DECORAR CON PLANTAS Los lugares de la casa donde no deberías colocar nunca la planta de jade o árbol del dinero

Tener plantas en casa es uno de los puntos clave de la decoración para convertirla en un hogar. Lo malo es que precisan de cierto cuidado, y no a todos se nos da bien mantenerlas con vida. Por ello solemos optar por plantas de interior resistentes que sobrevivan incluso cuando nos olvidamos de regarlas. Una de esas plantas es el jade, la mejor opción para los novatos.

La planta jade cuenta con unas hojas verdes de mucha carnosidad y tallos muy gruesos. Tiene una forma de crecer muy lenta y se trata de una de las más duraderas. Además de esta razón, el jade es una de las plantas más demandadas porque se la conoce como planta del dinero, simbolizando la prosperidad y la abundancia en la cultura china.

La planta del dinero es una de las más resistentes, pero si no le das los cuidados necesarios, puedes correr el riesgo de matarla antes de tiempo. Tranquila, no necesita muchas atenciones, pero debes tener ciertas cosas en cuenta para que te dure lo máximo posible:

- Riego: el jade necesita un sustrato con un buen drenaje y debe ser regada cada 15 días. Eso sí, cuando vayas a hacerlo ten cuidado de no mojar las hojas para que se conserve en buen estado. De hecho, durante el invierno puedes alargar el riego todavía más, hasta un mes.

- Luz: la planta de jade no debe estar ni muy expuesta al sol ni tampoco en un lugar muy húmedo y frío. Debes colocarla en un sitio donde le de la luz, pero no directamente. Además, durante el verano no se puede exponer al sol porque las hojas del árbol del dinero se podrían quemar. Y en el invierno se debe evitar mucho el frío y la humedad porque podría pudrir las raíces de la planta.

Lo más recomendable por los expertos es dejar la planta en los interiores del hogar, puesto que es en dicho sitio donde pueden disfrutar de un clima moderado o intermedio. Sin embargo, vale decir que esta planta se puede colocar en los exteriores durante la época de la primavera.

Por otro lado, deberías evitar colocarla en la cocina, los baños o los dormitorios ya que suelen ser lugares de climas muy extremos, sobre todo en el caso de la cocina, o húmedos, en el caso del baño. Con respecto al dormitorio, intenta evitarlo para no dormir con la planta en el momento en el que está expulsando dióxido de carbono.

1. Limpian el ambiente y regulan la humedad: las plantas expulsan dióxido de carbono por la noche, pero el resto del día aportan oxígeno fresco. Además, absorben gases contaminantes, mejoran y purifican el aire y consiguen que el ambiente tenga un poco más de humedad.

2. Combaten el estrés: Hay estudios que demuestran que mantener plantas en la casa puede ayudar a reducir el estrés y mejorar significativamente el bienestar mental. Además, ayudan a trabajar la paciencia, relajan y aumentan la autoestima. Cierta evidencia sugiere que la lavanda oral o la aromaterapia con lavanda pueden reducir la ansiedad.

3. Mejoran la memoria y la concentración: Un estudio reciente realizado por la Universidad de Michigan descubrió que estar en la naturaleza o rodearte de plantas de interior aumentaba la retención de la memoria hasta en un 20%. Además, al requerir unos cuidados específicos, mejoran la concentración.

4. Reducen el ruido: los hogares son más equilibrados y tranquilos cuando tienen plantas porque éstas absorben el ruido y pueden reducirlo ligeramente. Eso sí, ten en cuenta que hemos dicho ligeramente, no sirven para insonorizar una estancia, pero algo pueden ayudar.

5. Mejoran el aroma del hogar: El aroma de ciertos tipos de flor puede ser lo suficientemente potente como para percibirse en toda la habitación. La peonía, la rosa, el lirio, la lavanda o el jacinto son excelentes ejemplos del tipo de planta que podemos usar tanto de adorno como de ambientador.