La llegada del otoño significa que el verano ha terminado y que es momento de volver a la rutina y también de conectar con el hogar. Toca poner la casa a punto para afrontar el invierno y seguir la máxima de «en casa como en ningún sitio». Y para ello a veces es necesario darle un giro total a la decoración con ideas prácticas y muy bonitas. Desde pequeños cambios deco a otros de más grandes. ¿Una de las tendencias que viene pisando fuerte? Pintar el suelo de madera.
Una tendencia muy recomendable en especial en los suelos de madera que han ido sufriendo erosiones a lo largo del tiempo y el uso cotidiano. Uno de los materiales por excelencia para usar como suelo en casa, ya que destaca por su belleza y naturalidad, pero al mismo tiempo es muy delicado. Pintar el suelo de madera será la mejor solución para conseguir darle un aire totalmente renovado, moderno y elegante al mismo tiempo. Sigue leyendo para descubrirlos trucos para hacerlo con mucho éxito.
El suelo es considerado como la superfície que mayor desgaste sufre por las constantes pisadas diarias que recibe. Un problema que se acentúa con los de madera. Por ello, la pintura se convierten en una de las soluciones más eficaces y rápidas para esconder estos inconvenientes que se van formando.
El verde en la pared y en el suelo es una solución para renovar tu casa y darle un aire moderno. /
Ahora bien, no toda pintura funciona, si no que debe ser fabricada especialmente para el suelo. Esto significa que tendrá mayor dureza y resistencia. En la actualidad existen muchas opciones y colores para encontrar la que mejor encaja en cada habitación. Y también hay variedad en los precios.
Antes de ponerse manos a la obra es necesario preparar la superficie y para ello se deberán llegar a cabo un seguido de pasos. El primero es hacer una limpieza a fondo y asegurarnos que está libre de humedades. Seguidamente, toca aplicar un primer lijado con una máquina especializada para ello. Una vez terminado, es momento de pasar el aspirador para eliminar el polvo. Y finalmente, se debe llevar a cabo un segundo lijado y volver a desempolvar.
El proceso empieza con la primera capa de pintura, y para ello es necesario proteger los rodapíes con cinta de carrocero. Seguidamente, mezclar la pintura y listo para pintar. Empieza por el perímetro de la estancia con una brocha redonda en una área equivalente a una lama de madera y sigue con el rodillo desde el fondo hacia la salida de la habitación.
Para pintar el suelo de madera con éxito son necesarias dos capas de pintura. /
Pasadas unas 12 horas aproximadamente toca aplicar la segunda capa. Pero antes, será necesario volver a pasar una lija fina de grano 180. ¿El motivo? Se consigue resaltar la veta de la madera y facilitar la adherencia de la siguiente capa. Aspira el polvo cuidadosamente y ya estará listo para la segunda capa, en la cual es necesario seguir el mismo procedimiento que la primera.
Desde un total white a la combinación de varios colores o incluso estampados. Elegir el color es una decisión muy importante porque tendremos que convivir con él a diario. Precisamente, no se trata de una espacio que podamos cambiar con mucha facilidad, ya que cada vez que queramos hacerlo supone despejar la habitación y llevar a cabo todos los pasos explicados.
En la actualidad prácticamente todos los colores se encuentran disponibles en formato pintura para el suelo. Con indagar un poco se encuentra y los precios varían en función de algunos parámetros como la calidad y resistencia de la misma. Un consejo: tómate tu tiempo para elegir.
El salón también es un buen espacio para pintar el suelo y renovarlo. /
Además de colores, también existen varios tipos de pintura con los que se puede renovar el suelo de madera. ¿El más recomendado? La acrílica o resina bicomponente por su poder de cubrición. Las de esmaltes al agua también son muy recomendadas ya que son fáciles de utilizar y se limpian y secan con facilidad. Siempre, pero, es necesario pasar una capa de barniz para una mayor protección.
¿Cuál será el color elegido para pintar el suelo de madera? Una solución muy versátil y económica que permite renovar el suelo de forma rápida y sin necesidad de hacer obra alguna. Sin olvidar, que es un la forma ideal de darle un giro a la decoración del hogar y conseguir ese bienestar tan necesario.