobre todo en invierno, para mantener sus hojas vivas. Si la ventana está orientada al este o al oeste, recibirá mucha luz, pero sin rayos intensos. Sin embargo, a finales del año una ventana orientada al sur es una buena elección, puesto que el sol es menos intenso en esta época», puntualizan los expertos.

No obstante, desde Stars for Europe recomiendan que «es importante no pegarla a un cristal frío, puesto que puede dañar las hojas; colocar un posavasos de fieltro o un material similar debajo de la maceta para que el frío no llegue a las raíces y no ponerla cerca de los fruteros, ya que ciertas variedades como las manzanas o los plátanos emiten etileno, lo que hace que las plantas envejezcan más rápidamente».

Además, desde Interflora nos recuerdan que «la calefacción es su enemiga y provoca que se caigan las hojas» y desde Bourguignon Floristas añaden que lo mejor es «buscar un lugar en el que la planta reciba luz natural, pero sin exponerla directamente a los rayos del sol».

Una vez hemos encontrado el lugar perfecto para nuestra Poinsettia, toca prestar atención al siguiente paso: el riego. «Riégala cuando notes uno o dos centímetros de la tierra secos», apuntan desde Colvin, que además nos recuerdan que « el riego es mejor por inmersión. Pon la planta en un cuenco o plato con agua no muy fría y déjala 15 minutos. Retírala y deja que escurra el agua sobrante. Y que no le caiga agua en sus hojas«.

La frecuencia de riego también es un aspecto que debemos tener en cuenta, y desde Bourguignon Floristas recomiendan que lo normal es hacerlo « un par de veces por semana«, además de añadir abono líquido cada 15 o 20 días. Magalí Puig, de Colvin, añade un cuidado extra: «un poco de abono para plantas verdes de primavera a otoño. Te recomendamos el humus de lombriz líquido ¡Le encanta!» y en cuanto al sustrato «80% sustrato universal, 20% perlita y base de arlita».

Desde Stars for Europe nos recuerdan que «hay que tener en cuenta que el hecho de que la Flor de Pascua pierda sus coloridas brácteas y sus hojas verdes después de la floración es totalmente normal, ya que esto supone que está entrando en una fase de letargo. Eso sí, si vemos que empieza a tener las hojas rizadas, nos indica que se encuentra en un ambiente con el aire demasiado seco o que está teniendo un riego insuficiente«, por lo que recomiendan »incorporar a tu hogar un humidificador«.

Además, los expertos de Colvin nos recomiendan podarla cuando pasen las Fiestas y las hojas empiecen a caerse, « cortando todos los tallos y dejándolos de unos 10 cm de largo aproximadamente. Luego, sella cada corte con canela en polvo, para las plantas el corte es una herida y la canela sirve como antiséptico natural para que no cojan ningún tipo de infección». Eso sí, tal y como recuerda Magalí Puig, debemos hacerlo siempre con guantes porque su savia irrita la piel.